M
manuleon
Habitual
Sin verificar
Llombera sale en la tele.
(A los que dejaron la vida en la mina)
"Llombera nunca sale en la tele, por eso, cuando me preguntan de donde soy, digo que de León", comenta siempre mi tío el de Vigo.
Llombera es el pueblo de mi madre. Y el de mi abuelo, el de mis tíos, y el de la tía María, y el de sus hermanos (dos todavía están en las cunetas esperando una sepultura digna) y el del tío Matías... y el de toda la familia materna.
La familia materna ha sido por tradición minera. Yo mismo arranqué carbón durante cinco años en la oscuridad impenetrable de la mina. Recuerdo el disgusto que le dí a mi madre cuando la dije que iba a trabajar a la mina "cualquier trabajo, menos la mina", atemorizada como hija y hermana de mineros...
La mina... León tiene un tesoro negro en sus entrañas. Pero como todos los tesoros, se cobra un precio, a veces demasiado alto. Es la paradoja: sin la mina, León se muere; pero en la mina, los hijos de León se dejan la vida.
Y los políticos, en su perversidad, ignoran la mina y sus misterios. Porque no la conocen, ni quieren, ni han entrado nunca. O, si entran, lo hacen ridículamente enfundados en un impecable mono nuevo con un reluciente casco blanco; sin traspasar nunca esas primeras galerías que les garantizan la integridad personal. Después, cuando regresan a sus despachos, firman la sentencia de muerte de la mina, sin saber que la mina ya se cobra su precio en vidas sin que la firma de los hijos de la gran puta se estampe en un oficio. Sus madres les esperan en el Infierno, al lado de Satán, por haber parido a semejantes demonios.
Llombera ya sale en la tele ¡Joder, Llombera ya sale en la puta tele! Para qué cojones tiene que salir Llombera en la puta tele...
(A los que dejaron la vida en la mina)
"Llombera nunca sale en la tele, por eso, cuando me preguntan de donde soy, digo que de León", comenta siempre mi tío el de Vigo.
Llombera es el pueblo de mi madre. Y el de mi abuelo, el de mis tíos, y el de la tía María, y el de sus hermanos (dos todavía están en las cunetas esperando una sepultura digna) y el del tío Matías... y el de toda la familia materna.
La familia materna ha sido por tradición minera. Yo mismo arranqué carbón durante cinco años en la oscuridad impenetrable de la mina. Recuerdo el disgusto que le dí a mi madre cuando la dije que iba a trabajar a la mina "cualquier trabajo, menos la mina", atemorizada como hija y hermana de mineros...
La mina... León tiene un tesoro negro en sus entrañas. Pero como todos los tesoros, se cobra un precio, a veces demasiado alto. Es la paradoja: sin la mina, León se muere; pero en la mina, los hijos de León se dejan la vida.
Y los políticos, en su perversidad, ignoran la mina y sus misterios. Porque no la conocen, ni quieren, ni han entrado nunca. O, si entran, lo hacen ridículamente enfundados en un impecable mono nuevo con un reluciente casco blanco; sin traspasar nunca esas primeras galerías que les garantizan la integridad personal. Después, cuando regresan a sus despachos, firman la sentencia de muerte de la mina, sin saber que la mina ya se cobra su precio en vidas sin que la firma de los hijos de la gran puta se estampe en un oficio. Sus madres les esperan en el Infierno, al lado de Satán, por haber parido a semejantes demonios.
Llombera ya sale en la tele ¡Joder, Llombera ya sale en la puta tele! Para qué cojones tiene que salir Llombera en la puta tele...
