lcaspal2
Forer@ Senior
Sin verificar
Todo sabéis que una de mis aficiones es encuadernar, y dentro de ésto, sobre todo hago cuadernos. No contento con tener en casa "cienes y cienes" de ellos en todos los formatos imaginables y con decoraciones varias, cada vez que alguien tiene ocasión de regalarme algo, me caen cuadernos.
Esta vez mi señora ha estado en Canadá y como mi cumple andaba cerca me ha traído unas cositas que me gustaría compartir.
El primero es una monería, un cuadernillo italiano en tamaño A6 con un diseño muy particular. En realidad son dos, unidos a través de una cubierta muy historiada y llena de pliegues y sujetos con una goma.
Así no se aprecia el efecto pero en las dos que pongo a continuación, os podéis hacer más o menos una idea de lo que oculta. El diseño está muy logrado y tiene dos tipos distintos de papel del que aún no puedo opinar pero pensando en algo nuevo, se me ocurre hacerlo parecido y poniendo papel más grueso para dibujar en uno de ellos y papel para escribir en el otro.
Un cuadernillo muy cuidado y con una estética estupenda.
Como no podía faltar, un capricho también de Midori, un A6 preparado para poner tapas, aunque en esta ocasión venían como complemento. Os dejo fotos porque para estos sobran los comentarios. Me encanta la precisión con la que trabaja esta gente, son un modelo a seguir.
La tapa intercambiable es suave pero apergaminada y queda muy aparente una vez montado el conjunto. Por supuesto también podrían hacerse unas tapas normales ad hoc para el cuadernillo y de esa forma personalizarlo completamente sin perder la calidad del papel midori.
Y por último, un ejemplo de que menos es más. Unas cuantas hojas plegadas, una tapa de cartoncillo (nosotros lo llamamos estracilla), una costura al lomo con hilo de colorines y una sola palabra pegada a modo de decoración. A este pobre no le he hecho ni siquiera una foto propia, lo podéis ver en la de grupo a la deracha, en tamaño A5.
Y eso es todo, como decía el refrán: si no te gusta el caldo, tres tazas. Lo que ocurre es que a mi me encanta el caldo y no me canso se ver nuevos diseños y aplicaciones.
En realidad me falta una cosa. Si alguno se pasa por Montreal, ya tiene una tienda que visitar. Os atenderán unas señoritas muy amables y dispuestas a ayudar en todo.
Esta vez mi señora ha estado en Canadá y como mi cumple andaba cerca me ha traído unas cositas que me gustaría compartir.
El primero es una monería, un cuadernillo italiano en tamaño A6 con un diseño muy particular. En realidad son dos, unidos a través de una cubierta muy historiada y llena de pliegues y sujetos con una goma.
Así no se aprecia el efecto pero en las dos que pongo a continuación, os podéis hacer más o menos una idea de lo que oculta. El diseño está muy logrado y tiene dos tipos distintos de papel del que aún no puedo opinar pero pensando en algo nuevo, se me ocurre hacerlo parecido y poniendo papel más grueso para dibujar en uno de ellos y papel para escribir en el otro.
Un cuadernillo muy cuidado y con una estética estupenda.
Como no podía faltar, un capricho también de Midori, un A6 preparado para poner tapas, aunque en esta ocasión venían como complemento. Os dejo fotos porque para estos sobran los comentarios. Me encanta la precisión con la que trabaja esta gente, son un modelo a seguir.
La tapa intercambiable es suave pero apergaminada y queda muy aparente una vez montado el conjunto. Por supuesto también podrían hacerse unas tapas normales ad hoc para el cuadernillo y de esa forma personalizarlo completamente sin perder la calidad del papel midori.
Y por último, un ejemplo de que menos es más. Unas cuantas hojas plegadas, una tapa de cartoncillo (nosotros lo llamamos estracilla), una costura al lomo con hilo de colorines y una sola palabra pegada a modo de decoración. A este pobre no le he hecho ni siquiera una foto propia, lo podéis ver en la de grupo a la deracha, en tamaño A5.
Y eso es todo, como decía el refrán: si no te gusta el caldo, tres tazas. Lo que ocurre es que a mi me encanta el caldo y no me canso se ver nuevos diseños y aplicaciones.
En realidad me falta una cosa. Si alguno se pasa por Montreal, ya tiene una tienda que visitar. Os atenderán unas señoritas muy amables y dispuestas a ayudar en todo.