Maurice
Forer@ Senior
Sin verificar
Tras la aplastante victoria del Submariner sobre el Calatrava con un 70% de los votos en los primeros octavos de final, pasamos a la siguiente eliminatoria para decidir cual será "el reloj".
En esta ocasión enfrentaremos dos contrincantes que llevan una vida casi paralela desde 1969. La de haber llevado en sus entrañas en aquellos años el primer cronógrafo automatico del mundo.
Determinar qué calibre fue el primero en aunar la función de remonte automático con la función cronográfica, no es cuestión baladí, ya que hay varias firmas que reclaman estar en posesión de dicho record.
El año mágico fue 1969. Año en el que las efemérides citan eventos tales como los 400.000 asistentes al concierto de Woodstock en EE.UU, el vuelo del primer avión comercial que rompía la barrera del sonido: el Concorde, la primera vez que el hombre pisa la luna en la misión espacial Apollo XI o como la inauguración del metro en la ciudad de México DF. Los competidores en otorgarse ser la primera firma en desarrollar el cronógrafo automático son: Heuer - Buren por un lado, la japonesa Seiko por otro y finalmente, Zenith.
El calibre 11
Heuer, fundada en 1860, siempre ha estado ligada a la creación de relojes cronográficos. Es a finales de la década de los años cincuenta del siglo pasado cuando empieza a germinar en la compañía la idea de realizar un cronógrafo automático. Paradójicamente, por esa misma época, decide suspender su línea de movimientos automáticos, motivo por el que si desea llevar adelante su proyecto debe buscar un aliado que le provea del movimiento de base. Buren está en la línea de conseguir un calibre automático lo más delgado posible utilizando un microrotor alejado del centro del reloj, lo que consigue a principios de los años sesenta con el 1280. Un calibre que tiene casi un milímetro menos que los producidos por la época. Es un primer paso. Por otro lado Heuer encarga a Dubois-Dépraz, frima fundada en 1901 y especialista en realizar complicaciones, la realización de un módulo cronográfico lo más delgado posible. La idea empieza a cobrar forma, sin embargo, todas las firmas comprometidas son modestas y no disponen de todo el capital necesario para poder llevar a cabo el proyecto y es en este momento en el que invitan a Breitling a formar parte del mismo. Como no podía ser de otra forma era un proyecto interesante que podía marcar un hito relojero, por lo que se mantuvo en secreto y para evitar hacer referencia alguna a las palabras cronógrafo y automático se le denominó: “Proyecto 99”. Y para finalizar el conglomerado de marcas que tienen participación se añade Hamilton, quien en 1966 compra la firma Buren.
El resultado de la joint venture fue el calibre 11, también conocido como Chrono-Matic. Las indicaciones horarias corresponden a horas y minutos centrales, e indicación del día del mes situado a las seis. Las indicaciones cronográficos se realizan mediante un segundero central y dos contadores. Uno situado a las tres, el de treinta minutos, y el otro situado a las nueve, el de doce horas. El accionamiento de las funciones cronográficas se realiza mediante dos pulsadores. El que está a las dos permite la puesta en marcha y paro del cronógrafo, mientras que el situado a las cuatro permite la puesta a cero de las agujas del cronógrafo. La corona está situada a las nueve, en sentido opuesto al habitual.
El calibre tiene 31 milímetros de diámetro y 7,7 de grosor. Está equipado con 17 rubíes, su frecuencia de oscilación es de 2,75 Hz, que equivalen a 19.800 alternancias por hora. Dispone de un barrilete que le proporciona una reserva de marcha de Su único barrilete le proporciona una reserva de marcha entorno a las 42 horas.
Es un calibre de concepción modular: el módulo horario y el módulo cronográfico. El módulo horario tiene un grosor de 4,6 milímetros y está basado en la familia de calibres 1280 de Buren. La carga automática del calibre se realiza mediante un microrotor bidireccional con cojinete de rubíes y alejado del centro del reloj. El módulo cronográfico, de 3,1 milímetros de grosor, corresponde al 8510 de Dubois Dépraz. Se trata de un cronógrafo cuyas funciones se realizan a través de palancas accionadas por los dos pulsadores. El engrane entre el módulo horario y el cronográfico se realiza a través de un piñón oscilante.
