La gran estafa relojera

Amigos: Esta historia me la enviaron y no dudo que haya pasado o que pueda pasar.........
Se presenta un día viernes a última hora, en una importante joyería de Rosario ( Argentina ) un señor de unos 50 años, con una espectacular rubia de menos de 30. El señor desea hacerle un buen "regalo" para su querida compañera, entonces ella luego de algunas dudas, se decide por un hermoso Rolex combinado. El señor se aproxima a la caja y presenta su chequera, el gerente al ver esto le explica que con los cheques la empresa debe consultar los fondos con el Banco, y dado que son cerca de las 6 de la tarde, le explica que es imposible contactarse con el Banco. El "comprador" le dice: no hay ningún problema le dejo el cheque firmado, ustedes se comunican el lunes conmigo y ella recoje el reloj, ¡ de acuerdo ! exclamó el gerente, entusiasmado por la venta a última hora.
Pasa el fin de semana, y el lunes al mediodía, suena el teléfono atiende "el comprador" y el gerente de la joyería ofuscado le comenta: mire señor usted no tiene fondos suficientes para poder pagar el reloj, a lo que el comprador responde: ¡ y a mí que mi importa, con el fin de semana que pasé con la rubia, haga con el cheque lo que usted quiera !. El gerente corta, habla con su abogado y éste le comenta: mira, estafa no hubo ya que no se llevó nada, la única que podría hacer una denuncia por daño moral es la rubia, pero no creo que lo haga, ya que sería un papelón para ella, entonces mejor dejemos las cosas como si nada hubiera pasado.
Moraleja: Para conseguir rubias o morochas, no hay como una chequera sin fondos !!!! ::

Joer con el pavo, cómo se lo monta

una situación similar o calcada ocurrio con la casa porche en barcelona... ufff vaya vaya

Pues sinceramente lo siento por la rubia, pero a andar se aprende andando. Vaya tela el gachó.

la verdad que era listo el tipo jejejeje

eduardo48 dijo:

Amigos: Esta historia me la enviaron y no dudo que haya pasado o que pueda pasar.........
Se presenta un día viernes a última hora, en una importante joyería de Rosario ( Argentina ) un señor de unos 50 años, con una espectacular rubia de menos de 30. El señor desea hacerle un buen "regalo" para su querida compañera, entonces ella luego de algunas dudas, se decide por un hermoso Rolex combinado. El señor se aproxima a la caja y presenta su chequera, el gerente al ver esto le explica que con los cheques la empresa debe consultar los fondos con el Banco, y dado que son cerca de las 6 de la tarde, le explica que es imposible contactarse con el Banco. El "comprador" le dice: no hay ningún problema le dejo el cheque firmado, ustedes se comunican el lunes conmigo y ella recoje el reloj, ¡ de acuerdo ! exclamó el gerente, entusiasmado por la venta a última hora.
Pasa el fin de semana, y el lunes al mediodía, suena el teléfono atiende "el comprador" y el gerente de la joyería ofuscado le comenta: mire señor usted no tiene fondos suficientes para poder pagar el reloj, a lo que el comprador responde: ¡ y a mí que mi importa, con el fin de semana que pasé con la rubia, haga con el cheque lo que usted quiera !. El gerente corta, habla con su abogado y éste le comenta: mira, estafa no hubo ya que no se llevó nada, la única que podría hacer una denuncia por daño moral es la rubia, pero no creo que lo haga, ya que sería un papelón para ella, entonces mejor dejemos las cosas como si nada hubiera pasado.
Moraleja: Para conseguir rubias o morochas, no hay como una chequera sin fondos !!!! ::

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No discuto que sea verdad o no, pero ESE ES UN CHISTE MUY VIEJO POR MI TIERRA HOMBRE.....

Jajaja...Muy bueno!!!

Muy listo el cinquentón. No dudo que pueda haber ocurrido semejante viveza. Pero hoy en dia los cheques se conforman las 24 horas del dia los 365 dias del año, además el dueño de la tienda pudo haber demandado por haber recibido un cheque sin fondo.
Saludos

Y si no al mediamarkt a comprarle un macbook air y un ipad, te lo llevas y lo devuelves el lunes.....

Todavía hay alguien que paga con cheques?

En todo caso, si no han cambiado las leyes entregar un talón sin fondos era delito, creo.

