TheWacher
Forer@ Senior
Sin verificar
El Princio de Peter
Hace mucho tiempo comencé a escuchar la frase El Principio de Peter incluida en conversaciones cazadas al vuelo.
Tardé unos cuantos años en tener una idea exacta de su significado y desde entonces ha sido una de las cosas que mas me han comido la cabeza, por expresarlo de una forma coloquial.
Resumiendo el concepto, más o menos dice: En una empresa, todo empleado promociona hasta su nivel de incompetencia.
Este principio, seguramente se puede extender a otros ámbitos como el de la política.
Si se piensa un poco, parece que el hecho que proclama dicho principio es incuestionable, digámoslo así: ¿Cuando se promociona a un empleado para un puesto de mayor responsabilidad ? >> Cuándo se muestra competente en la actividad que desarrolla en la actualidad. Por el contrario ¿Cuándo dejamos de promocionarle ? >> Cuando deja de ser eficiente en la actividad que desarrolla. De ello se deduce que desde el momento en el que alcanza su nivel de incompetencia lo único que proporciona a la empresa son errores y malestar.
Yo añadiría mas, a causa de natural instinto de supervivencia del ser humano, el empleado llegado a dicho grado de incompetencia, se rodeará de colegas a su vez incompetentes para que le ayuden en sus quehaceres, con el fin de que no cuestionen sus procedimientos y actúen como barreras. Y consecuentemente, rechazará a los subordinados que sean realmente válidos, por razones obvias.
El Nepotismo
Favoritismo con los parientes o allegados para conceder cargos o privilegios por parte del que detenta el poder.
Creo que ambos conceptos suelen ir unidos. Si tengo un allegado que es muy eficiente pegando sellos de correos en la correspondencia, tan eficiente que se me saltan las lágrimas al ver su empeño en el dasarrollo de la taréa, con lo tonto que es el pobre. Todo en mi ser me pide que le promocione al puesto de supervisor del departamento de Intervención. Si cedo ante semejante instinto, a partir de ese momento, tanto la correspondencia de entrada como de salida tendrá destinos inciertos.
Estos pensamientos se ma han venido a la cabeza ante la lectura de ciertos casos de nepotismo que han circulado por la prensa estos días. Por la derecha y por la izquierda.
¿ Como veis vosotros estas cuestiones ?. ¿ Tienen solución ?. ¿ Es posible asumir que si un hijo es lelo no se le debe poner al frente de la empresa ?
Hace mucho tiempo comencé a escuchar la frase El Principio de Peter incluida en conversaciones cazadas al vuelo.
Tardé unos cuantos años en tener una idea exacta de su significado y desde entonces ha sido una de las cosas que mas me han comido la cabeza, por expresarlo de una forma coloquial.
Resumiendo el concepto, más o menos dice: En una empresa, todo empleado promociona hasta su nivel de incompetencia.
Este principio, seguramente se puede extender a otros ámbitos como el de la política.
Si se piensa un poco, parece que el hecho que proclama dicho principio es incuestionable, digámoslo así: ¿Cuando se promociona a un empleado para un puesto de mayor responsabilidad ? >> Cuándo se muestra competente en la actividad que desarrolla en la actualidad. Por el contrario ¿Cuándo dejamos de promocionarle ? >> Cuando deja de ser eficiente en la actividad que desarrolla. De ello se deduce que desde el momento en el que alcanza su nivel de incompetencia lo único que proporciona a la empresa son errores y malestar.
Yo añadiría mas, a causa de natural instinto de supervivencia del ser humano, el empleado llegado a dicho grado de incompetencia, se rodeará de colegas a su vez incompetentes para que le ayuden en sus quehaceres, con el fin de que no cuestionen sus procedimientos y actúen como barreras. Y consecuentemente, rechazará a los subordinados que sean realmente válidos, por razones obvias.
El Nepotismo
Favoritismo con los parientes o allegados para conceder cargos o privilegios por parte del que detenta el poder.
Creo que ambos conceptos suelen ir unidos. Si tengo un allegado que es muy eficiente pegando sellos de correos en la correspondencia, tan eficiente que se me saltan las lágrimas al ver su empeño en el dasarrollo de la taréa, con lo tonto que es el pobre. Todo en mi ser me pide que le promocione al puesto de supervisor del departamento de Intervención. Si cedo ante semejante instinto, a partir de ese momento, tanto la correspondencia de entrada como de salida tendrá destinos inciertos.
Estos pensamientos se ma han venido a la cabeza ante la lectura de ciertos casos de nepotismo que han circulado por la prensa estos días. Por la derecha y por la izquierda.
¿ Como veis vosotros estas cuestiones ?. ¿ Tienen solución ?. ¿ Es posible asumir que si un hijo es lelo no se le debe poner al frente de la empresa ?