RYUICHI
Milpostista
Sin verificar
Zaida, Alfonso y yo salimos de Alicante en tren hasta Orihuela (del Señor), donde nos esperaba Manolo, el cual nos dirigió al clásico de clásicos (El Samoa) a tomar unas cervezas mientras esperábamos a Juan.
Para hacer boca, Manolo nos mostró su última adquisición (Mont Blanc 146 burdeos) y la niña de sus ojos (rasgados) Nakaya:
Lo cierto es que Juan no llegaba y en el Samoa se frotaban las manos viéndonos pedir rondas, una y otra vez. Cuando ya teníamos a Juan en Orihuela, a escasos doscientos metros, nos llamó y dijo que se iba a su casa echando leches por un problema que había surgido.
Así que nos encaminamos hacia el restaurante bastante cariacontecidos con la ausencia de Juan.
Aquí estamos a la espera de los aperitivos, en la primer Zaida me decía ¡sácame guapa!
El Restaurante era La Cantina y lo recomiendo. No hay fotos de nada de lo que comimos (salvo las que ha subido Zaida en el hilo original). Sólo porque quede constancia: aperitivos (mejillones al vapor, calamares a la romana, pulpo a la gallega), plato principal arroz y costra excelente, de postre un tocino de cielo celestial y cafés, chupitines y refrescos de tónica.
Afortunadamente, Juan nos volvió a llamar y dijo que venía, aunque llegaría a la hora del café, así que por malo sólo tuvo café, postre, chupitín y refresco.
A partir de aquí comenzó el despliegue; como Alf nos trajo unos tapetes repelentes a la suciedad, no dejamos ni que nos prepararan la mesa (ahí se quedó un pedazo de pan "t'ol rato"). Aquí tenéis unas maravillosas Omas ogiva arco brown, Delta the Journal junto a una Daniel Defoe (que Juan compartió con nosotros)
Intermedio, interval, intervalle, pause ......
Para hacer boca, Manolo nos mostró su última adquisición (Mont Blanc 146 burdeos) y la niña de sus ojos (rasgados) Nakaya:
Lo cierto es que Juan no llegaba y en el Samoa se frotaban las manos viéndonos pedir rondas, una y otra vez. Cuando ya teníamos a Juan en Orihuela, a escasos doscientos metros, nos llamó y dijo que se iba a su casa echando leches por un problema que había surgido.
Así que nos encaminamos hacia el restaurante bastante cariacontecidos con la ausencia de Juan.
Aquí estamos a la espera de los aperitivos, en la primer Zaida me decía ¡sácame guapa!
El Restaurante era La Cantina y lo recomiendo. No hay fotos de nada de lo que comimos (salvo las que ha subido Zaida en el hilo original). Sólo porque quede constancia: aperitivos (mejillones al vapor, calamares a la romana, pulpo a la gallega), plato principal arroz y costra excelente, de postre un tocino de cielo celestial y cafés, chupitines y refrescos de tónica.
Afortunadamente, Juan nos volvió a llamar y dijo que venía, aunque llegaría a la hora del café, así que por malo sólo tuvo café, postre, chupitín y refresco.
A partir de aquí comenzó el despliegue; como Alf nos trajo unos tapetes repelentes a la suciedad, no dejamos ni que nos prepararan la mesa (ahí se quedó un pedazo de pan "t'ol rato"). Aquí tenéis unas maravillosas Omas ogiva arco brown, Delta the Journal junto a una Daniel Defoe (que Juan compartió con nosotros)
Intermedio, interval, intervalle, pause ......
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