M
manuel fernandez f
Forer@ Senior
Sin verificar
Estimados compañeros, me gustaría compartirlo con vosotros como se merece pero lo de la fotografía no se me da bien y ¡¡mira que he intentado sacarle unas fotos!!.
La historia es que ya desde pequeño siempre me "intrigaron los relojes" y de esa curiosidad por los mismos tiene la culpa mi padre, desde el primer reloj que me regaló (un Cauny prima) que abrí y le saqué el muelle real para luego esconderlo o mejor dicho, tirarlo y decirle que lo había perdido, y así hasta hoy que a mis 54 años, me atreví a abril el suyo que me dejó en herencyia, un OMEGA 601 de oro macizo con milanesa también de oro y que está como el primer día (conservo la caja, papeles de compra y las dos revisiones a las que fue sometido a lo largo destes años). Ni que decir tiene que su marcha es impecable y que darle cuerda es una auténtica delicia. Deciros también que mi padre lo cuidaba mucho, hasta tal punto que a diario usaba un CYMA de los años 50, que también conservo y que restauré (también con una marcha impecable) y los domingos, festivos y días señalados ponía su OMEGA.
Deciros queridos compañeros que sigo haciendo lo mismo que él, de tal manera que ese reloj fue usado por última vez por mi el pasado 23 de julio en la boda de mi hijo....
Sé que esta historia no está completa sin el susodicho pero las fotos y el colgarlas en el programa no es mi fuerte, pero prometo que lo intentaré y volveré a contar la historia.
Saludos a todos/as
La historia es que ya desde pequeño siempre me "intrigaron los relojes" y de esa curiosidad por los mismos tiene la culpa mi padre, desde el primer reloj que me regaló (un Cauny prima) que abrí y le saqué el muelle real para luego esconderlo o mejor dicho, tirarlo y decirle que lo había perdido, y así hasta hoy que a mis 54 años, me atreví a abril el suyo que me dejó en herencyia, un OMEGA 601 de oro macizo con milanesa también de oro y que está como el primer día (conservo la caja, papeles de compra y las dos revisiones a las que fue sometido a lo largo destes años). Ni que decir tiene que su marcha es impecable y que darle cuerda es una auténtica delicia. Deciros también que mi padre lo cuidaba mucho, hasta tal punto que a diario usaba un CYMA de los años 50, que también conservo y que restauré (también con una marcha impecable) y los domingos, festivos y días señalados ponía su OMEGA.
Deciros queridos compañeros que sigo haciendo lo mismo que él, de tal manera que ese reloj fue usado por última vez por mi el pasado 23 de julio en la boda de mi hijo....
Sé que esta historia no está completa sin el susodicho pero las fotos y el colgarlas en el programa no es mi fuerte, pero prometo que lo intentaré y volveré a contar la historia.
Saludos a todos/as