Catilina
Milpostista
Verificad@ con 2FA
Puesto que estoy muy contento, pero también muy inseguro 
con este rol de moderador de un nuevo subforo que Goldoff ha considerado interesante otorgarme, empezaré comentando los porqués que veo para iniciar este foro. Esos con los he insistido e insistido al Big Boss hasta que le ha merecido más la pena abrir un nuevo foro que seguir escuchándome (también así convencí a mi mujer de que se casara conmigo).
Bromas aparte, creo sinceramente que Casio, y en particular su línea G-Shock, es la única alternativa real que ha tenido la relojería tradicional durante mucho tiempo (ahora los Smart-Watches ofrecen otra). Entendiendo alternativa no como potencial sustituto o elección entre similares, sino como algo que ofrece la misma funcionalidad partiendo de premisas completamente diferentes. Una evolución paralela. Casio, como sólo alguna otra marca, se permite ir completamente a su Bolex
.
Casio es como los marsupiales. Casio es la vida evolucionada desde el silicio y no desde el carbono.
Los demás relojes son coches y Casio son motos, los demás relojes son barcos y Casio son hovercrafts...
Casio nunca intentó, como las demás japonesas, hacer relojes mecánicos, hasta hace no mucho ni siquiera hacía relojes analógicos (su eslogan fue “Is digital”). Creó una manera de entender la relojería diferente. Y ahí residen su valor y la necesidad de darle un foro propio.
A mi entender, mientras todos los japoneses intentaban hacer productos que compitieran con los suizos siendo “similares”, Casio creaba otra manera de entender la relojería: digital, tecnológica, orgullosamente de cuarzo, económica e infantilmente emocionante (otra cosa será la evolución que ha seguido).
Me explico, un Credor, un Grand Seiko, un Seiko 5… son competidores claros de la relojería suiza. Su “japonesidad” está en detalles que les diferencian de su competencia y les dotan de individualidad ante el cliente: como que sea un fabricante de katanas el que hace/inspira algunos acabados, que tenga una tecnología más precisa, como en el Spring Drive, que ofrezca “más por menos” o que sea un cuarzo similar a un automático en autonomía, como el Eco-Drive inicialmente. Esto hace que un cliente, por diferentes motivos, pueda elegirlos frente a las alternativas de relojería tradicional: los acabados kataníticos son mejores o más impresionantes que los de sus competidores suizos, el Spring Drive es más preciso que un movimiento tradicional, recibo una calidad equivalente a un precio mejor o por el precio de un mecánico barato me compro un Eco-Drive y tengo las ventajas del cuarzo y de los mecánicos ¿Quién duda viendo estos relojes y leyendo los debates interminables sobre suizos/japoneses de que son competidores por el mismo cliente, al que quieren llegar por sumar a un producto “igual” ante el consumidor intangibles propios con los que identificarse?
Porque elegir la mejor relación calidad/precio, la tecnología que se cree más avanzada o la relevancia relojera que se atribuye a una marca respecto a otras en cualquier aspecto son valores intangibles en todos los casos (suponer que Rolex tiene más intangibles que Seiko en lugar de otros es, sencillamente, errado), la cuestión es con cuáles se identificará cada comprador potencial.
Pero Casio fue a su bola, Casio ha creado su propio mercado. Los aficionados a Casio suelen moverse dentro de la marca o de las que han seguido su estela de relojes alternativos a lo tradicional, de relojes para niños grandes y no para relojistas. Un seguidor de Casio se encontrará más fácilmente viendo como alternativas a Suunto, a Timex (en sus gamas tecnológico/digitales) o, ahora, a los Smart-Watches.
De hecho, cuando se habla de la crisis del cuarzo creo que se analiza mal lo que sucedió, se confunde la solución (los Swatch de cuarzo, y analógicos) con el problema: la crisis de lo digital, de una nueva forma de relojería que nos hacía sentirnos como niños. Porque de niños nos encantaban los relojes digitales y creo que entonces ninguno de nosotros hubiera preferido un calendario perpetuo de PP a un Casio con calculadora.
Casio llegaba a rinconcitos de nuestro corazón diferentes a los que toca la relojería tradicional, diferentes y más colectivos, menos necesitados de entrenamiento y formación previa. Es necesario saber bastantes cosas para valorar un calendario perpetuo de PP, pero la sensación de maravilla ante un reloj calculadora no necesita de nada. Recordad cómo explorábamos las funciones de nuestros digitales (muchos de ellos regalo de primera comunión) de niños, eso es impagable. Eso es la esencia de Casio. Eso lo ha inventado Casio y lo ha llevado al máximo en los G-Shock (y en los Protrek de otro modo).
¿Qué es más fácil de apreciar y que nos llega antes a ese corazón infantil?
¿Un reloj que se puede caer desde diez metros o un tourbillon?
¿Un reloj que se pone en hora solo por las noches o un embrague vertical?
¿Un reloj que prevé las tormentas o un repetidor de minutos?
Casio es eso. Básicamente.
Y no es poca cosa.