El ajuste de la variación de marcha se realiza mediante tornillo excéntrico micrométrico. Dispone de portapitón móvil y de sistema antichoque para los pivotes del eje del volante.
Su representante: El (Tag) Heuer Monaco
El Monaco es, igual que la ciudad y la carrera a las que debe el nombre, la perfecta encarnación de la elegancia y el prestigio con un toque vintage. El primer cronógrafo automático del mundo se convirtió en toda una leyenda después de que Steve McQueen lo luciera en "Le Mans", la película clásica sobre el mundo de las carreras rodada en 1970. Es el reloj definitivo para aquellos que viven la vida a toda velocidad. Luces, cámara, ¡ACCIÓN!
El PHC 3019
Zenith, fundada en 1865, adquiere en 1960 la firma de producción de cronógrafos y otras complicaciones Martel, lo que la dota de una capacidad y conocimientos extra en la realización de este tipo de calibres. En 1962 inicia su particular proyecto para la construcción de un cronógrafo automático, el cual desea tener listo en 1965 para celebrar el centenario de la firma. En 1969 se fusiona con Movado, relación que duraría hasta 1984. El resultado fue el calibre PHC 3019, también bautizado como “El Primero”. Se trata de un calibre con indicaciones de horas y minutos centrales, con los segundos horarios en la subesferas situada a las nueve. Los segundos cronográficos son centrales y dispone un contador de doce horas situado a las seis y de un contador de treinta minutos situado a las tres. También tiene indicación del día del mes, situado, habitualmente entre las cuatro y las cinco. El accionamiento de las funciones cronográficos se realiza mediante dos pulsadores situados a las dos y a las cuatro. La corona situada a las tres permite en su posición de reposo la carga del muelle real de forma manual, en una primera extracción la puesta en hora y en una segunda el ajuste rápido del día del mes.
El calibre tiene 30 milímetros de diámetro y 6,5 de grosor. Está equipado con 30 rubíes y tiene una frecuencia de oscilación de 5 Hz, que suponen 36.600 alternancias por hora y le permiten poder realizar mediciones a la décima de segundo. Su único barrilete le proporciona una reserva de marcha entorno a las 50horas.
Es un calibre de concepción integrada, es decir su diseño inicial parte con las premisas de conseguir un movimiento automático y cronográfico desde el inicio. Para cargar el muelle motor utiliza un rotor central bidireccional con rodamiento a bolas. En cuanto al sistema cronográfico es de los denominados de rueda pilares, elemento central que distribuye la acción de los pulsadores a las diferentes palancas para conseguir la puesta en marcha, paro y puesta a cero del cronógrafo. Y utiliza un sistema de embrague horizontal para transmitir el movimiento entre el sistema horario y el cronográfico.
El sistema de regulación de la variación de marcha se realiza mediante tornillo excéntrico de ajuste micrométrico situado en el puente del volante. El portapitón es móvil y los pivotes del eje del volante están protegidos por un antichoque.
Su representante: El Zenith El Primero
El Primero fijó unos nuevos códigos estéticos. Cuando la moda es llevar esferas oscuras y tono sobre tono, los modelos adoptan una gama de colores inaudita, jugando con los contrastes para potenciar la legibilidad de los contadores: el tono más claro para los segundos, el más oscuro para las horas, y el intermedio para los minutos. Concretamente, los colores serán gris claro, antracita y azul. Una combinación que pronto será emblemática. Más de cuarenta años después, El Primero sigue siendo el cronógrafo de serie más preciso del mundo, y el único capaz de medir fracciones de una décima de segundo. Asimismo, es uno de los más laureados, ya que es merecedor de innumerables premios.
¿Cual fue el primero?
Y ahora viene la pregunta: ¿cuál fue el primero?: ¿el calibre 11?, ¿el calibre 6139?, o ¿el calibre PHC 3019. Pero antes de responder volvemos a lo que nos planteábamos al inicio del artículo ya que la pregunta puede formularse de varias formas, atendiendo a las necesidades de poder lucir la “poole position” en el historial de la firma.
¿Ha de considerarse aquél que primero se presentó como un prototipo? ¿O aquel que primero se comercializó en el mercado interior? ¿O el primero es aquel que se comercializa a nivel mundial?.
