Extraño caso de niño y ancianito (con moraleja)

Pues esto va de un niño que era muy malaúva (esta palabra no sé si existe, pero debería de existir) y muy sinvergüenza, y siempre se estaba riendo de un ancianito que era cojito. Y un día, cuando el niño había acabado de insultar al yayo (que lo hacía todos los días, ya he dicho que era un sinvergüenza) y se dio la vuelta para irse a casa, el ancianito le chafó la cabeza con una pala; y al ancianito se le concedieron las más altas condecoraciones de la patria y una pensión vitalicia, que quiere decir que era para toda la vida del ancianito en este mundo; y la cosa parece que iba para largo, porque el ancianito tenía doce años y -aparte de cojito y de tener muy mal pronto- gozaba de buena salud, dentro de lo que cabe esperar de una persona de sus años. Y cuando eran las fiestas del lugar, el ancianito era el encargado del tradicional chupinazo y de abrir el baile (con un par de co¬ones) con la mairalesa. Y no se reía ni Dios del ancianito, aunque bailaba de pena, porque se acordaban de la pala. Y esta es la historia, y es verdadera. Bueno, igual lo de la edad del ancianito no era del todo verdad, pero lo otro sí. Yo creo que el ancianito hizo bien.

Edito para decir que malaúva no sale en el DRAE. Un olvido imperdonable.

Cierro el hilo por si las moscas.