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Muere Alvaro Bultò

  • Iniciador del hilo Naranjito
  • Fecha de inicio
Estado
Hilo cerrado
Buf!! Se me han puesto los pelos de punta. Una verdadera lástima, era un tipo que disfrutaba la vida a tope. Descanse en paz.
 
Le gustaba el riesgo...pero èste, le ha cojido.
Era un tipo que me caìa bien.
 
Una verdadera pena, un persona que vivía y disfrutaba la vida al máximo.
D.E.P.
 
Lamento su muerte, no deseo la muerte a nadie, pero hay que recordar que cuándo vives la vida al límite tarde o temprano acaban pasando estas cosas.
 
D.E.P.

Ha muerto con las botas puestas.
 
Con todo el respeto del mundo....que le quiten lo bailao....
 
Probablemente haya sido feliz los 50 años de su vida. Otros viven 100 y son felices muchos menos de 50.

DEP
 
OLE.... UNA VIDA PLENA, llena de aventuras.

Seguro que ha vivido más que muchos con más años.

Esté donde esté BRINDO POR EL.





lostimage.jpg
 
  • #10
​Un desgraciado accidente , murió haciendo lo que más le gustaba . Muchas veces he seguido por televisión sus hazañas. Descanse en Paz.
 
  • #11
Me acuerdo cuando, de joven, vivia enfrente de casa y alguna vez habia visto entrar a la Infanta, ......y salir a horas intempestivas.
Ha sabido beberse la vida hasta la última gota.
DEP
 
  • #12
una persona que supo vivir sus sueños.
D.E.P.
 
  • #13
DEP vivio a tope.
 
  • #14
En Francia ya habían prohibido el wingsuit por su peligrosidad. Una cosa es morirse por una imprudencia, por un descuido o por un "no se le ocurre ni al que asó la manteca" y otra cosa es jugarse la vida a una ruleta rusa.
 
  • #15
Era una persona a la que envidiaba sanamente, siempre hizo lo que quiso y vivió la vida a tope.
D.E.P.
 
  • #16
D.E.P.

amaba el riesgo y al final se casó con el. Es de la clase de tipos que se jugaba el tipo por ver sus límites, sin duda ha disfrutado con lo que hacia.. me recuerda a Jay Moriarty...

https://www.youtube.com/watch?v=pKb72wcvF1w
 
  • #17
D.E.P.

amaba el riesgo y al final se casó con el. Es de la clase de tipos que se jugaba el tipo por ver sus límites, sin duda ha disfrutado con lo que hacia.. me recuerda a Jay Moriarty...

https://www.youtube.com/watch?v=pKb72wcvF1w


Justo esta semana vi la pelicula basada en la vida de Moriarty, "Chasing Mavericks", no conocia su historia ni la pelicula, que esta bastante bien....
 
  • #18
Lamento su muerte, no deseo la muerte a nadie, pero hay que recordar que cuándo vives la vida al límite tarde o temprano acaban pasando estas cosas.
Estoy seguro de que era consciente de ello.
 
  • #19
Que descanse en paz. Cuando estás en el filo de la navaja continuamente.... Es lo que tienen lo deportes de riesgo, que te juegas la vida. Parece ser que fue un fallo en la apertura del paracaídas.
 
  • #20
Lo del paracaídas no lo entiendo. Se suele llevar también uno de emergencia, te puede fallar el primero, pero el de emergencia es algo homologado que no está plegado por uno mismo, sino que viene doblado y precintado por un organismo oficial, es totalmente seguro, si no lo abres manualmente, salta a una determinada altura. Aunque también es posible que en este tipo de deporte, por conveniencia de llevar poco peso, no llevaran el de emergencia, quien sabe.
 
  • #21
Me da que pensar, ¿ Dos veces con problemas en el paracaídas?
Lo dejo en el aire sin mas.
 
  • #22
31 de agosto de 2003

[h=3]Arturo Pérez-Reverte: Giliaventureros[/h]
Me parece muy bien que un fulano, o fulana, practique deportes de riesgo: parapuenting, nautishoking, tontolculing y todo eso. Cada cual es cada cual, y hay quien no encuentra riesgo suficiente en conducir cada mañana camino del curro, con doscientos hijos de puta a ciento ochenta adelantándote por los carriles derecho e izquierdo. Sobre gustos, ya saben. Como he comentado alguna vez, veo de perlas que alguien ávido de vivir peligrosamente haga motocross por Afganistán, o se tire por las cataratas del alto Amazonas con una piedra de quinientos kilos atada al pescuezo. Me parece bien, ojo, siempre y cuando el osado deportista no vaya luego quejándose al ministerio de Exteriores cuando un pastor de cabras afgano y enamoradizo lo ponga mirando a Triana en las soledades del Paso Jyber, o las pirañas motilonas le roan un huevo. Como el propio complemento indica, son deportes de riesgo, y punto. Allá cada cual con lo que se juega. Lo que pasa es que incluso ahí hay clases. Categorías. No es lo mismo ser un aventurero de riesgo que un giliaventurero. Y no es giliaventurero el que quiere, sino el que puede.

