EL tema de las rotondas es cosa perdida.
La primera vez que las descubrí fue en Londres y me pareció una idea estupenda para evitar una cadena interminable de semáforos.
La idea me sigue pareciendo válida pero, en la práctica, es una fuente de problemas, todo por la impericia (o la falta de respeto) del conductor medio.
Yo la normas particulares que sigo es :
1.- Como casi todo el mundo sabe, al incorporarme a la rotonda respeto la circulación del vehículo que ya se encuentra en ella.
2.- Siempre que puedo circulo por el carril exterior, para evitarme problemas a la hora de salir de la rotonda.
3.- Cuando me acerco a una salida por la que no quiero escapar, por supuesto que miro y remiro por el retrovisor par ver si alguno viene por el carril interior con malas intenciones, además señalizo con el intermitente mi intención de seguir girando y además procuro pasar rapidito para evitarme problemas. ¿ que porqué hago esto último ?. Porque aún aplicando las dos primeras actuaciones del punto 3, me encuentro con frecuencia conductores que fiados de la potencia de sus coches, sumado a la prisa que tienen para llegar a la oficina y por fin sumado a la falta de sentido común, siempre te encuentras con ellos en el último momento. Y como decía el amigo canario sobre todo en Madrid que es donde el personal tiene mas prisa que en ningún otro sitio.
Yo soy madrileño, he nacido en Madrid. He pasado la mitad de mi vida, por razones laborales, en otros lugares. He admirado la educación vial de los conductores USA, su habilidad para respetar y ayudar a la conducción de los demás vehículos. Siempre me llamó la atención como gestionan su ceda el paso :
YIELD. Y no me refiero a los que ven la señal de frente por que se incorporan a una vía mas rápida, me refiero a los que circulando por la vía rápida ven a lo lejos que otro vehículo se va a incorporar a su vía y prudentemente ( y cortesmente ) levantan el pié del acelerador para que el otro pueda incorporarse a la vá con cierta tranquilidad.
En Madrid, todo es un caos. Hay puntos ( por Ej. nudo de Manoteras ) que mas parecen una pista de coches de choque que otra cosa. Tengo un familiar que ante mi paciencia para incorporarme a ciertos puntos ( con ceda el paso ), se impacienta sobre manera y llega a decirme que no se conducir, que lo que hay que hacer es
incorporarse si o si, vamos la típica actuación de
maric.. el último. Y claro si esta es la forma de pensar de todo el personal así nos va.
En Madrid lo que he observado es que el conductor medio hace exactamente lo contrario de lo que comentaba de USA. Aquí lo usual es que un conductor, circulando por la vía rápida, cuando ve a lo lejos un vehículo que se acerca a su vía, acelera para evitar que entre antes de que el llegue a ese punto. Siempre que observo esto
me pregunto cual es la razón para ello. ¿ Me podéis ayudar a resolverlo ?. ¿ Cual de estas razones puede ser la respuesta ?.
a. Con el pedazo coche que llevo, el que se va a incorporar va a entorpecer mi carrera.
b. Tengo un prisa horrible, voy a llegar tarde a la oficina. No puedo permitirme el lujo de reducir mi marcha.
c. Lo último que me falta es tragar con ese que estoy viendo a lo lejos, encima de lo ya trago en casa y de lo que voy a tragar en la oficina.
d. ¿ Pero que se ha creído ese, con la mierda de coche que lleva, se va a poner delante de mi increíble HYJK 423 en W. ? Pues no faltaba mas.
Ahhhhhh, otra de las cosas que he observado es la naturalidad con la que llevan los golpes diarios. Solamente os voy a dar un dato. En los 25 años que estuve fuera de Madrid nunca, nunca he tenido ni el mas pequeño arañazo en el coche. Aquí llevo dos años, ya me han dado por detrás ( nada de sonrisas por favor ) tres veces y no quiero contar la cantidad de arañazos, golpecitos en la carrocería (imagino que al abrir las puertas), etc. Vamos el paraíso de los talleres.