Montxo Grau
Milpostista
Sin verificar
Vamos a ver la cuestión, surgida a raiz de una iniciativa en el ámbito de la salud y sus colaterales y que, francamente, supone una ilustración muy evidenciadora y relevante de las confusiones, errores y -y eso es lo que siempre se oculta – actitudes de voluntaria mala fe y oportunismo ( aunque podamos ofrecerles la supuesta coartada de la ignorancia ) que acontecen en nuestra sociedad global / plural.
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En dicho curso, que desarrolla <?xml:namespace prefix = st1 ns = "urn:schemas-microsoft-com:office:smarttags" /><st1ersonName ProductID="la Fundació" w:st="on">la Fundació</st1ersonName> d´Infermeria Catalana, con la ponencia y activa participación de integrantes de colectivos cuyo origen es allende a nuestra tierra ( la que los antiguos denominaban Iberia ), se pretende enfocar / situar / entender / interpretar la adecuación del entorno sanitario – y todas sus circunstancias y ámbitos profesionales implicados, que son múltiples y variados – a las realidades humanas cuya base cultural y geográfica difiere de la nuestra.
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Y eso, simplemente, porque hay una realidad innegable: la gente a veces se pone enferma ( de verdad, no me refiero a que les coja un síncope por aguantar estupideces, esto sólo se solucionaria exterminando los estúpidos y llevaría demasiado tiempo… ) y el sistema sanitario de nuestro país – que muchos denostan sin ninguna base y son los primeros que, ante una situación de gravedad realmente importante y seria, deberán “soportarla” porque sinó sus malditas mutuas privadas van a pasar olímpicamente de ellos - procura poder responder ( con todas las limitaciones presupuestarias y logísticas que existen ).
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Si uno presupone – que ya es mucho, a tenor de los ejemplos contrarios que se pueden enumerar sin temor a faltar a la ecuanimidad – que una persona ( o comunidad, entendida ésta como el conjunto de integrantes de una misma procedencia ) que se instala en este país viene con unas mínimas nociones de qué va la cosa, puedo certificaros que se desbarata toda ilusión. Simplemente, - y como antaño realizaron los buscadores de fortuna, y después muchos emigrantes a la progresista Europa - buscan su Eldorado.
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Y claro, no existe. Pero es que pretender un imposible y, además, no adecuar ( y eso significa, radicalmente, transformar ) tus concepciones en muchísimos aspectos – incluso filosóficos, por aprovechar una acepción – sólo lleva a la hecatombe. O al disparate, que camuflado de buena voluntad y confraternización ofrece un singular y peripatético conjunto de actitudes y disposiciones que ni Kafka en sus mejores esfuerzos pudo elucubrar.
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Así lo evidenciaba una persona que llegó aquí en el año 1978, procedente de Guinea : “ Yo esperaba que, al llegar al aeropuerto, me esperase un coche con chófer y tendría una gran casa”. Obviamente él asume que actuó como un completo ingenuo , y mira que procedía de una familia más que acomodada. Pues extrapolemos una creencia similar amplificada y exacerbada por muchos de los africanos, sudamericanos, asiáticos y algunos países de nuestra decrépita Europa que ( con unas penurias inimaginables y unas renuncias personales difíciles de calibrar por quienes no han pasado por ellas ) se han largado de su lugar natal.
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Sí, se han largado de allí, pero a veces parece que no quieren que muchas cosas dejen de ser como allí eran. Y eso no funciona. Y entonces ¿ cómo afrontar la paradoja de un individuo cuyo único referente es el chamán de su pueblo o grupo tribal, y ante un tratamiento o recomendación médica para la tuberculosis simplemente ignora todas las disposiciones y actuaciones necesarias porque, desde su perspectiva, su enfermedad está motivada exclusivamente por un mal influjo, mal de ojo o simpleza equivalente ? ¿ Qué actuación corresponde a los profesionales de la salud ante la negativa a que una mujer médico realice su labor o, el caso contrario, que un médico varón asista a una mujer oriunda de determinadas culturas ? ¿ Cómo eliminar - porque de eso se trata, de quitar lo pernicioso y malévolo de muchas ignominiosas tradiciones , siempre curiosamente alentadas por hombres… - todo vestigio de lastre que choca frontalmente con el respeto al ser humano, llámese ablación, poligamía, etc… ?
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Que nadie se confunda : no pretendo confrontar el “conocimiento” occidental ( o del siempre pretenciosamente denominado Primer Mundo ) a otros “conocimientos” que pueden resultar objetivamente eficaces y que están enraizados en otras culturas. Hay evidencias de la bondad de determinadas prácticas chamanistas en culturas americanas, y de la eficacia de compuestos alternativos , y las prácticas de raiz animista ofrecen otro espectro que no enjuicio como necesariamente nocivos, así como enfoques sanadores en la tradición de Extremo Oriente.
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No. Se trata de evidenciar que un ámbito ( en este caso, nuestra sociedad ) ha de ser perfectamente permeable a todo aquello que le aporte mejoras y evolución, pero taxativamente descartar cualquier balón de oxígeno que sirve de acicate para lo que sólo le causaría una regresión en su objetivo conceptual.
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Para que ello resulte eficaz y efectivo ( para todos ) es preciso enseñar y educar… pero ¿ hay voluntad de comprometerse en ello, multilateralmente ? ¿ Hay voluntad de aprender también por parte de todos, no sólo los que ya estábamos ? ¿ O aún tendré que aguantar sandeces del estilo que <st1ersonName ProductID="la SIDA" w:st="on">la SIDA</st1ersonName> es una enfermedad creada por los blancos para acabar con la raza negra ? ¿ O asistir atónito a la decisión de alguien que, de manera perentoria, precisa de descanso para mitigar su dolor y enfermedad y opta por acudir a un tirador de cartas para comprobar si su destino le señala como merecedor del infortunio que le acontece y no perder ni un día de trabajo ,por lo que ello pueda conllevarle y más si su situación es ilegal o comprometida ?