Porque, EMHO, el Japón actual, colorido, tecnológico y fulgurante, sea de nuestro gusto o no, está realmente mejor representado por Casio que por ninguna otra marca, en las demás Japón es un extra, un valor añadido, un intangible, en muchos caso a través de recursos (como el del fabricante de katanas) más estéticos que sólidos… en Casio sólo hay Japón, el Japón que es, no el que fue, el que imaginamos o el que tenemos idealizado. El Japón térreo: en el que la moda, la tecnología y el colorín son protagonistas, no secundarios de lujo.
Podría sacarse la lectura simplificada de que entonces Casio hace relojes que les gustan a quienes no les gustan los relojes, esta premisa es cierta, pero incompleta. Sí crean aficionados a… los relojes Casio, cuyos gustos evolucionan con la marca y que entienden pagar seiscientos euros por un Mudmaster pero no por un reloj mecánico que finalmente ¿Qué hace? ¿Qué aporta para costar tanto? Preguntas, por cierto, que nos hacen a todos los aficionados a los relojes quienes no lo son y de las que sólo salen airosos quienes llevan un Casio o equivalente. La gente sí entiende que un reloj indestructible y con funciones de navaja suiza sea relativamente caro.
Casio crea relojistas de la manera de Casio de hacer, de entender los relojes (y de Suunto, y de Timex, y de los Smart-Watches...).
Y ojo, que somos aficionados críticos y entendidos en esta forma de relojería. No somos niños o al menos lo somos de una forma adulta… pero eso sí que es común a todos los aficionados a los relojes, que yo sepa.
Es cierto que todo esto que cuento/opino se ha diluido y se sigue diluyendo: cada vez más marcas están creando productos para competir con Casio, con los clientes potenciales de Casio, y Casio también está haciendo productos que lleguen a quienes desean relojes de prestigio, cada vez más analógicos, relojes de precios altos…
Pero las diferencias aún son lo bastante claras como para justificar un foro que acoja a quienes disfrutamos de esta manera steampunk de entender la relojería. Sin que eso descalifique a la tradicional, sus valores y su enfoque, porque existen verdades diferentes que conviven, muy pobre es quien hace su razón descalificando a otros.
Muchas gracias a RE por la confianza, al resto de moderadores por el apoyo y la ayuda a un novato y a tod@s los aficionad@s a Casio que andan por aquí y en quienes confío para llenar este espacio de la ilusión hacía los únicos relojes cuyo precio podemos justificar sin rubor ante las personas que no saben de relojes.
con este rol de moderador de un nuevo subforo que Goldoff ha considerado interesante otorgarme, empezaré comentando los porqués que veo para iniciar este foro. Esos con los he insistido e insistido al Big Boss hasta que le ha merecido más la pena abrir un nuevo foro que seguir escuchándome (también así convencí a mi mujer de que se casara conmigo).Bromas aparte, creo sinceramente que Casio, y en particular su línea G-Shock, es la única alternativa real que ha tenido la relojería tradicional durante mucho tiempo (ahora los Smart-Watches ofrecen otra). Entendiendo alternativa no como potencial sustituto o elección entre similares, sino como algo que ofrece la misma funcionalidad partiendo de premisas completamente diferentes. Una evolución paralela. Casio, como sólo alguna otra marca, se permite ir completamente a su Bolex
.Casio es como los marsupiales. Casio es la vida evolucionada desde el silicio y no desde el carbono.
Los demás relojes son coches y Casio son motos, los demás relojes son barcos y Casio son hovercrafts...
Casio nunca intentó, como las demás japonesas, hacer relojes mecánicos, hasta hace no mucho ni siquiera hacía relojes analógicos (su eslogan fue “Is digital”). Creó una manera de entender la relojería diferente. Y ahí residen su valor y la necesidad de darle un foro propio.
A mi entender, mientras todos los japoneses intentaban hacer productos que compitieran con los suizos siendo “similares”, Casio creaba otra manera de entender la relojería: digital, tecnológica, orgullosamente de cuarzo, económica e infantilmente emocionante (otra cosa será la evolución que ha seguido).
Me explico, un Credor, un Grand Seiko, un Seiko 5… son competidores claros de la relojería suiza. Su “japonesidad” está en detalles que les diferencian de su competencia y les dotan de individualidad ante el cliente: como que sea un fabricante de katanas el que hace/inspira algunos acabados, que tenga una tecnología más precisa, como en el Spring Drive, que ofrezca “más por menos” o que sea un cuarzo similar a un automático en autonomía, como el Eco-Drive inicialmente. Esto hace que un cliente, por diferentes motivos, pueda elegirlos frente a las alternativas de relojería tradicional: los acabados kataníticos son mejores o más impresionantes que los de sus competidores suizos, el Spring Drive es más preciso que un movimiento tradicional, recibo una calidad equivalente a un precio mejor o por el precio de un mecánico barato me compro un Eco-Drive y tengo las ventajas del cuarzo y de los mecánicos ¿Quién duda viendo estos relojes y leyendo los debates interminables sobre suizos/japoneses de que son competidores por el mismo cliente, al que quieren llegar por sumar a un producto “igual” ante el consumidor intangibles propios con los que identificarse?
