Tienes razón en la "falta de claridad" en cuanto a quién fabrica sus plumines. Omas los fabricó hasta los comienzos de este siglo. A partir de entonces, el triste momento en el que la mayor parte de las marcas pasaron a manos de fondos de inversión, más preocupados por el beneficio que por el arte en sí mismo, "obligó" a muchos a dejar de hacer por si mismos lo que hasta la fecha era una labor propia y externalizar ciertas producciones para abaratar costes. Ello no implica peor calidad en absoluto, pero sin lugar a duda priva de esa especial "personalidad" al tacto de ciertas marcas.
En cuanto a Bock, es una fábrica de plumines que pronto cumplirá un siglo. Han fabricado plumines para las grandes marcas alemanas desde sus comienzos (Geha, Soennecken, Boehlr, Lamy, Kaweco, Senator, y un largo etc). Hoy día, muchas de las marcas más pretigiosas también recurren a ellos. En todo caso, cuando uno compra plumines a Bock, puede hacerlo de varias maneras:
- Recurrir a sus "kits" de plumín+alimentador, que identifican el tamaño numéricamente, y que llevarán tu logo si compras más de X. Es la forma más "económica", ya no sólo por lo que Bock te cobra por el producto, sino por los gastos de producción dle mismo.
- Los pedidos "personalizados" (custom). Aquí convergen múltiples circunstancias, pero básicamente consiste en que yo diseño un plumín determinado y luego le pido a Bock que use sus instalaciones para fabricarlos. El caso es que previa a la fase de producción hay una intensa labor de diseño y ensayo, lo que supone un gasto considerable. Valga como ejemplo el plumín de Paladio de Visconti o los Fusión de Delta, que son fabricados por Bock, pero cuya patente y diseño son propios de la marca. Bock no puede fabricar plumines fusión para Faber aunque sea él quien los produce "materialmente". Desde este punto de vista, no difiere mucho esta circunstancia del hecho de que la compañía no fabrica el celuloide o el acrílico con el que tornea los cuerpos de sus plumas, y no por ello es "menos" lo que te dan. Por suerte, Omas sigue, o al menos seguía, fabricando sus alimentadores de ebonita, y Bock sólo "materializa" los plumines de oro tal y como s lo solicita Omas. Al llegar a la factoría boloñesa los "técnicos" afinan esos plumines.
Me gustaría que Omas siguiese fabricando sus propios plumines por un motivo principal: eran muy buenos. Esto no quiere decir que fuesen mejores o ni peores que los actuales, sino que eran sencillamente distintos.