Hola amigos!
Muy interesante esta discusión sobre los Daytona Paul Newman con dial rojo.
La verdad es que es toda una novedad para mí, esto de la "conexión Argentina", aunque me permito discrepar con el articulista del Foro colega que ha sido referenciado aquí, siendo mi sospecha que, el tema de las raices de la aparición de estos diales "coloraos", se debe buscar mejor en Italia, y acicateada por la devoción casi religiosa que existe allí hacia el Daytona, más la confluencia de "dealers" y excelentes medios técnicos y comerciales, pero de inescrupulosa filosofìa, que han hecho aparecer a estos ejemplares.
Respaldando esta "sensación" o idea mía, he leído hace unos meses un interesante artículo que, con vuestro permiso, reproduzco a continuación en mi traducción lo más fiel posible.
Os invito a leerlo, y a sacar vuestras propias conclusiones. Un cordial saludo, Tonin.
Es interesante mencionar, un breve reportaje fotográfico publicado en el número de Octubre de 2010, de la revista de relojes italiana “OM Magazine”, que se refiere al Daytona Pal Newman de cuadrante Rojo, con unas bellísimas fotografías, aunque con un demasiado corto texto, para mi gusto.
Dicho artículo cierra con este importante comentario, firmado por el Sr. Davide Parmegiani, un conspicuo “marchant” internacional, de relojes vintage y de colección, de la ciudad de Milano:
“Daytona Rossi, perche no!”
Para mantener la imagen de esta revista, que debe ser imparcial, nosotros deberíamos profundizar en esta historia del “Daytona Rojo”. En este aspecto, mi breve presentación debería terminar aquí, porque estos maravillosos objetos que son tan atrayentes y el sueño de cualquier “Daytonero”, no poseen una historia propia.
Mi reticencia a creer que estos Daytona Rojos son el resultado de una producción limitada de la casa Rolex, se fundamenta en el hecho de que estos “Rojos” nunca habían sido visto antes, durante los primeros 25 años del coleccionismo, los años en que los más conocidos “traders” de la época, como Dames & Wingate, Piretti, Barracca, Fabián, Lorenzi, tan solo para mencionar a algunos de estos pioneros en el comercio internacional de relojería, competían entre ellos en la búsqueda de toda pieza de calidad para satisfacer un mercado en desarrollo y hambriento de piezas raras.
¿Cómo puede ser que ellos jamás hayan visto o tenido en sus manos al menos uno, en ese período?
¿Cómo puede ser que ni uno solo de estos relojes haya aparecido jamás en una subasta? ¿Cómo puede ser que uno de estos rojos, en estado dañado, o incluso semi destruído, no haya aparecido jamás, en uno de los miles de Convenciones de los EE.UU.?
¿Cómo puede ser que todos los que han aparecido, lo han hecho recién ahora, en los primeros años del nuevo siglo, y se encuentran en un perfecto estado de conservación, o prácticamente nuevos?
Y finalmente, ¿cómo puede ser que, en un reciente y brillante descubrimiento de una sorprendente colección de diales prototipos fabricados para la Rolex, acumulada por unos muy serios caballeros, en ella no se encontraba ni un solo cuadrante color rojo?
No hay respuestas para estas preguntas, sólo distintos enfoques o filosofías de pensamiento.
Nosotros somos totalmente libres de pensar y creer lo que cada uno prefiera, como también somos libres de elegir… Y yo he elegido que jamás habré de vender a un Cliente o a un Amigo, un Pal Newman Rojo.