Porque elegir la mejor relación calidad/precio, la tecnología que se cree más avanzada o la relevancia relojera que se atribuye a una marca respecto a otras en cualquier aspecto son valores intangibles en todos los casos (suponer que Rolex tiene más intangibles que Seiko en lugar de otros es, sencillamente, errado), la cuestión es con cuáles se identificará cada comprador potencial.
Pero Casio fue a su bola, Casio ha creado su propio mercado. Los aficionados a Casio suelen moverse dentro de la marca o de las que han seguido su estela de relojes alternativos a lo tradicional, de relojes para niños grandes y no para relojistas. Un seguidor de Casio se encontrará más fácilmente viendo como alternativas a Suunto, a Timex (en sus gamas tecnológico/digitales) o, ahora, a los Smart-Watches.
De hecho, cuando se habla de la crisis del cuarzo creo que se analiza mal lo que sucedió, se confunde la solución (los Swatch de cuarzo, y analógicos) con el problema: la crisis de lo digital, de una nueva forma de relojería que nos hacía sentirnos como niños. Porque de niños nos encantaban los relojes digitales y creo que entonces ninguno de nosotros hubiera preferido un calendario perpetuo de PP a un Casio con calculadora.
Casio llegaba a rinconcitos de nuestro corazón diferentes a los que toca la relojería tradicional, diferentes y más colectivos, menos necesitados de entrenamiento y formación previa. Es necesario saber bastantes cosas para valorar un calendario perpetuo de PP, pero la sensación de maravilla ante un reloj calculadora no necesita de nada. Recordad cómo explorábamos las funciones de nuestros digitales (muchos de ellos regalo de primera comunión) de niños, eso es impagable. Eso es la esencia de Casio. Eso lo ha inventado Casio y lo ha llevado al máximo en los G-Shock (y en los Protrek de otro modo).
¿Qué es más fácil de apreciar y que nos llega antes a ese corazón infantil?
¿Un reloj que se puede caer desde diez metros o un tourbillon?
¿Un reloj que se pone en hora solo por las noches o un embrague vertical?
¿Un reloj que prevé las tormentas o un repetidor de minutos?
Casio es eso. Básicamente.
Y no es poca cosa.
Porque, EMHO, el Japón actual, colorido, tecnológico y fulgurante, sea de nuestro gusto o no, está realmente mejor representado por Casio que por ninguna otra marca, en las demás Japón es un extra, un valor añadido, un intangible, en muchos caso a través de recursos (como el del fabricante de katanas) más estéticos que sólidos… en Casio sólo hay Japón, el Japón que es, no el que fue, el que imaginamos o el que tenemos idealizado. El Japón térreo: en el que la moda, la tecnología y el colorín son protagonistas, no secundarios de lujo.
Podría sacarse la lectura simplificada de que entonces Casio hace relojes que les gustan a quienes no les gustan los relojes, esta premisa es cierta, pero incompleta. Sí crean aficionados a… los relojes Casio, cuyos gustos evolucionan con la marca y que entienden pagar seiscientos euros por un Mudmaster pero no por un reloj mecánico que finalmente ¿Qué hace? ¿Qué aporta para costar tanto? Preguntas, por cierto, que nos hacen a todos los aficionados a los relojes quienes no lo son y de las que sólo salen airosos quienes llevan un Casio o equivalente. La gente sí entiende que un reloj indestructible y con funciones de navaja suiza sea relativamente caro.
Casio crea relojistas de la manera de Casio de hacer, de entender los relojes (y de Suunto, y de Timex, y de los Smart-Watches...).
Y ojo, que somos aficionados críticos y entendidos en esta forma de relojería. No somos niños o al menos lo somos de una forma adulta… pero eso sí que es común a todos los aficionados a los relojes, que yo sepa.
Es cierto que todo esto que cuento/opino se ha diluido y se sigue diluyendo: cada vez más marcas están creando productos para competir con Casio, con los clientes potenciales de Casio, y Casio también está haciendo productos que lleguen a quienes desean relojes de prestigio, cada vez más analógicos, relojes de precios altos…
Pero las diferencias aún son lo bastante claras como para justificar un foro que acoja a quienes disfrutamos de esta manera steampunk de entender la relojería. Sin que eso descalifique a la tradicional, sus valores y su enfoque, porque existen verdades diferentes que conviven, muy pobre es quien hace su razón descalificando a otros.
Muchas gracias a RE por la confianza, al resto de moderadores por el apoyo y la ayuda a un novato y a tod@s los aficionad@s a Casio que andan por aquí y en quienes confío para llenar este espacio de la ilusión hacía los únicos relojes cuyo precio podemos justificar sin rubor ante las personas que no saben de relojes
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Porque están Longines, Omega, Seiko, Tag, Tissot, Victorinox, IWC, y ese larguiiiiiiiiiisimo etc,
