Para el regocijo de manuleon: Una montblanc ha fallado y una inoxcrom no... :-)

Bueno amigos, aquí estoy para que no se ponga en duda mi hombría y mi virilidad. Sí, porque el compañero manuleon me ha retado esta mañana a ver si tenía lo que hay que tener para reconocer que una montblanc 146 ha fallado unos trazos y en cambio, una inoxcrom, modelo caravel (creo), ha seguido escribiendo sobre el mismo papel como si tal cosa. Y aquí estamos para cumplir como un valiente y reconocerlo .


En efecto, esta mañana he conocido al bueno de manu y nada menos que me ha obsequiado con una bonita estilográfica reform 1745 (de la que había oído tanto hablar, pero que no había probado nunca) y un cd de música clásica.




Pues bien, cuando Manu se ha puesto a escribir la dedicatoria sobre la contraportada del librillo del cd con mi montblanc 146 (que juro ante notario, ante los santos apóstoles Pedro y Pablo y ante quien haga falta que jamás, hasta ahora, había fallado ni un milimilímetro de un trazo) en un terreno inhóspito y desfavorable como este papel impreso y satinado en un momento dado ha dejado de escribir, sí, como lo leéis ha dejado de escribir … y no sólo eso, sino que, para mi desgracia, el bueno de manu ni corto ni perezoso ha cogido su inoxcrom y con toda calma y tranquilidad ha seguido escribiendo como si tal cosa … ¡Ay! ha asestado con ello un duro golpe a mi ego montblanista .


Aquí la prueba gráfica del desastre (equiparable al de Trafalgar ):




Y ahora unas pequeñas justificaciones en descargo de la montblanc:


- - La tinta con la que estaban cargadas ambas plumas era distinta. La montblanc con una vulgar y simple pelikan 4001 azul-negro y la inoxcrom con la lujosa tinta pelikan edelstein sapphire … y claro, eso se tiene que notar, no cubren igual .


- - No sabemos si manuleon ya traía ensayado esto de casa … ejem, en contra del refrán, pensaré bien y con buena fe, y diré que no estaba ensayado y probado con antelación .


- - La pluma inoxcrom tenía un plumín M y la montblanc F … y eso también se tiene que notar


No sigo, pero seguro que hay más justificaciones y excusas para lo que ha acontecido, todas ellas lícitas y justas, por supuesto



En fín, manuel que muchas gracias por tu amabilidad y generosidad y que aquí me tienes para lo que necesites.



Por cierto, la reform escribe suave y va muy bien desde el principio.



Un cordial saludo

Pues yo voy a ponerme de parte de la Inoxcrom. Hoy mismo he escrito como mi Sailor Sapporo punto M (recordar, M japo) sobre ¡¡¡un trozo de plástico brillante!!! y le he dejado un escrito en Sailor Ultramarine igual de facil que en un papel. Esa MB ha fallado "estrepitosamente"

vaya par os habeis juntao...

ya me hubiera gustado estar aunque solo fuese para miera y callar ( y los que me conocen en vivo saben que eso es lo ultimo que psoy capaz de hacer)

envidia!!

Un abrazo

lo de las plumas...ja,aj,aj,a,j,ja,ja,ja,ja España1-Alemania 0...

Revenarius dijo:

Pues yo voy a ponerme de parte de la Inoxcrom. Hoy mismo he escrito como mi Sailor Sapporo punto M (recordar, M japo) sobre ¡¡¡un trozo de plástico brillante!!! y le he dejado un escrito en Sailor Ultramarine igual de facil que en un papel. Esa MB ha fallado "estrepitosamente"

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ahi, su poquito de leña...

ja,ja,jajaj

Sí, yo hoy he podido probar varias inoxcrom de gama alta y todas ellas escriben fenomenalmente (caravel, sirocco y corinthian).

Saludos

Y eso que Manu últimamente se está pasando al lado oscuro

Pues Yo te digo que mi París Sunset es capaz de hacer lo mismo con una tinta decente sin ser gama alta... Escribe con una su

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Tranquilo, Zimmermann, no eres el único que ha tenido que "morder el polvo" por la 146. La semana pasada, en dos ocasiones a falta de una, mi 146 se ha parado en seco. La he vaciado, la he lavado y la he vuelto a cargar y ha empezado a escribir como siempre de bien pero en la primera ocasión se volvió a "gripar" a los dos días. De largo es la pluma que más utilizo y hasta ahora jamás había fallado un trazo en muchos cientos de páginas escritas. Cosas que pasan.

Saludos.