La polémica se desata el 10 de enero de 1969, momento en el que Zenith-Movado convocan una pequeña y reducida rueda de prensa sólo para la prensa regional suiza, durante la que presentan los prototipos de sus trabajos; sin embargo no es hasta octubre de 1969 que los primeros relojes pueden comercializarse. La firma tenía intención de hacer público su proyecto durante la feria de Basilea, en el mes de abril, pero los rumores de que durante la feria también habría la presentación por parte de la competencia obligó a realizar su proclama y no en vano le denominaron “El Primero”, para enfatizar más el logro.
Las firmas del “Proyecto 99” tenían una serie de 100 prototipos a finales de 1968 y el anuncio de Zenith-Movado les cogió por sorpresa. No obstante la respuesta tuvo lugar el 3 de marzo de 1969 momento en el cual deciden presentar su proyecto al público ante una multitudinaria e internacional rueda de prensa simultáneamente en el Hotel International de Ginebra y en el edificio de PanAm en New York.
Durante la feria de Basilea, en abril, ambos grupos mostraron sus creaciones. Sin embargo a diferencia de Heuer-Buren/Hamilton-Breitling, que mostró múltiples modelos equipados con el calibre 11, Zenith apenas pudo mostrar dos o tres ejemplares de su cronógrafo automático. 100 prototipos equipados con el calibre 11 fueron entregados a los distribuidores más importantes de las diversas firmas que participaban en el proyecto, aunque no fue hasta el verano de ese año en que se inició la producción en serie para cubrir las demandas de todos los distribuidores.
Cada firma reclama para sí estar en la “pole position” y lo está según cómo se enfoque. Así que dejamos que cada forero determine cual es su pregunta y obtenga su propia respuesta. No les quepa la menor duda que yo ya tengo la mía.
¿Quien ganará en este duelo? ¿Qué argumentos usará para vencer?
Os invito a votar por vuestra reloj elegido. Os animo también a dar las opiniones y argumentos de vuestra elección. Que esto no se convierta exclusivamente en votar por el preferido y el más deseado, sino que también compartamos nuestros conocimientos y argumentemos nuestro voto.
Sin más dilación...
En esta ocasión enfrentaremos dos contrincantes que llevan una vida casi paralela desde 1969. La de haber llevado en sus entrañas en aquellos años el primer cronógrafo automatico del mundo.
Determinar qué calibre fue el primero en aunar la función de remonte automático con la función cronográfica, no es cuestión baladí, ya que hay varias firmas que reclaman estar en posesión de dicho record.
El año mágico fue 1969. Año en el que las efemérides citan eventos tales como los 400.000 asistentes al concierto de Woodstock en EE.UU, el vuelo del primer avión comercial que rompía la barrera del sonido: el Concorde, la primera vez que el hombre pisa la luna en la misión espacial Apollo XI o como la inauguración del metro en la ciudad de México DF. Los competidores en otorgarse ser la primera firma en desarrollar el cronógrafo automático son: Heuer - Buren por un lado, la japonesa Seiko por otro y finalmente, Zenith.
El calibre 11
Heuer, fundada en 1860, siempre ha estado ligada a la creación de relojes cronográficos. Es a finales de la década de los años cincuenta del siglo pasado cuando empieza a germinar en la compañía la idea de realizar un cronógrafo automático. Paradójicamente, por esa misma época, decide suspender su línea de movimientos automáticos, motivo por el que si desea llevar adelante su proyecto debe buscar un aliado que le provea del movimiento de base. Buren está en la línea de conseguir un calibre automático lo más delgado posible utilizando un microrotor alejado del centro del reloj, lo que consigue a principios de los años sesenta con el 1280. Un calibre que tiene casi un milímetro menos que los producidos por la época. Es un primer paso. Por otro lado Heuer encarga a Dubois-Dépraz, frima fundada en 1901 y especialista en realizar complicaciones, la realización de un módulo cronográfico lo más delgado posible. La idea empieza a cobrar forma, sin embargo, todas las firmas comprometidas son modestas y no disponen de todo el capital necesario para poder llevar a cabo el proyecto y es en este momento en el que invitan a Breitling a formar parte del mismo. Como no podía ser de otra forma era un proyecto interesante que podía marcar un hito relojero, por lo que se mantuvo en secreto y para evitar hacer referencia alguna a las palabras cronógrafo y automático se le denominó: “Proyecto 99”. Y para finalizar el conglomerado de marcas que tienen participación se añade Hamilton, quien en 1966 compra la firma Buren.