Regalaria mi mejor reloj por ver la cara de la rubia ,jeje

Lo he movido a OffTopic porque eso no es más que una historia inventada, en la que puedes meter relojes, joyas o cualquier cosa que supuestamente pueda encandilar a la supuesta rubia. (En una versión me contaron que la rubia no era tal...)

En fin

me la apunto ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ hay que ver, el mundo de los relojes cada dia me gusta mas, eso si es una buena complicacion, el reloj que te liga rubias

esa historia ya es vieja, creo recordar que la leí hace algún tiempo en este mismo foro con los mismos protagonistas léase, rubia señor mayor, rolex y cheque y procedente del mismo país en la anterior ocasión me abstuve de pronunciarme y en esta digo que la historia podría se un cuento chino o argentino en este caso, sin acritud eeeehhhh

La rubia era la muerta de la curva.

Pero qué escépticos sois !

Si se dice en internet, es que es cierto !!

esta historia la he leido hasta de la pluma de Perez Reverte, en uno de sus arrebatos de reportero dicharachero, especialidad Anecdotario de los Bajos Fondos...

Creo que es una leyenda urbana, que hace ya mucho que corre por el sector. Y supuestamente a pasado en distintas joyerías.

Goldoff dijo:

Lo he movido a OffTopic (En una versión me contaron que la rubia no era tal...)

En fin

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No fastidies que era de bote

no veas con el hombre

Mr. Jones dijo:

esta historia la he leido hasta de la pluma de Perez Reverte, en uno de sus arrebatos de reportero dicharachero, especialidad Anecdotario de los Bajos Fondos...

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Me autocito y pego el texto de Perez Reverte con la misma anecdota, en otro gran ejemplo de periodismo de investigacion al que nos tiene acostumbrados




EL ABRIGO DE VISON

Alguna vez he escrito de mis compadres los viejos chorvos, artistas capaces de quitarle herraduras a un caballo al galope, maestros de lo suyo, espléndidos buscavidas de aquella España cutre que ya sólo es posible revisitar en las viejas películas de Pepe Isbert, Manolo Morán y Tony Leblanc. Esas películas divertidas, geniales, que ninguna televisión de este puñetero país emite nunca, porque a los imbéciles de sus programadores les resulta más fácil inundarnos de telemierda norteamericana.

Esta mañana me llamó por teléfono uno de esos amigos: Antonio Carnera, hoy ancianete y jubilado, que en otro tiempo perteneció a esa ilustre cofradía de trileros, piqueros y timadores que hasta hace treinta o cuarenta años fue aristocracia barriobajera en puertos y estaciones de ferrocarril. Antonio y el arriba firmante hemos estado charlando un rato de viejos tiempos, de la pensión de jubilado que nunca tuvo, de amigos y conocidos comunes como Amalia la Verderona, maestra de piqueros y tomadores del dos, de Ángel, mi famoso chorvo de La ley de la calle, o del legendario Muelas, creador del timo del telémetro y autor inmortal de la venta a un pringao del tranvía 1001, que es el más extraordinario hito de la historia del timo en España.

Al final hemos quedado en vernos y tomar unas cañas. Y aunque hace ya un par de horas que colgué el teléfono, todavía sonrío al recordar el acento madrileño y chuleta de Antonio, su viejo orgullo profesional cuando le tiro de la húmeda y le hago que largue, y recuerde. Dentro de unos días, cuando nos tomemos unas cañas en cualquier mostrador de zinc o mármol, le haré contarme despacio y por enésima vez su mayor logro profesional, su obra maestra: el timo del abrigo de visón. Antonio, que de joven tenía una planta estupenda, con clase, recurría a ese registro cuando quería correrse por el morro una juerga. La última vez fue en el año 59, en Madrid, después de haber tocado con éxito el mismo palo en provincias. Primero alquiló una suite en el Palace, donde se dio una buena zampa; y luego, bien maqueado y engominado, se fue a Pasapoga en busca de la torda más espectacular que hubiera a tiro. A los tres boleros, un bayon y dos mambos empezó a enseñar billetes y a decir eso de qué hace una mujer como tú en un sitio como éste, bombón, a ti te tenía yo como a una reina. Y para demostrarlo, te voy a regalar mañana un abrigo de visón. Que no, que sí, que tú me tomas el pelo, chato, que yo hablo en serio, mi vida, que ésa es la fetén y a mí me salen las lechugas por las orejas, y ese cuerpazo, amén de otras cosas, está pidiendo un visón pero ya mismo. Total: al día siguiente, cita con la gachí, aún algo incrédula, en la mejor peletería. Pruébate éste. Y éste. Nos llevamos ése, el más caro. La jai, por supuesto, alucinando en colores. Y a la hora de pagar, Manolo desenfunda arte y labia: vaya, qué contrariedad, se me han terminado los cheques, es igual, llévemelo a las seis de la tarde al Palace, habitación tal. Y se va con la torda.

