joler
De la casa
Sin verificar
La mayoría de aficionados a la relojería mecánica saben que la conocida como «palanca mágica» es el sistema de carga automática típico de Seiko.
Los no iniciados pueden ver un vídeo de su funcionamiento aquí
Es un excelente dispositivo que combina la robustez con la sencillez, y la facilidad de mantenimiento con la eficiencia de su funcionamiento hasta el punto de que muchos Seiko carecen de la posibilidad de carga manual porque no la necesitan.
El sistema fue desarrolado por Seiko en el año 59 y se ha mantenido inalterado desde entonces.
En la relojería europea sin embargo se optó mayoritariamente por el sistema de ruedas inversoras (el típico de una ETA 2824) que es más complejo y que requiere un mantenimiento más esmerado.
Ambas circunstancias me habían llevado a pensar que la «palanca mágica» era un desarrollo exclusivo de la relojería nipona pero no es así.
La casa Eterna ya presentó una patente en los años 40 diseñada por Benjamin Pellaton que se basa en el mismo principio de funcionamiento.
Posteriormente IWC, está vez gracias al ingenio de Albert Pellaton, desarrolló el dispositivo que lleva el nombre de su creador cuya similitud con el de Seiko es notable.
Aquí una muestra de su funcionamiento.
Simultáneamente, la casa alemana Otero patentó un sistema equivalente en el que la palanca es muy parecida a la de Seiko.
Con este sistema se pretendía mejorar la eficiencia, simplificar el diseño y reducir la altura total del reloj que ya no necesitaba un puente suplementario para albergar el módulo de carga automática.
Por la misma época Longines también coquetea con un sistema similar en su calibre 19.
A la vista de los datos se puede afirmar que aunque el de Seiko es sistema de «palanca mágica» más conocido no el primero aunque posiblemente sea el que cuenta con un diseño técnicamente más depurado.
Espero que os haya entretenido.
Los no iniciados pueden ver un vídeo de su funcionamiento aquí
Es un excelente dispositivo que combina la robustez con la sencillez, y la facilidad de mantenimiento con la eficiencia de su funcionamiento hasta el punto de que muchos Seiko carecen de la posibilidad de carga manual porque no la necesitan.
El sistema fue desarrolado por Seiko en el año 59 y se ha mantenido inalterado desde entonces.
En la relojería europea sin embargo se optó mayoritariamente por el sistema de ruedas inversoras (el típico de una ETA 2824) que es más complejo y que requiere un mantenimiento más esmerado.
Ambas circunstancias me habían llevado a pensar que la «palanca mágica» era un desarrollo exclusivo de la relojería nipona pero no es así.
La casa Eterna ya presentó una patente en los años 40 diseñada por Benjamin Pellaton que se basa en el mismo principio de funcionamiento.
Posteriormente IWC, está vez gracias al ingenio de Albert Pellaton, desarrolló el dispositivo que lleva el nombre de su creador cuya similitud con el de Seiko es notable.
Aquí una muestra de su funcionamiento.
Simultáneamente, la casa alemana Otero patentó un sistema equivalente en el que la palanca es muy parecida a la de Seiko.
Con este sistema se pretendía mejorar la eficiencia, simplificar el diseño y reducir la altura total del reloj que ya no necesitaba un puente suplementario para albergar el módulo de carga automática.
Por la misma época Longines también coquetea con un sistema similar en su calibre 19.
A la vista de los datos se puede afirmar que aunque el de Seiko es sistema de «palanca mágica» más conocido no el primero aunque posiblemente sea el que cuenta con un diseño técnicamente más depurado.
Espero que os haya entretenido.
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