Super 8
De la casa
Sin verificar
Siendo un adolescente, y fisgando en el ECI de Bilbao me encapriché de un precioso Viceroy que acabé comprando a base de juntar asignaciones semanales. Ese Viceroy era un Swiss Made y tenía un calibre ETA de cuarzo. La puñeta es que tenía una caja de bronce o latón con una capa dura que se fué rápido, y quedó feo en dos días. 
No conocía el reloj en el que se basaba y años más tarde descubrí el Lindbergh, su historia y ese dial que en su día tanto me gustó. Era incluso más bonito. Y, como con el Speedy, también me dije que algún día sería mío. Además, mi abuelo tuvo como reloj un Longines de bolsillo, lo que hacía que esa firma fuera especial para mí.
He cumplido ésta semana 40 años. Quizá por el tema de ser una cifra redonda, más aún en la que figuradamente se pasa por el ecuador de la vida, se tiende a hacer un balance de lo vivido y por vivir, y he querido quitarme una espinita y celebrarlos con él.
No querría presentarlo sin antes agradecer a un gran forero y mejor persona como es Deivid el poder tenerlo; y a José Moreno de Armando Martínez tanto por su magnífica atención, como porque hizo un gran esfuerzo para encontrar una unidad disponible a tiempo para que pudiera celebrar mi cumpleaños con él en la muñeca. Muchísimas gracias a ambos.
El "unboxing" no lo he hecho hoy, pero venía de Armando Martínez muy bien preparado, envuelto para regalo y con un par de revistas.
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El reloj viene con una presentación extraordinaria, de la que sinceramente podía aprender Omega. Una enorme caja de cartón forrada en tela, y dentro un estuche en madera y piel.
Una vez abierto tenemos el reloj, junto con una extension de la correa para llevar por el exterior de la cazadora. En el piso inferior del estuche hay un plano del vuelo trasatlántico de Lindbergh, con instrucciones en el reverso para calcular la posición a través del reloj, mas un precioso libro de la firma.
El reloj tiene una caja bastante trabajada y con diámetro considerable, 47mm, pero que se correspondía con el del reloj original. El reloj también cuenta con cristal en zafiro, corona de cebolla, agujas tipo Bréguet azuladas y un bisel bidireccional con un resalte en el "15". La correa es en Alígator y en una medida innusual, 25mm.
La esfera es en enamel, y la subesfera inferior se puede girar a través de la corona.
El pequeño pulsador a las 4 abre una trasera de tipo charnela. Cuando aquí se discute si es mejor fondo visto o ciego, éste tiene lo mejor de ambos mundos. En la cara externa se ve un viejo logo de la firma con el reloj alado, en la cara interna una presentación del reloj y, tras un cristal de zafiro podemos ver el precioso calibre Longines L699 decorado, con base Valgranges, que en el tiempo que lo llevo controlando parece ir muy bien afinado.
Ya sólo me quedan dos en la lista, un Movado Museum automático y -ese me parece que tardará bastante más- un JLC Reverso.
El reloj fué diseñado por Charles Lindbergh en 1931, el cual, en 1927 y con 25 años hizo el primer vuelo trasatlántico en su avión "El espíritu de San Luís", desde EEUU al aeropuerto de LeBourget, en París. El vuelo duró 33 horas. Seis aviadores habían perdido previamente la vida al intentar un vuelo similar.
Charles Lindbergh - Wikipedia, la enciclopedia libre
Será, tras algunos Cartier, el reloj más veterano del mercado y que de una manera más o menos ininterrumpida más tiempo lleva en producción, más de ocho décadas. Y, a pesar de que puede ser hoy Breitling la marca que más se asocia a la aviación, o IWC la que más partido saque a sus XVIIIIII de turno, era Longines la firma que llevaron los pioneros de la aviación de los años '20 y '30, de hecho, no sólo Charles Lindbergh los usó en su famosísimo vuelo transoceánico, sino que también Amelia Earhart llevaba un Longines como reloj instrumento.
La base del diseño era un reloj diseñado por el comandante de la marina estadounidense Philip van Horn Weems en 1926 con bisel móvil para poder sincronizar el reloj con alguna señal de radio como ayuda para la navegación. Weems también diseñó otros muchos instrumentos de navegacion, entre ellos un sextante que podía funcionar sin necesidad de otear el horizonte. Trabajó posteriormente para la NASA cuando ésta se formó en temas de navegación y fué en su día el oficial de la marina de más edad que fué requerido de nuevo al servicio con 72 años. Muchos de esos inventos sigue fabricándolos a día de hoy su compañía http://www.weems-plath.com
Longines tiene un minisite dedicado al reloj, en el que se puede determinar la posición de cada uno.