Luego, fase crucial: oye, prenda, son las dos, vamos al hotel si te parece, comemos caviar y champán y esperamos el abrigo. Chachi. Y claro, a la suite. Y allí, esperando el visón, piscolabis de lujo y polvazo inmenso y gratis -«de esos que uno se cae de la cama, colega»-- con la mejor hembra de Pasapoga. Y a las cinco y media en punto, Antonio se levanta. Oye, perdona, mi vida, bajo un minuto a la caja del hotel a sacar metálico, que traerán el visón de un momento a otro. El resto se lo imaginan ustedes: ese Antonio que se viste. Ese Antonio que baja y cruza el vestíbulo. Ese Antonio que sale a la calle como si fuera a por tabaco. Ese Antonio que no vuelve. Y a las seis, puntual como un clavo, llega el peletero con el visón, y sube al cuarto; y le abre la jaca, que ya se va mosqueando, y se monta el pifostio. Y en esas aparece el cajero del Palace sin nadie que le pague una cuenta que te cagas, incluida la suite, y el caviar, y el champán, y las flores que Antonio -que es un romántico- le regaló a la gachí.

Eso, se pongan como se pongan los mojigatos y las feministas galopantes, es arte, se mire por donde se mire. Arte de verdad, de la vieja escuela; filigrana imposible sin mucho morro, aplomo y talento. Y oírselo contar al artista, imaginen. Por eso ya disfruto de antemano el momento en que Antonio Carnera, con la cuarta cerveza a la mitad, encienda un Ducados, me mire con su temple de viejo jugador de mus, y cuente por enésima vez aquello de: «Y en mitad del mambo, la apalanco así y digo: una mujer con ese cuerpo merece que la tengan como a una reina»

eduardo48 dijo:

Amigos: Esta historia me la enviaron y no dudo que haya pasado o que pueda pasar.........
Se presenta un día viernes a última hora, en una importante joyería de Rosario ( Argentina ) un señor de unos 50 años, con una espectacular rubia de menos de 30. El señor desea hacerle un buen "regalo" para su querida compañera, entonces ella luego de algunas dudas, se decide por un hermoso Rolex combinado. El señor se aproxima a la caja y presenta su chequera, el gerente al ver esto le explica que con los cheques la empresa debe consultar los fondos con el Banco, y dado que son cerca de las 6 de la tarde, le explica que es imposible contactarse con el Banco. El "comprador" le dice: no hay ningún problema le dejo el cheque firmado, ustedes se comunican el lunes conmigo y ella recoje el reloj, ¡ de acuerdo ! exclamó el gerente, entusiasmado por la venta a última hora.
Pasa el fin de semana, y el lunes al mediodía, suena el teléfono atiende "el comprador" y el gerente de la joyería ofuscado le comenta: mire señor usted no tiene fondos suficientes para poder pagar el reloj, a lo que el comprador responde: ¡ y a mí que mi importa, con el fin de semana que pasé con la rubia, haga con el cheque lo que usted quiera !. El gerente corta, habla con su abogado y éste le comenta: mira, estafa no hubo ya que no se llevó nada, la única que podría hacer una denuncia por daño moral es la rubia, pero no creo que lo haga, ya que sería un papelón para ella, entonces mejor dejemos las cosas como si nada hubiera pasado.
Moraleja: Para conseguir rubias o morochas, no hay como una chequera sin fondos !!!! ::

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No, no ha pasado nunca, la he oido identica con un anillo de diamantes en los Campos Eliseos, en Tiffany New York, etc. etc. Eso si, ingeniosa lo es una "jartá"

da igual el que compre o no compre lo suyo es como se lo paso el viejo.....

No sabía que era una leyenda urbana, lo subí como un servicio a los amigos de la comunidad. Pero debo decir que a veces la realidad supera mil veces la ficción. ¡ Quién hubiera dicho que el futuro presidente de Francia (según las encuestas ) iba a a terminar su carrera en un cuarto del Sofitel !.

Un abrazo y gracias a todos por los comentarios.

Muy buena historia,y la moreleja lo mejor jajaja.