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Jaeger Automotive Instruments
Es frecuente observar que los amantes de los coches también lo son de los relojes, y si se piensa en ello, tiene sentido. Ambos campos valoran y entienden la importancia de la extrema precisión, la excelencia, la innovación mecánica, y el hincapié que hacen en la precisión en los ajustes de los pequeños componentes. Durante una época una marca que actualmente fabrica relojes, se incursionó en proyectos de automoción, y colaboró con algunas de las marcas más famosas de todos los tiempos. La marca de la que hablamos es Jaeger LeCoultre.
Velocímetro Jaeger.
En 1907, Jaeger comenzó a colaborar con otra empresa con el nombre de LeCoultre, ya que tenía un contrato de 15 años para producir movimientos para Cartier, y necesitaba ayuda. Durante el transcurso de la primera guerra mundial, Edmond Jaeger entendió que era necesario la expansión y la diversificación de la empresa para garantizar su supervivencia, y comenzó a producir instrumentos de aviación para los pilotos ingleses y franceses, de nuevo con la ayuda de la compañía de Jacques-David LeCoultre. Los subproductos de este esfuerzo colectivo se hicieron tan venerados, que incluso los pilotos alemanes comenzaron a utilizar los instrumentos Jaeger de los aviones que habían derribado. Esta noción puede ser apoyada por el hecho de que un instrumento Jaeger fue encontrado en la cabina de Manfred von Richthofen, cuando el famoso As alemán conocido como el Barón Rojo, fue finalmente derribado.
Los restos del avión del Barón Rojo, donde se cree que se han encontrado un instrumento de Jaeger.
A raíz de este gran éxito, al final de la guerra, Jaeger LeCoultre aplican los mismos estándares de calidad y “know-how” para la fabricación de instrumentos similares y grupos de instrumentos, sólo que esta vez para los automóviles. Tanto los fabricantes de motores como los mas importantes carroceros de coches de lujo se interesaron por sus instrumentos y en 1920, Jaeger LeCoultre habían fabricado 20.000 "contadores" solo para el mercado británico.
Esto hizo que Jaeger LeCoultre abriese un taller en Londres dedicado exclusivamente a la fabricación de instrumentos para el sector automovilístico, dando trabajo aproximadamente a 700 personas en su momento de mayor apogeo.
Edmond Jaeger y Jacques-David LeCoultre.
Aunque los taquímetros, velocímetros, indicadores de combustible, y otras herramientas montados en el tablero pueden haberse realizado en un centro con sede en Londres, Jaeger se las arreglo para abrirse camino en este sector y estar presente en los cuadros de mando de un sinnúmero de importantes casas coches de todo el mundo, algunos de los modelos mas emblemáticos de antes de la WW2 como el Aston Martin Le Mans, ya estaban equipados con los contadores de Jaeger.
Aston Martin LWB MKII Tourer, de 1,5 litros de 1935
La presencia de los contadores de Jaeger en los salpicaderos de muchas casa de coches se empezó a reducir a partir de la muerte de Jacques-David LeCoultre y la aparición de nuevas casas de instrumentos para el automóvil como Smiths, un fabricante británico de relojes que pasaría a dominar el mercado de los instrumentos montados en el tablero.
Actualmente todavía se pueden ver en los salpicaderos de los viejos Lamborghinis, Renaults, Abarths y Lancia los contadores de Jaeger
Sin lugar a dudas, esta colaboración representa uno de los períodos más importantes en la historia de estas dos compañías, ya que finalmente se fusionarían en 1937.
El enlace de este articulo es el siguiente: https://www.notey.com:443/@woundfor...istory-the-omega-speedmaster-mark-series.html
Es frecuente observar que los amantes de los coches también lo son de los relojes, y si se piensa en ello, tiene sentido. Ambos campos valoran y entienden la importancia de la extrema precisión, la excelencia, la innovación mecánica, y el hincapié que hacen en la precisión en los ajustes de los pequeños componentes. Durante una época una marca que actualmente fabrica relojes, se incursionó en proyectos de automoción, y colaboró con algunas de las marcas más famosas de todos los tiempos. La marca de la que hablamos es Jaeger LeCoultre.
Velocímetro Jaeger.
En 1907, Jaeger comenzó a colaborar con otra empresa con el nombre de LeCoultre, ya que tenía un contrato de 15 años para producir movimientos para Cartier, y necesitaba ayuda. Durante el transcurso de la primera guerra mundial, Edmond Jaeger entendió que era necesario la expansión y la diversificación de la empresa para garantizar su supervivencia, y comenzó a producir instrumentos de aviación para los pilotos ingleses y franceses, de nuevo con la ayuda de la compañía de Jacques-David LeCoultre. Los subproductos de este esfuerzo colectivo se hicieron tan venerados, que incluso los pilotos alemanes comenzaron a utilizar los instrumentos Jaeger de los aviones que habían derribado. Esta noción puede ser apoyada por el hecho de que un instrumento Jaeger fue encontrado en la cabina de Manfred von Richthofen, cuando el famoso As alemán conocido como el Barón Rojo, fue finalmente derribado.
Los restos del avión del Barón Rojo, donde se cree que se han encontrado un instrumento de Jaeger.
A raíz de este gran éxito, al final de la guerra, Jaeger LeCoultre aplican los mismos estándares de calidad y “know-how” para la fabricación de instrumentos similares y grupos de instrumentos, sólo que esta vez para los automóviles. Tanto los fabricantes de motores como los mas importantes carroceros de coches de lujo se interesaron por sus instrumentos y en 1920, Jaeger LeCoultre habían fabricado 20.000 "contadores" solo para el mercado británico.
Esto hizo que Jaeger LeCoultre abriese un taller en Londres dedicado exclusivamente a la fabricación de instrumentos para el sector automovilístico, dando trabajo aproximadamente a 700 personas en su momento de mayor apogeo.
Edmond Jaeger y Jacques-David LeCoultre.
Aunque los taquímetros, velocímetros, indicadores de combustible, y otras herramientas montados en el tablero pueden haberse realizado en un centro con sede en Londres, Jaeger se las arreglo para abrirse camino en este sector y estar presente en los cuadros de mando de un sinnúmero de importantes casas coches de todo el mundo, algunos de los modelos mas emblemáticos de antes de la WW2 como el Aston Martin Le Mans, ya estaban equipados con los contadores de Jaeger.
Aston Martin LWB MKII Tourer, de 1,5 litros de 1935
La presencia de los contadores de Jaeger en los salpicaderos de muchas casa de coches se empezó a reducir a partir de la muerte de Jacques-David LeCoultre y la aparición de nuevas casas de instrumentos para el automóvil como Smiths, un fabricante británico de relojes que pasaría a dominar el mercado de los instrumentos montados en el tablero.
Actualmente todavía se pueden ver en los salpicaderos de los viejos Lamborghinis, Renaults, Abarths y Lancia los contadores de Jaeger
Sin lugar a dudas, esta colaboración representa uno de los períodos más importantes en la historia de estas dos compañías, ya que finalmente se fusionarían en 1937.
El enlace de este articulo es el siguiente: https://www.notey.com:443/@woundfor...istory-the-omega-speedmaster-mark-series.html
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