El resultado de la joint venture fue el calibre 11, también conocido como Chrono-Matic. Las indicaciones horarias corresponden a horas y minutos centrales, e indicación del día del mes situado a las seis. Las indicaciones cronográficos se realizan mediante un segundero central y dos contadores. Uno situado a las tres, el de treinta minutos, y el otro situado a las nueve, el de doce horas. El accionamiento de las funciones cronográficas se realiza mediante dos pulsadores. El que está a las dos permite la puesta en marcha y paro del cronógrafo, mientras que el situado a las cuatro permite la puesta a cero de las agujas del cronógrafo. La corona está situada a las nueve, en sentido opuesto al habitual.
El calibre tiene 31 milímetros de diámetro y 7,7 de grosor. Está equipado con 17 rubíes, su frecuencia de oscilación es de 2,75 Hz, que equivalen a 19.800 alternancias por hora. Dispone de un barrilete que le proporciona una reserva de marcha de Su único barrilete le proporciona una reserva de marcha entorno a las 42 horas.
Es un calibre de concepción modular: el módulo horario y el módulo cronográfico. El módulo horario tiene un grosor de 4,6 milímetros y está basado en la familia de calibres 1280 de Buren. La carga automática del calibre se realiza mediante un microrotor bidireccional con cojinete de rubíes y alejado del centro del reloj. El módulo cronográfico, de 3,1 milímetros de grosor, corresponde al 8510 de Dubois Dépraz. Se trata de un cronógrafo cuyas funciones se realizan a través de palancas accionadas por los dos pulsadores. El engrane entre el módulo horario y el cronográfico se realiza a través de un piñón oscilante.
El ajuste de la variación de marcha se realiza mediante tornillo excéntrico micrométrico. Dispone de portapitón móvil y de sistema antichoque para los pivotes del eje del volante.
Su representante: El (Tag) Heuer Monaco
El Monaco es, igual que la ciudad y la carrera a las que debe el nombre, la perfecta encarnación de la elegancia y el prestigio con un toque vintage. El primer cronógrafo automático del mundo se convirtió en toda una leyenda después de que Steve McQueen lo luciera en "Le Mans", la película clásica sobre el mundo de las carreras rodada en 1970. Es el reloj definitivo para aquellos que viven la vida a toda velocidad. Luces, cámara, ¡ACCIÓN!
El PHC 3019
Zenith, fundada en 1865, adquiere en 1960 la firma de producción de cronógrafos y otras complicaciones Martel, lo que la dota de una capacidad y conocimientos extra en la realización de este tipo de calibres. En 1962 inicia su particular proyecto para la construcción de un cronógrafo automático, el cual desea tener listo en 1965 para celebrar el centenario de la firma. En 1969 se fusiona con Movado, relación que duraría hasta 1984. El resultado fue el calibre PHC 3019, también bautizado como “El Primero”. Se trata de un calibre con indicaciones de horas y minutos centrales, con los segundos horarios en la subesferas situada a las nueve. Los segundos cronográficos son centrales y dispone un contador de doce horas situado a las seis y de un contador de treinta minutos situado a las tres. También tiene indicación del día del mes, situado, habitualmente entre las cuatro y las cinco. El accionamiento de las funciones cronográficos se realiza mediante dos pulsadores situados a las dos y a las cuatro. La corona situada a las tres permite en su posición de reposo la carga del muelle real de forma manual, en una primera extracción la puesta en hora y en una segunda el ajuste rápido del día del mes.
El calibre tiene 30 milímetros de diámetro y 6,5 de grosor. Está equipado con 30 rubíes y tiene una frecuencia de oscilación de 5 Hz, que suponen 36.600 alternancias por hora y le permiten poder realizar mediciones a la décima de segundo. Su único barrilete le proporciona una reserva de marcha entorno a las 50horas.
