rafagil
De la casa
Sin verificar
Los hechos:
Hace un año compramos un Swach de esos tan monos a pilas, con sus piedrecitas, su diseño y tal, en el outlett de La Roca, a la madre de mi mujer, alias, suegra.
En Noviembre lo fue a usar por primera vez. Nunca lo había usado. Es natural, para un reloj bueno que tiene le daba pena que se estropeara en el uso diario... En fin, cosas de ellas.
Pues en Noviembre no funcionaba.
Solución, ir al relojero del Swatch de La Roca Village, y ya sabemos cómo funcionan los relojeros de Swatch:
-No funciona. Coge otro del mismo precio- (sí, los dependientes enrollaetes hablan de tú a las clientas octogenarias, talmente como si fueran sus nietos)
Pues ahora, mes y medio después, va a coger el nuevo para ir al teatro y resulta que tampoco funciona, por lo que tendremos que hacer otro viajecito a La Roca y explicar al amigo enrollaete que aquí la señora no abre nueces con el reloj, ni hace submarinismo, ni paracaidismo. Ni siquiera judo, por lo que difícilmente lo habrá estropeado ella.
En fin, sea como sea, de aquí no pasa sin poner una reclamación. Me den otro a cambio o no.
De todos modos estas cosas nos pasan, y ya lo deberíamos saber, por comprar relojes que no se pueden abrir, revisar ni limpiar.
Para la próxima ya sé qué no comprar.
PD.- Ayer recogí de Hora Exacta, convenientemente revisado, mi último relojito; un Bulova precioso de 60 años... que se ríe a carcajadas de las moderneces del Swatch.
Hace un año compramos un Swach de esos tan monos a pilas, con sus piedrecitas, su diseño y tal, en el outlett de La Roca, a la madre de mi mujer, alias, suegra.
En Noviembre lo fue a usar por primera vez. Nunca lo había usado. Es natural, para un reloj bueno que tiene le daba pena que se estropeara en el uso diario... En fin, cosas de ellas.
Pues en Noviembre no funcionaba.
Solución, ir al relojero del Swatch de La Roca Village, y ya sabemos cómo funcionan los relojeros de Swatch:
-No funciona. Coge otro del mismo precio- (sí, los dependientes enrollaetes hablan de tú a las clientas octogenarias, talmente como si fueran sus nietos)
Pues ahora, mes y medio después, va a coger el nuevo para ir al teatro y resulta que tampoco funciona, por lo que tendremos que hacer otro viajecito a La Roca y explicar al amigo enrollaete que aquí la señora no abre nueces con el reloj, ni hace submarinismo, ni paracaidismo. Ni siquiera judo, por lo que difícilmente lo habrá estropeado ella.
En fin, sea como sea, de aquí no pasa sin poner una reclamación. Me den otro a cambio o no.
De todos modos estas cosas nos pasan, y ya lo deberíamos saber, por comprar relojes que no se pueden abrir, revisar ni limpiar.
Para la próxima ya sé qué no comprar.
PD.- Ayer recogí de Hora Exacta, convenientemente revisado, mi último relojito; un Bulova precioso de 60 años... que se ríe a carcajadas de las moderneces del Swatch.
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