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Habitual
Sin verificar
Pues como ayer vi uno, vamos a recordarlo un poquito.
Expuesto como prototipo en el Salón de Tokio de 1997, denominado como concept Z07. Forma parte como uno de los super-autos masss exclusivos de la empresa alemana BMW, y el único de los últimos tiempos fabricado artesanalmente.
El Z8 es la variante de producción del prototipo de automóvil BMW Z07, diseñado por Henrik Fisker en BMW Designworks en el sur de California. El Z07 causó sensación en el Salón del Automóvil de Tokio de 1997. La inmensa popularidad del prototipo llevó a BMW a tomar la decisión de producir un modelo de producción limitada. Se construyeron 5.703 unidades del Z8, aproximadamente la mitad de los cuales fueron exportados a los Estados Unidos.
Para fabricar el Z8, BMW produjo los distintos elementos en diferentes factorías, que finalmente se ensamblaron a mano en la fábrica de Munich. El motor, se ensamblaba en la sección de motores especiales de la misma fábrica de Munich, sometido a diferentes comprobaciones y pruebas de funcionamiento en banco, durante 20 minutos.
Su propulsor de gasolina es un 8 cilindros en V a 90°, con 4 válvulas por cilindro, 2 árboles de levas en cada culata con distribución variable, implementando el Sistema de inyección indirecta multipunto. Que consigue un par de 500 Nm a 3.800 rpm. El super-deportivo logra el 0 a 100 km/h en 4.7 segundos.
La rapidez y precisión de su cambio de 6 marchas con traccion trasera invita a sacar el máximo partido al motor, aunque la elasticidad de su V8 es tan abrumadora que podemos acelerar en sexta desde 1.000 rpm y sentir un placentero empuje que no termina hasta llegar al limitador de velocidad que facilita los 250 km/h.
El sistema de control de estabilidad y tracción (DSC III) transmite una seguridad extra, se puede acelerar a fondo y exprimir toda su potencia sin miedo a un sobreviraje. Desconectando dicho sistema, hay que templar con acierto el acelerador para que la zaga no se desmande, aunque la motricidad es tan buena que realmente hay que ir buscando las cosquillas al tren trasero para provocar un sobreviraje.
Presentando un frontal alargado, formas curvas y musculosas, neumáticos de gran tamaño, son algunos de los elementos que caracterizan el BMW Z8. El interior tiene un puesto de conducción funcional y elegantemente revestido con cuero de napa que armoniza lujosamente esa imagen “retro” que ha heredado expresamente del BMW 507 de 1956.
Desde cualquier ángulo impacta con su diseño. En sólo unos segundos, apretando un botón, la capota se abate tras los asientos y deja el interior al descubierto. Tambien cuenta con un techo rígido pero de instalación manual. Su arranque fue de los primeros en incorporar el giro de llave de contacto, y accionamiento de botón de arranque.
El cuadro de instrumentos, situado en el centro, resulta llamativo pero poco práctico. Cada vez que miramos alguno de los relojes hay que girar la cabeza y perdemos la vista de la carretera. Su volante de corte antiguo es muy agradable, la dirección es precisa y los frenos responden con enorme potencia, aunque se fatigan en una conducción muy exigente.
No faltan modernos elementos electrónicos. Entre ellos un control automático de velocidad de crucero, retrovisor interior antideslumbramiento, asientos con calefacción y reglaje eléctrico, navegador por satélite, teléfono integrado o un sistema de sonido con radio, amplificador, cargador de CD's y 10 altavoces.
Para el exterior también cuenta con novedosos elementos, como los faros de neón en sus intermitentes y luces traseras, o los neumáticos especiales que permiten circular durante 500 km aunque estén desinflados.
Por otra parte, el BMW Z8 pasará a la historia por haber sido el super-deportivo conducido por Pierce Brosman en el filme del agente secreto 007 “El mundo nunca es suficiente”. Mediante el acuerdo de colaboración con los Estudios Universal de Hollywood, materializado a través de tres películas del agente británico James Bond, la marca alemana consiguió potenciar su imagen de prestigio en el mercado americano.
El BMW Z8 fue producido por el fabricante de automóviles alemán, desde 2000 hasta 2003. Como super-deportivo convertible de dos plazas con motor delantero longitudinal y tracción trasera. El convertible que permite disfrutar de una conducción deportiva, aunque resulta difícil justificar un precio que duplico al del BMW Z3 M Roadster con 321 CV de potencia. No ofrece el doble de satisfacción y sí costo el doble.