Es un calibre de concepción integrada, es decir su diseño inicial parte con las premisas de conseguir un movimiento automático y cronográfico desde el inicio. Para cargar el muelle motor utiliza un rotor central bidireccional con rodamiento a bolas. En cuanto al sistema cronográfico es de los denominados de rueda pilares, elemento central que distribuye la acción de los pulsadores a las diferentes palancas para conseguir la puesta en marcha, paro y puesta a cero del cronógrafo. Y utiliza un sistema de embrague horizontal para transmitir el movimiento entre el sistema horario y el cronográfico.
El sistema de regulación de la variación de marcha se realiza mediante tornillo excéntrico de ajuste micrométrico situado en el puente del volante. El portapitón es móvil y los pivotes del eje del volante están protegidos por un antichoque.
Su representante: El Zenith El Primero
El Primero fijó unos nuevos códigos estéticos. Cuando la moda es llevar esferas oscuras y tono sobre tono, los modelos adoptan una gama de colores inaudita, jugando con los contrastes para potenciar la legibilidad de los contadores: el tono más claro para los segundos, el más oscuro para las horas, y el intermedio para los minutos. Concretamente, los colores serán gris claro, antracita y azul. Una combinación que pronto será emblemática. Más de cuarenta años después, El Primero sigue siendo el cronógrafo de serie más preciso del mundo, y el único capaz de medir fracciones de una décima de segundo. Asimismo, es uno de los más laureados, ya que es merecedor de innumerables premios.
¿Cual fue el primero?
Y ahora viene la pregunta: ¿cuál fue el primero?: ¿el calibre 11?, ¿el calibre 6139?, o ¿el calibre PHC 3019. Pero antes de responder volvemos a lo que nos planteábamos al inicio del artículo ya que la pregunta puede formularse de varias formas, atendiendo a las necesidades de poder lucir la “poole position” en el historial de la firma.
¿Ha de considerarse aquél que primero se presentó como un prototipo? ¿O aquel que primero se comercializó en el mercado interior? ¿O el primero es aquel que se comercializa a nivel mundial?.
La polémica se desata el 10 de enero de 1969, momento en el que Zenith-Movado convocan una pequeña y reducida rueda de prensa sólo para la prensa regional suiza, durante la que presentan los prototipos de sus trabajos; sin embargo no es hasta octubre de 1969 que los primeros relojes pueden comercializarse. La firma tenía intención de hacer público su proyecto durante la feria de Basilea, en el mes de abril, pero los rumores de que durante la feria también habría la presentación por parte de la competencia obligó a realizar su proclama y no en vano le denominaron “El Primero”, para enfatizar más el logro.
Las firmas del “Proyecto 99” tenían una serie de 100 prototipos a finales de 1968 y el anuncio de Zenith-Movado les cogió por sorpresa. No obstante la respuesta tuvo lugar el 3 de marzo de 1969 momento en el cual deciden presentar su proyecto al público ante una multitudinaria e internacional rueda de prensa simultáneamente en el Hotel International de Ginebra y en el edificio de PanAm en New York.
Durante la feria de Basilea, en abril, ambos grupos mostraron sus creaciones. Sin embargo a diferencia de Heuer-Buren/Hamilton-Breitling, que mostró múltiples modelos equipados con el calibre 11, Zenith apenas pudo mostrar dos o tres ejemplares de su cronógrafo automático. 100 prototipos equipados con el calibre 11 fueron entregados a los distribuidores más importantes de las diversas firmas que participaban en el proyecto, aunque no fue hasta el verano de ese año en que se inició la producción en serie para cubrir las demandas de todos los distribuidores.
Cada firma reclama para sí estar en la “pole position” y lo está según cómo se enfoque. Así que dejamos que cada forero determine cual es su pregunta y obtenga su propia respuesta. No les quepa la menor duda que yo ya tengo la mía.
¿Quien ganará en este duelo? ¿Qué argumentos usará para vencer?
Os invito a votar por vuestra reloj elegido. Os animo también a dar las opiniones y argumentos de vuestra elección. Que esto no se convierta exclusivamente en votar por el preferido y el más deseado, sino que también compartamos nuestros conocimientos y argumentemos nuestro voto.
Sin más dilación...
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