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Mulleras
Visitante
Buenas tardes.
Vuelvo a saltarme el orden alfabético, y esta vez también el cronológico.
Esta Pelikan M400 Old Style la compré, en un principio, de color marrón y si no recuerdo mal, se la compré a un individuo de Barcelona mediante Wallapop por unos 60 euros.
Una vez en casa, al cargarla, perdía tinta por la parte superior, por entre el cuerpo y el culote que giramos para accionar el émbolo. Durante días tuve las manos como la lengua de un Chow-chow. Pero por el precio que pagué por ella, me pareció un riesgo asumible.
Fue la primera Pelikan que desmonté y, ya lo habrán imaginado, la primera que me cargué (y la última).
Una vez localizadas las piezas a reponer llamé a Júlia Gusano para comprarlas, pero no fue posible encontrarlas. Como decimos por aquí “cagada pastoret”.
Entonces un buen amigo se ofreció a echarle un ojo y le dije que no tuviera piedad con ella, ya que en peor estado no podía dejarla y que en caso de que palmara se la quedara como donante.
Sobrevivió a la intervención y volvió a casa, con severas secuelas. Me dijo que en la medida de lo posible la cargara con el sistema de goteo desmontando el grupo alimentador porque, aunque funcionara perfectamente el sistema de carga original, había quedado muy debilitado y cualquier sobre esfuerzo que le infringiera podía estropearlo definitivamente.
Esto la convirtió en una pluma apestada pues, aunque escribe estupendamente, para mi no estaba como considero que tiene que estar una pieza en una de mis colecciones. Técnicamente en perfecto uso. Pasó a hacer compañía a la Parker Vacumatic de la que les hablé en mi último mensaje.
Allí quedó la pluma. No quería usarla para no cargármela y no podía venderla sabiendo de su estado.
Pero hace unos meses, hablando con el amigo citado anteriormente, me dijo que se la enviara otra vez que quizás ahora podría dejarla bien apañada con las piezas de una donante que tenía. Dicho y hecho.
Cuando la pluma vuelve a casa lo hace vestida de gala pues, le ha cambiado el cuerpo por uno de rayas verdes y negras, como sabe que me gustan a mi las Pelikan. Lo que yo no sabía es que desmontó una Pelikan M400 Old Style de su colección que tenía duplicada para dejar la mía en perfecto estado. Luego se excuso diciendo que así él conseguía un cuerpo marrón que le gustaba más. ¡Milongas!
Desde entonces esta Pelikan M400 Old Style forma parte de mi colección de Pelikanes en LCDLD de forma vitalicia, como sus hermanas.
La pluma calza un plumín F de oro de 14K suave a más no poder. Es muy ligera cómoda y aguanta las horas que le echen escribiendo. No permite perder la concentración porque cuando el plumín adopta un ángulo inadecuado empieza a rascar el papel como la toalla de la niña del “rasca mamá” (lo siento por los más jóvenes que no entenderán el símil) y nos hace corregirlo. Me ha parecido muy curioso que el criterio del grosor del trazo sea tan arbitrario dentro de la marca. El EF de la M800 parece más un M generoso y en cambio este F de la M400 parece más un alfiler. No entiendo nada. Ahora que quiero comprar una M600 no se que plumín pedir. ¡Qué cosas!
Actualmente está cargada con Waterman Absolut Brown, como pueden apreciar en la foto del borrador, y el papel usado vuelve a ser el Rhodia Nº 16. Es un papel muy agradecido y suave. Hice acopio hace unos años en Arlepo y con eso de usar los que voy encontrando de oferta me he dado cuenta de que nunca uso el papel bueno que tengo almacenado. Así que ahora procuro usarlo para cualquier cosa que quiera escribir, porque así lo disfruto siempre y no solo cuando paso a limpio los borradores.
[FONT="]Bueno, pues ya tenemos otro mensaje a descontar de los 100 que necesito tener escritos para poder venderles a ustedes mis pamplinadas de escritura por aquí. ¡A pico y pala! Un saludo y muchas gracias.