Expuesto como prototipo en el Salón de Tokio de 1997, denominado como concept Z07. Forma parte como uno de los super-autos masss exclusivos de la empresa alemana BMW, y el único de los últimos tiempos fabricado artesanalmente.
El Z8 es la variante de producción del prototipo de automóvil BMW Z07, diseñado por Henrik Fisker en BMW Designworks en el sur de California. El Z07 causó sensación en el Salón del Automóvil de Tokio de 1997. La inmensa popularidad del prototipo llevó a BMW a tomar la decisión de producir un modelo de producción limitada. Se construyeron 5.703 unidades del Z8, aproximadamente la mitad de los cuales fueron exportados a los Estados Unidos.
Para fabricar el Z8, BMW produjo los distintos elementos en diferentes factorías, que finalmente se ensamblaron a mano en la fábrica de Munich. El motor, se ensamblaba en la sección de motores especiales de la misma fábrica de Munich, sometido a diferentes comprobaciones y pruebas de funcionamiento en banco, durante 20 minutos.
Su propulsor de gasolina es un 8 cilindros en V a 90°, con 4 válvulas por cilindro, 2 árboles de levas en cada culata con distribución variable, implementando el Sistema de inyección indirecta multipunto. Que consigue un par de 500 Nm a 3.800 rpm. El super-deportivo logra el 0 a 100 km/h en 4.7 segundos.
La rapidez y precisión de su cambio de 6 marchas con traccion trasera invita a sacar el máximo partido al motor, aunque la elasticidad de su V8 es tan abrumadora que podemos acelerar en sexta desde 1.000 rpm y sentir un placentero empuje que no termina hasta llegar al limitador de velocidad que facilita los 250 km/h.
El sistema de control de estabilidad y tracción (DSC III) transmite una seguridad extra, se puede acelerar a fondo y exprimir toda su potencia sin miedo a un sobreviraje. Desconectando dicho sistema, hay que templar con acierto el acelerador para que la zaga no se desmande, aunque la motricidad es tan buena que realmente hay que ir buscando las cosquillas al tren trasero para provocar un sobreviraje.
Presentando un frontal alargado, formas curvas y musculosas, neumáticos de gran tamaño, son algunos de los elementos que caracterizan el BMW Z8. El interior tiene un puesto de conducción funcional y elegantemente revestido con cuero de napa que armoniza lujosamente esa imagen “retro” que ha heredado expresamente del BMW 507 de 1956.
Desde cualquier ángulo impacta con su diseño. En sólo unos segundos, apretando un botón, la capota se abate tras los asientos y deja el interior al descubierto. Tambien cuenta con un techo rígido pero de instalación manual. Su arranque fue de los primeros en incorporar el giro de llave de contacto, y accionamiento de botón de arranque.
El cuadro de instrumentos, situado en el centro, resulta llamativo pero poco práctico. Cada vez que miramos alguno de los relojes hay que girar la cabeza y perdemos la vista de la carretera. Su volante de corte antiguo es muy agradable, la dirección es precisa y los frenos responden con enorme potencia, aunque se fatigan en una conducción muy exigente.
No faltan modernos elementos electrónicos. Entre ellos un control automático de velocidad de crucero, retrovisor interior antideslumbramiento, asientos con calefacción y reglaje eléctrico, navegador por satélite, teléfono integrado o un sistema de sonido con radio, amplificador, cargador de CD's y 10 altavoces.
Para el exterior también cuenta con novedosos elementos, como los faros de neón en sus intermitentes y luces traseras, o los neumáticos especiales que permiten circular durante 500 km aunque estén desinflados.
Por otra parte, el BMW Z8 pasará a la historia por haber sido el super-deportivo conducido por Pierce Brosman en el filme del agente secreto 007 “El mundo nunca es suficiente”. Mediante el acuerdo de colaboración con los Estudios Universal de Hollywood, materializado a través de tres películas del agente británico James Bond, la marca alemana consiguió potenciar su imagen de prestigio en el mercado americano.
El BMW Z8 fue producido por el fabricante de automóviles alemán, desde 2000 hasta 2003. Como super-deportivo convertible de dos plazas con motor delantero longitudinal y tracción trasera. El convertible que permite disfrutar de una conducción deportiva, aunque resulta difícil justificar un precio que duplico al del BMW Z3 M Roadster con 321 CV de potencia. No ofrece el doble de satisfacción y sí costo el doble.
