joler
De la casa
Sin verificar
Continuando con la reparación... el volante reposaba sobre la mesa de trabajo en actitud chulesca y desafiante...
A continuación, me dispuse a desmontar el áncora y su puente tarea para la que, normalmente, hay que desarmar el muelle real. Es decir, quitar la cuerda para evitar que el rodaje se mueva de forma violenta y las agujas giren de forma descontrolada.
Sin embargo, es este caso opté por no hacerlo por si eso me daba alguna pista sobre el origen del problema y así fue.
Aunque la foto no es muy buena, se puede obsevar perfectamente que el áncora esta embadurnada en aceite en exceso lo cual ilustra otra de las características de los amphibia: un aceitado generoso cuando salen de fábrica con el objeto de alargar los mantenimientos.
En este caso, yo creo que tanto aceite no beneficiaba la marcha del reloj y, aunque no era esa la causa de la avería, opté por limpiarlo.
Al quitar el áncora con la cuerda cargada el tren de rodaje empezó a moverse a trompicones frenándose simpre en la misma zona y, cuando la carga de cuerda era menor, llegando incluso a detenerse.
Aquí, el susodicho ya sin su puente.
La razón era que una de las ruedas estaba alabeada, posiblemente, como consecuencia de una manipulación incorrecta: es muy frecuente que cuando se quiere forzar la marcha de un reloj que no anda se intente provocar el movimiento del rodaje actuando con el destornillador sobre las ruedas del tren de rodaje. He de reconocer que yo también lo intenté nada más abrir el reloj whist:: ) así que, lo mismo causé o agravé el problema.
Es una pena que la calidad de la foto no permita apreciar el considerable alabeo de la rueda cuya reparación fue bastante sencilla.
El artilugio consiste en una caja de plástico con un orificio en el que se intruduce el eje de la rueda fijándolo por el interior con un trozo de masilla o similar. Después, con la parte plana de dos pinzas se presiona a la vez en la llanta de la rueda para ir reduciendo poco a poco el alabeo.
Seguro que intervino la suerte, pero al final funcionó.
En cuanto al calibre 2416B, no he encontrado diferencias reseñables respecto a un seiko o citizen de similar categoría. Creo que las opiniones habituales sobre la tosquedad de los relojes rusos tienen más que ver con determinados prejuicios que con la realidad.
Espero que os haya entretenido.
Un saludo
A continuación, me dispuse a desmontar el áncora y su puente tarea para la que, normalmente, hay que desarmar el muelle real. Es decir, quitar la cuerda para evitar que el rodaje se mueva de forma violenta y las agujas giren de forma descontrolada.
Sin embargo, es este caso opté por no hacerlo por si eso me daba alguna pista sobre el origen del problema y así fue.
Aunque la foto no es muy buena, se puede obsevar perfectamente que el áncora esta embadurnada en aceite en exceso lo cual ilustra otra de las características de los amphibia: un aceitado generoso cuando salen de fábrica con el objeto de alargar los mantenimientos.
En este caso, yo creo que tanto aceite no beneficiaba la marcha del reloj y, aunque no era esa la causa de la avería, opté por limpiarlo.
Al quitar el áncora con la cuerda cargada el tren de rodaje empezó a moverse a trompicones frenándose simpre en la misma zona y, cuando la carga de cuerda era menor, llegando incluso a detenerse.
Aquí, el susodicho ya sin su puente.
La razón era que una de las ruedas estaba alabeada, posiblemente, como consecuencia de una manipulación incorrecta: es muy frecuente que cuando se quiere forzar la marcha de un reloj que no anda se intente provocar el movimiento del rodaje actuando con el destornillador sobre las ruedas del tren de rodaje. He de reconocer que yo también lo intenté nada más abrir el reloj whist:: ) así que, lo mismo causé o agravé el problema.
Es una pena que la calidad de la foto no permita apreciar el considerable alabeo de la rueda cuya reparación fue bastante sencilla.
El artilugio consiste en una caja de plástico con un orificio en el que se intruduce el eje de la rueda fijándolo por el interior con un trozo de masilla o similar. Después, con la parte plana de dos pinzas se presiona a la vez en la llanta de la rueda para ir reduciendo poco a poco el alabeo.
Seguro que intervino la suerte, pero al final funcionó.
En cuanto al calibre 2416B, no he encontrado diferencias reseñables respecto a un seiko o citizen de similar categoría. Creo que las opiniones habituales sobre la tosquedad de los relojes rusos tienen más que ver con determinados prejuicios que con la realidad.
Espero que os haya entretenido.
Un saludo