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Vuelvo a saltarme el orden alfabético, y esta vez también el cronológico.
Esta Pelikan M400 Old Style la compré, en un principio, de color marrón y si no recuerdo mal, se la compré a un individuo de Barcelona mediante Wallapop por unos 60 euros.
Una vez en casa, al cargarla, perdía tinta por la parte superior, por entre el cuerpo y el culote que giramos para accionar el émbolo. Durante días tuve las manos como la lengua de un Chow-chow. Pero por el precio que pagué por ella, me pareció un riesgo asumible.
Fue la primera Pelikan que desmonté y, ya lo habrán imaginado, la primera que me cargué (y la última).
Una vez localizadas las piezas a reponer llamé a Júlia Gusano para comprarlas, pero no fue posible encontrarlas. Como decimos por aquí “cagada pastoret”.
Entonces un buen amigo se ofreció a echarle un ojo y le dije que no tuviera piedad con ella, ya que en peor estado no podía dejarla y que en caso de que palmara se la quedara como donante.
Sobrevivió a la intervención y volvió a casa, con severas secuelas. Me dijo que en la medida de lo posible la cargara con el sistema de goteo desmontando el grupo alimentador porque, aunque funcionara perfectamente el sistema de carga original, había quedado muy debilitado y cualquier sobre esfuerzo que le infringiera podía estropearlo definitivamente.
Esto la convirtió en una pluma apestada pues, aunque escribe estupendamente, para mi no estaba como considero que tiene que estar una pieza en una de mis colecciones. Técnicamente en perfecto uso. Pasó a hacer compañía a la Parker Vacumatic de la que les hablé en mi último mensaje.
Allí quedó la pluma. No quería usarla para no cargármela y no podía venderla sabiendo de su estado.
Pero hace unos meses, hablando con el amigo citado anteriormente, me dijo que se la enviara otra vez que quizás ahora podría dejarla bien apañada con las piezas de una donante que tenía. Dicho y hecho.
Cuando la pluma vuelve a casa lo hace vestida de gala pues, le ha cambiado el cuerpo por uno de rayas verdes y negras, como sabe que me gustan a mi las Pelikan. Lo que yo no sabía es que desmontó una Pelikan M400 Old Style de su colección que tenía duplicada para dejar la mía en perfecto estado. Luego se excuso diciendo que así él conseguía un cuerpo marrón que le gustaba más. ¡Milongas!
Desde entonces esta Pelikan M400 Old Style forma parte de mi colección de Pelikanes en LCDLD de forma vitalicia, como sus hermanas.
La pluma calza un plumín F de oro de 14K suave a más no poder. Es muy ligera cómoda y aguanta las horas que le echen escribiendo. No permite perder la concentración porque cuando el plumín adopta un ángulo inadecuado empieza a rascar el papel como la toalla de la niña del “rasca mamá” (lo siento por los más jóvenes que no entenderán el símil) y nos hace corregirlo. Me ha parecido muy curioso que el criterio del grosor del trazo sea tan arbitrario dentro de la marca. El EF de la M800 parece más un M generoso y en cambio este F de la M400 parece más un alfiler. No entiendo nada. Ahora que quiero comprar una M600 no se que plumín pedir. ¡Qué cosas!
Actualmente está cargada con Waterman Absolut Brown, como pueden apreciar en la foto del borrador, y el papel usado vuelve a ser el Rhodia Nº 16. Es un papel muy agradecido y suave. Hice acopio hace unos años en Arlepo y con eso de usar los que voy encontrando de oferta me he dado cuenta de que nunca uso el papel bueno que tengo almacenado. Así que ahora procuro usarlo para cualquier cosa que quiera escribir, porque así lo disfruto siempre y no solo cuando paso a limpio los borradores.
[FONT="]Bueno, pues ya tenemos otro mensaje a descontar de los 100 que necesito tener escritos para poder venderles a ustedes mis pamplinadas de escritura por aquí. ¡A pico y pala! Un saludo y muchas gracias.
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