I
-Invitado-
Visitante
El dia que Don Antonio se jubiló, y en agradecimiento, la empresa le obsequió con un Rolex de oro por los casi 50 años que les había dedicado.
Cada dia despues de comer tenia por costumbre bajar al bar, a echar la partidita, e irremediablemente cada dia se quedaba dormido.
Un dia, sus amigos, que eran todos unos guasones, aprovechando que estaba en brazos de Morfeo, le cambian el reloj por uno igual chapado en oro. Al despertar: Caramba don Antonio, vaya reloj, y parece bueno, parece de oro....
Don Antonio responde: pues claro que es de oro.... y los amigos, haciendose los entendidos, le contestan que no, que parece, pero no es... que si, que no, que si, que no... hasta que van al relojero a que les saque de duda. El relojero comprueba la pieza y le dice: Lo siento Don Antonio, pero no es de oro.... menuda decepción....
Al dia siguiente, al volver a quedarse frito, le cambian el reloj y le devuelven el rolex auténtico. Al despertar, más de lo mismo: Caramba vaya reloj de oro, y Don Antonio responde: Pues creia que era de oro, pero resultó que no.... y el otro contesta que si... y el otro que no..... que si, que no, hasta que vuelven a terminar ante el relojero. Este comprueba la pieza y le asegura que si es de oro. Y Don Antonio que no daba credito...
Al tercer dia, al despertar, se le acerca otro parroquiano a preguntarle por el reloj. Caramba don Antonio, vaya reloj, ¿Es de oro?
Mira hijo, este reloj tiene dias.....
Cada dia despues de comer tenia por costumbre bajar al bar, a echar la partidita, e irremediablemente cada dia se quedaba dormido.
Un dia, sus amigos, que eran todos unos guasones, aprovechando que estaba en brazos de Morfeo, le cambian el reloj por uno igual chapado en oro. Al despertar: Caramba don Antonio, vaya reloj, y parece bueno, parece de oro....
Don Antonio responde: pues claro que es de oro.... y los amigos, haciendose los entendidos, le contestan que no, que parece, pero no es... que si, que no, que si, que no... hasta que van al relojero a que les saque de duda. El relojero comprueba la pieza y le dice: Lo siento Don Antonio, pero no es de oro.... menuda decepción....
Al dia siguiente, al volver a quedarse frito, le cambian el reloj y le devuelven el rolex auténtico. Al despertar, más de lo mismo: Caramba vaya reloj de oro, y Don Antonio responde: Pues creia que era de oro, pero resultó que no.... y el otro contesta que si... y el otro que no..... que si, que no, hasta que vuelven a terminar ante el relojero. Este comprueba la pieza y le asegura que si es de oro. Y Don Antonio que no daba credito...
Al tercer dia, al despertar, se le acerca otro parroquiano a preguntarle por el reloj. Caramba don Antonio, vaya reloj, ¿Es de oro?
Mira hijo, este reloj tiene dias.....