Duir
De la casa
Sin verificar
Cuando adquirí mi primer Longines me decidí por un modelo actual, en parte abrumado por las opciones que se me presentaban, en concreto un Conquest:
Los vintage son apabullantes, cada uno dentro de su estilo y los precios que presentan también, todo hay que decirlo.
Pero teniendo debilidad por esos viejunos, no podía dejarlo pasar tan fácilmente.
Por cosas del destino se me cruzó una pieza en un momento determinado. Mi adorado Jamboree:
Pero una vez alcanzado un objetivo no previsto había que seguir camino hacia el previsto 30L.
El motivo es que a poco de interesarme por los Longines vintage y ponerme a investigar un poco comprendí que los movimientos 30L eran como una especie de leyenda entre los aficionados.
El problema principal es que muchos Longines con máquina tan mítica son de oro, lo cual eleva el precio bastante, pero incluso si el precio no fuese un problema, la condición de agujas y esferas no suelen ser las mejores y en los que están bien se aprecia demasiado la restauración. Además, las horquillas de precio son muy raras, lo mismo los encuentras por 400 que por mas de 700 siendo aparentemente similares.
Es la eterna lucha de buscar un reloj honesto en condiciones aceptables y con un precio asumible y sobre todo, lógico.
No es imposible si se tiene la paciencia necesaria y se dedica tiempo suficiente a la búsqueda.
Finalmente encontré la pieza que parecía reunir las condiciones.
Un modelo "oversize" del 62 con agujas dauphine y esfera champagne tipo rayos de sol en buen estado de conservación y que mantenía la corona original firmada, algo que parecerá normal pero que es mas complicado de lo que parece de conseguir y como añadido venía con la caja de presentación original y con una revisión reciente.
Para el que no lo sepa, los oversize eran relojes de mayor tamaño que los modelos habituales, tampoco es que fuesen enormes porque en este caso hablamos de unos 36/37mm, pero para el promedio de la época ya merecían ese calificativo por mucho que ahora, en función de las modas, parezcan pequeños.
La única pega, anecdótica, es que la correa es genérica, pero ya viene en camino una original firmada.
Por otra parte se me había metido en la cabeza que lo quería en torno a los 300 euros, en principio imposible pero digamos que es mi límite para caprichos caros y así fue, envío incluido por algo menos de 300.
Ahora el problema al que me enfrento es que este era mi objetivo principal para este año y aún no ha acabado enero... Me temo lo peor.
Los vintage son apabullantes, cada uno dentro de su estilo y los precios que presentan también, todo hay que decirlo.
Pero teniendo debilidad por esos viejunos, no podía dejarlo pasar tan fácilmente.
Por cosas del destino se me cruzó una pieza en un momento determinado. Mi adorado Jamboree:
Pero una vez alcanzado un objetivo no previsto había que seguir camino hacia el previsto 30L.
El motivo es que a poco de interesarme por los Longines vintage y ponerme a investigar un poco comprendí que los movimientos 30L eran como una especie de leyenda entre los aficionados.
El problema principal es que muchos Longines con máquina tan mítica son de oro, lo cual eleva el precio bastante, pero incluso si el precio no fuese un problema, la condición de agujas y esferas no suelen ser las mejores y en los que están bien se aprecia demasiado la restauración. Además, las horquillas de precio son muy raras, lo mismo los encuentras por 400 que por mas de 700 siendo aparentemente similares.
Es la eterna lucha de buscar un reloj honesto en condiciones aceptables y con un precio asumible y sobre todo, lógico.
No es imposible si se tiene la paciencia necesaria y se dedica tiempo suficiente a la búsqueda.
Finalmente encontré la pieza que parecía reunir las condiciones.
Un modelo "oversize" del 62 con agujas dauphine y esfera champagne tipo rayos de sol en buen estado de conservación y que mantenía la corona original firmada, algo que parecerá normal pero que es mas complicado de lo que parece de conseguir y como añadido venía con la caja de presentación original y con una revisión reciente.
Para el que no lo sepa, los oversize eran relojes de mayor tamaño que los modelos habituales, tampoco es que fuesen enormes porque en este caso hablamos de unos 36/37mm, pero para el promedio de la época ya merecían ese calificativo por mucho que ahora, en función de las modas, parezcan pequeños.
La única pega, anecdótica, es que la correa es genérica, pero ya viene en camino una original firmada.
Por otra parte se me había metido en la cabeza que lo quería en torno a los 300 euros, en principio imposible pero digamos que es mi límite para caprichos caros y así fue, envío incluido por algo menos de 300.
Ahora el problema al que me enfrento es que este era mi objetivo principal para este año y aún no ha acabado enero... Me temo lo peor.
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Preciosos tanto el jovenzuelo y deportivo Conquest como el impecable y clásico Jamboree (supongo que habrás leído el estupendo hilo de nuestra compi Antares, pero por si acaso: 
¡A disfrutar! 