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Quizás alguien podrá alegar ( se supone que bienintencionadamente, aunque cada vez más me parecen gravemente perniciosos los que actuan bajo ese enfoque, acostumbran a ser manifiestamente tontos ) que las culturas tienen esas cosas, que el problema arranca de los restos del colonialismo, que no es correcto despojar de sus esencias a quienes no han tenido más solución que buscar una vida distinta…
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Chorradas. Cualquier país africano ha tenido suficiente tiempo ( desde que el último consiguiese la independencia ) para formular un avance – de toda índole - que no se ha producido porque sus oligarcas son los primeros a quienes les importa un carajo su gente y sus necesidades; ellos son los responsables en primera instancia de las calamidades, y nadie debe obviar las ancestras divisiones/confrontaciones innatas en esas tierras, y todo lo que se intente llevar a cabo desde nuestro mundo simplemente fracasará ( y eso lo aceptan sin reservas todas las organizaciones serias – que tampoco hay tantas – que operan en múltiples acciones sobre el terreno ); cualquier originario de ciertos países de Asia y Norte de Africa debería considerar la validez de ciertas actitudes - ¿ saben ustedes cuanta invisibilidad ( y lo que ello supone ) ahoga a las mujeres y niñas en una ciudad como Barcelona ? - y las reclamaciones o impedimentos para que una hija no asista a clases de gimnasia o natación en presencia de chicos ?; la existencia de guettos “homologados” – y la comunidad china sabe mucho de esa singularidad - , en que las relaciones sociales y formales se “focalizan” de acuerdo a unas pautas casi inamovibles condicionan enormemente la evolución de sus integrantes, y eso no tiene más responsables que a ellos mismos…
<o></o>
Es evidente que existen canales, acciones, actitudes y voluntades ( por parte y origen de todo tipo ) que procuran superar esos escollos y lacras, pero a veces me resulta inevitable un halo de enorme escepticismo. Porque es evidente que si hay aspectos cuestionables como los que he especificado, existen otros igualmente ( o más ) reprobables por muchos de los que desde aquí deberían convertirse en adalides de una entente que promueva el avance humanista – entendido desde la concepción más clásica o renacentista del término – del ser humano.
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Pero claro, cuando a un especiimen con capa que vive en el más minúsculo país de <st1ersonName ProductID="la Tierra" w:st="on">la Tierra</st1ersonName> le da por vomitar esas sandeces, pues así estamos…
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></o>No. Se trata de evidenciar que un ámbito ( en este caso, nuestra sociedad ) ha de ser perfectamente permeable a todo aquello que le aporte mejoras y evolución, pero taxativamente descartar cualquier balón de oxígeno que sirve de acicate para lo que sólo le causaría una regresión en su objetivo conceptual.
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></o>Para que ello resulte eficaz y efectivo ( para todos ) es preciso enseñar y educar… pero ¿ hay voluntad de comprometerse en ello, multilateralmente ? ¿ Hay voluntad de aprender también por parte de todos, no sólo los que ya estábamos ? ¿ O aún tendré que aguantar sandeces del estilo que <st1
ersonName ProductID="la SIDA" w:st="on">la SIDA</st1ersonName> es una enfermedad creada por los blancos para acabar con la raza negra ? ¿ O asistir atónito a la decisión de alguien que, de manera perentoria, precisa de descanso para mitigar su dolor y enfermedad y opta por acudir a un tirador de cartas para comprobar si su destino le señala como merecedor del infortunio que le acontece y no perder ni un día de trabajo ,por lo que ello pueda conllevarle y más si su situación es ilegal o comprometida ?<o
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></o>Chorradas. Cualquier país africano ha tenido suficiente tiempo ( desde que el último consiguiese la independencia ) para formular un avance – de toda índole - que no se ha producido porque sus oligarcas son los primeros a quienes les importa un carajo su gente y sus necesidades; ellos son los responsables en primera instancia de las calamidades, y nadie debe obviar las ancestras divisiones/confrontaciones innatas en esas tierras, y todo lo que se intente llevar a cabo desde nuestro mundo simplemente fracasará ( y eso lo aceptan sin reservas todas las organizaciones serias – que tampoco hay tantas – que operan en múltiples acciones sobre el terreno ); cualquier originario de ciertos países de Asia y Norte de Africa debería considerar la validez de ciertas actitudes - ¿ saben ustedes cuanta invisibilidad ( y lo que ello supone ) ahoga a las mujeres y niñas en una ciudad como Barcelona ? - y las reclamaciones o impedimentos para que una hija no asista a clases de gimnasia o natación en presencia de chicos ?; la existencia de guettos “homologados” – y la comunidad china sabe mucho de esa singularidad - , en que las relaciones sociales y formales se “focalizan” de acuerdo a unas pautas casi inamovibles condicionan enormemente la evolución de sus integrantes, y eso no tiene más responsables que a ellos mismos…
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></o>Es evidente que existen canales, acciones, actitudes y voluntades ( por parte y origen de todo tipo ) que procuran superar esos escollos y lacras, pero a veces me resulta inevitable un halo de enorme escepticismo. Porque es evidente que si hay aspectos cuestionables como los que he especificado, existen otros igualmente ( o más ) reprobables por muchos de los que desde aquí deberían convertirse en adalides de una entente que promueva el avance humanista – entendido desde la concepción más clásica o renacentista del término – del ser humano.
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