Edito y añado: Por cierto, éste hacía mi mensaje 11.111 en éste foro.
No conocía el reloj en el que se basaba y años más tarde descubrí el Lindbergh, su historia y ese dial que en su día tanto me gustó. Era incluso más bonito. Y, como con el Speedy, también me dije que algún día sería mío. Además, mi abuelo tuvo como reloj un Longines de bolsillo, lo que hacía que esa firma fuera especial para mí.
He cumplido ésta semana 40 años. Quizá por el tema de ser una cifra redonda, más aún en la que figuradamente se pasa por el ecuador de la vida, se tiende a hacer un balance de lo vivido y por vivir, y he querido quitarme una espinita y celebrarlos con él.
No querría presentarlo sin antes agradecer a un gran forero y mejor persona como es Deivid el poder tenerlo; y a José Moreno de Armando Martínez tanto por su magnífica atención, como porque hizo un gran esfuerzo para encontrar una unidad disponible a tiempo para que pudiera celebrar mi cumpleaños con él en la muñeca. Muchísimas gracias a ambos.
El "unboxing" no lo he hecho hoy, pero venía de Armando Martínez muy bien preparado, envuelto para regalo y con un par de revistas.
:El reloj viene con una presentación extraordinaria, de la que sinceramente podía aprender Omega. Una enorme caja de cartón forrada en tela, y dentro un estuche en madera y piel.
Una vez abierto tenemos el reloj, junto con una extension de la correa para llevar por el exterior de la cazadora. En el piso inferior del estuche hay un plano del vuelo trasatlántico de Lindbergh, con instrucciones en el reverso para calcular la posición a través del reloj, mas un precioso libro de la firma.
El reloj tiene una caja bastante trabajada y con diámetro considerable, 47mm, pero que se correspondía con el del reloj original. El reloj también cuenta con cristal en zafiro, corona de cebolla, agujas tipo Bréguet azuladas y un bisel bidireccional con un resalte en el "15". La correa es en Alígator y en una medida innusual, 25mm.
La esfera es en enamel, y la subesfera inferior se puede girar a través de la corona.
El pequeño pulsador a las 4 abre una trasera de tipo charnela. Cuando aquí se discute si es mejor fondo visto o ciego, éste tiene lo mejor de ambos mundos. En la cara externa se ve un viejo logo de la firma con el reloj alado, en la cara interna una presentación del reloj y, tras un cristal de zafiro podemos ver el precioso calibre Longines L699 decorado, con base Valgranges, que en el tiempo que lo llevo controlando parece ir muy bien afinado.
Ya sólo me quedan dos en la lista, un Movado Museum automático y -ese me parece que tardará bastante más- un JLC Reverso.
El reloj fué diseñado por Charles Lindbergh en 1931, el cual, en 1927 y con 25 años hizo el primer vuelo trasatlántico en su avión "El espíritu de San Luís", desde EEUU al aeropuerto de LeBourget, en París. El vuelo duró 33 horas. Seis aviadores habían perdido previamente la vida al intentar un vuelo similar.
Charles Lindbergh - Wikipedia, la enciclopedia libre
Será, tras algunos Cartier, el reloj más veterano del mercado y que de una manera más o menos ininterrumpida más tiempo lleva en producción, más de ocho décadas. Y, a pesar de que puede ser hoy Breitling la marca que más se asocia a la aviación, o IWC la que más partido saque a sus XVIIIIII de turno, era Longines la firma que llevaron los pioneros de la aviación de los años '20 y '30, de hecho, no sólo Charles Lindbergh los usó en su famosísimo vuelo transoceánico, sino que también Amelia Earhart llevaba un Longines como reloj instrumento.
La base del diseño era un reloj diseñado por el comandante de la marina estadounidense Philip van Horn Weems en 1926 con bisel móvil para poder sincronizar el reloj con alguna señal de radio como ayuda para la navegación. Weems también diseñó otros muchos instrumentos de navegacion, entre ellos un sextante que podía funcionar sin necesidad de otear el horizonte. Trabajó posteriormente para la NASA cuando ésta se formó en temas de navegación y fué en su día el oficial de la marina de más edad que fué requerido de nuevo al servicio con 72 años. Muchos de esos inventos sigue fabricándolos a día de hoy su compañía http://www.weems-plath.com
Longines tiene un minisite dedicado al reloj, en el que se puede determinar la posición de cada uno.
Edito y añado: Por cierto, éste hacía mi mensaje 11.111 en éste foro.
Última edición:
lo vi en vitrina y es un espectaculo a pesar de su tamaño puesto en muñeca no queda mal, el color de las agujas y su diseño es enamorador, lo tengo en mi lista d futuribles, felicidades y q disfrutes de esta joya.