Para que ustedes capten la diferencia, pongamos que un aventurero normal, español, de infantería, al que le gustan los deportes de riesgo, compra en Carrefour un barreño de plástico, se pone un casco de albañil de la obra y los manguitos de su hija Jessica, y se tira dentro del barreño por los rápidos de un río asturiano, por ejemplo, al día siguiente de que el ministro de Fomento haya afirmado rotundamente que los ríos asturianos son los menos contaminados, los más tranquilos y seguros de Europa. Eso es echarle adrenalina y cojones al deporte, y ahí no tengo nada que objetar. Al Filo de lo Imposible se hace con cosas menos arriesgadas. Además, lo del barreño está al alcance de cualquiera. Sale por cuatro duros. Basta ser un poquito imaginativo y una pizca gilipollas.

El otro, el aventurero de riesgo de elite, o sea, el giliaventurero a lo grande, es un ejemplar más exquisito. Tiene rasgos específicos propios, lejos del alcance de cualquier tiñalpa. El nivel Maribel de sus hazañas, por ejemplo, está muy por encima de la media del resto de los aventureros cutres. Un giliaventurero de pata negra nunca se despeina por menos de una travesía atlántica a bordo de un navío de línea de setenta y cuatro cañones construido por artesanos turroneros de Jijona con bejucos del Aljarafe, y tripulado por una dotación hermanada y multirracial –eso es lo más emotivo y lo más bonito– compuesta por un saharaui, un chino, un maorí y uno de Lepe. Y si nunca llega a atravesar nada porque una vez se le suelta el bejuco y otra se le amotina el chino, y tiene que salir doce o quince veces, pues mejor. Más fotos y más prensa. Además hay aventuras alternativas, como hacer slalom entre los icebergs de Groenlandia con moto acuática y sin otra escolta que una fragata de la Armada, o tirarse con parapente de kevlar ignífugo sobre Liberia –hermoso detalle solidario con esos pobres negros– para aterrizar en Puerto Portals, entre una nube de fotógrafos, casualmente el día de la regata patrocinada por la colonia Azur de Juanjo Puigcorbé número 5.

Pero la piedra de toque, la condición indispensable, el contraste de calidad por donde se muerde a este aventurero al primer vistazo, es ese aura, ese carisma mediático que deja, para toda la vida, tener o haber tenido algún parentesco, aunque sea lejano o accidental, con familias de la realeza europea: primo del heredero de Varsoniova, ex novio de la hija hippie del rey de Borduria, hermano del cuñado del rey de Ruritania. Detallitos, en fin, que permiten salir en la prensa rosa. Ayuda mucho ser de buena familia, con posibles, y que el patronímico –con los aventureros cutres se dice nombre a secas– sea, por ejemplo, Borja Francisco de los Santos; pero que desde niño la familia y los amigos te hayan llamado, y sigan haciéndolo aunque ya tengas cuarenta tacos, Cuquito, Cholo o Totín. Porque luego, cuando el Hola dedica cuatro páginas a tu última hazaña, para el titular queda estupendo eso de Totín Fernández del Ciruelo-Bordiú, estirpe de aventureros, declara: «Que Televisión Española, Iberia, Telefónica, el BBVA, La Caixa, Trasmediterránea, Repsol, la Once y la Doce me financien esta gesta no tiene nada que ver con que yo sea cuñado del rey Ottokar de Syldavia».
 
  • #23
Murió haciendo lo que realmente le gustaba. Pocos pueden decir lo mismo.


 
  • #24
Murió haciendo lo que realmente le gustaba. Pocos pueden decir lo mismo.


Efectivamente, morirse haciendo maquetas, o leyendo un libro, o en el cine, o paseando con tu perro, o disfrutando de tus hijos, o conversando con tus amigos tras unos vasos, o haciendo el amor, es algo más difícil, salvo que te caiga una teja o te de un infarto. Más fácil es palmar si te dedicas a practicar estos gilideportes -por una vez estoy de acuerdo con APR-
Para nada estoy de acuerdo con quienes decís que "se ha bebido la vida," o que " sí que ha sabido vivir" o "ha vivido más con cincuenta años que muchos con cien" .
Habrá vivido a tope, según muchos de vosotros, pero ahora mismo en plena juventud está en la nada más absoluta. Cómo mola, que le quiten lo bailao.
 
  • #25
Efectivamente, morirse haciendo maquetas, o leyendo un libro, o en el cine, o paseando con tu perro, o disfrutando de tus hijos, o conversando con tus amigos tras unos vasos, o haciendo el amor, es algo más difícil, salvo que te caiga una teja o te de un infarto. Más fácil es palmar si te dedicas a practicar estos gilideportes -por una vez estoy de acuerdo con APR-
Para nada estoy de acuerdo con quienes decís que "se ha bebido la vida," o que " sí que ha sabido vivir" o "ha vivido más con cincuenta años que muchos con cien" .
Habrá vivido a tope, según muchos de vosotros, pero ahora mismo en plena juventud está en la nada más absoluta. Cómo mola, que le quiten lo bailao.

Si yo me muero durmiendo, también podrá decirse eso de que murió haciendo lo que más le gustaba...
 
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