Reloj "Lunohod-10"

Salud, camaradas !

Acabo de recibir (comprado en eBay) un reloj conmemorativo del Lunahod-10, parece ser que de fabricación soviética (CCCP) pero desconozco la marca o cualquier otro dato (no ha ninguna indicación, a no ser los textos de la esfera, que indican el cohete que transporto al cochecito y el lugar donde alunizó: el mar de las lluvias, o algo así).

Alguien me puede decir alguna cosa sobre este reloj ?
(Intento adjuntar imagen pero no lo consigo. En todo caso se trata del reloj de mi avatar. Perdonad, pero soy tan novato en el foro como en la informática).

Saludos !

Perdón, habia cerrado el hilo sin querer ! A ver si alguien me puede responder...
Resulta que entre tanto se me ha caido el reloj al suelo
Sigue funcionando, però... al ponerlo en hora giran la agujas... i la esfera
Lo he llevado al relojero i se lo ha quedado. A ver si me costarà más que uno nuevo !

Bueno, subo la pregunta para ver si alguien sabe algo de este reloj !
Y aprovecho para comentar que las consecuéncias de su caida fueron nada más un pequeño desajuste de la esfera que el relojero arreglo en un plis-plas... menos mal.
Saludos !

Buenos dias compañero. Si lo que comentas es que el modelo se corresponde con tu avatar, creo que es un Raketa con calibre 2623 /2623H. Es un "bicho" duro y fiable. Si el problema se repite (espero que no), es tan fácil de solucionar como colocar las agujas en su sitio.

Ojo, para acceder a las "entrañas" de un Raketa, debes abrir la tapa trasera y soltar los tornillos que fijan el calibre a la caja... Pero el calibre se saca por delante. Así que creo que en tu caso, yo buscaría la junta entre la caja y el bisel , lo abriría con ayuda de una navaja, y con ayuda de unas pinzas finas, paciencia y pulso, colocaría las agujas en su sitio.

Los Raketas son duros. Eso sí, el agua y la humedad no son cosas que les gusten (salvo al escaso Raketa Diver)

Efectivamente, és el modelo del avatar, pero no pone por ningun sitio Raketa (ni PAKETA) ni ninguna marca.
Grácias por su información y consejos, Ignacio !