Mendaz y melindroso hasta el final...
Zimmermann, ese oscuro personaje que intentó acabar con mi prestigio y terminó como los enemigos de mi superhéroe favorito: D´Atargnan.
Fue vencido en noble justa caballeresca, conminado a contar su derrota para enaltecer a la más honesta y virginal de cuantas damas pueblan las Españas, mi señora Inoxcrom Sirocco Nobile... y se limita a un conciso y breve relato en la sección off topic, sesgado, con falsedades, y sin reconocer que mi dama es la más honesta y fiel.
Pero yo, caballero aguerrido y paladín de la "nobilis causa", voy a despejar las tinieblas y a desenmarañar el ovillo enredado por el villano...
Chantaje. Ésa es la palabra. Así comenzó todo.
Zimmermann; como buen seguidor del caballero oscuro, plegado a las exigencias a que obliga el Señor de las Tinieblas a cuantos quieren gozar del lujo y la cercanía de las sirenas de hermosa fachada y facilidad de acceso carnal mas vacías de alma, disfrutó de las piezas de su contrato, de sus Mont Blanc, el tiempo establecido en tal contrato. Mas éste, como siempre, expiró. Y tuvo que elegir una víctima entre las personas dignas que, en su momento, hubiesen rechazado vender su alma al Señor Tenebroso. Como su perfidia era especialmente insidiosa, Zimmermann decidió escoger a la víctima más significada. Al paradigma de la integridad. Un caballero de la Sagrada Orden de Inoxcrom, conocida por su lucha incesante contra la corrupción del poder y la ostentación. Y le tocó al más bizarro de entre los miembros de la Sagrada Orden: Manuleon.
Éste, inesperadamente, recibió el chantaje en forma de tentadora oferta musical. Mas como su integridad es incólume, aceptó la oferta con la única intención de atraer al pérfido personaje al lado celeste. Y como muestra de la bondad del recto proceder, le hizo entrega, él primero, de dos obsequios limpios de cualquier mácula que les contaminase de ostentación, intención espuria, reto o cualquiera otra manifestación de hostilidad. Lo importante era rescatar el alma perdida del malvado...
Pero no había salvación para Zimmermann. Sus ojos codiciosos lo decían todo. Se abrieron desorbitados al ver que se le hacía entrega de algo de forma desinteresada, de manera que lo que hasta ese momento eran objetos puros, se transformaron en cosas infernales, como sucede con todo cuanto se somete a la codicia. Zimmermann tuvo la oportunidad de salir del lado oscuro, y perdió. Mi desolación era total...
Después de coger con ansia los objetos, me hizo entrega de varias tentaciones envenenadas que cogí con indolencia para no causar escándalo en el lugar, y los metí en mi bolsa recubierta de plomo, para tirarlos cuando terminase el encuentro. La cita había fracasado en el terreno espiritual. Pero quedaba el gran duelo: Mont Blanc ad versus Inoxcrom. Ostentación contra Honradez. Y no iba a ser un duelo fácil, por las continuas marrullerías del primero...
Los prolegómenos fueron de tanteo: charla, muestra de las piezas de uno y otro (belleza simple y funcional por un lado, barroquismo vacío por el otro...) comentarios triviales, algún golpe bajo y unas cuantas mentiras por parte de Zimmermann, encajados con elegancia y sinceras palabras por manuleon...
Y fue cuando el Zimmermann terrenal pasó a la acción con toda su artillería. Pero no por más brutalidad la eficacia aumenta. En un momento dado, extrae de su maletín uno de los obsequios que le había entregado en mi cruzada espiritual, ya transformado en objeto terrestre, y asiendo con saña su Mont Blanc 146, altanero y pretencioso, cargada con tinta ruda y envenenada, la tinta más fuerte de su arsenal, me dice con furia: -¡Escribe, cobarde!- Sin perder en ningún momento los nervios, y sabiendo de la superficialidad de la gente del lado oscuro, me pongo a la tarea lo mejor que supe. Zimmermann sabía que no haría trampa. Escribí o, mejor dicho, intenté escribir. Pero como todas las Mont Blanc, una vez pasado su periodo de garantía, después de las primeras letras, el trazo se hizo vacilante, la tinta se difuminaba... y la escritura cesó... El propietario de tan ostentoso como inútil artefacto, a la vista de todos los presentes y en medio de grande escándalo, empezó a proferir grandes voces e insultos hacia mi inocente persona, alegando de forma pueril que la culpa era del papel. La camarera que intentaba servir otros cafés (que, por cierto, tuve que pagar ante la ausencia de Zimmermann en los momentos de hacerse cargo de tales menesteres) tiró los mismos asustada por las formas y los aspavientos del sujeto hacia la muchacha, que nada tenía que ver en el asunto. Mas yo, sin perder la calma, tapando voces con argumentos, manifesté que una Inoxcrom, en su sencillez, con honradez, seria capaz de terminar el trazo fallido. Súbitamente cesaron la voces. Zimmermann, en su soberbia, elevó la barbilla, abrió la boca en un gesto de altanera ironía, y exclamó: -¿Ah, sí? Muestralo... Sin inmutarme, con lentitud, con la calma de quien confía ciegamente en la sencilla honradez de su estilográfica, saqué del bolsillo de mi chaqué una Inoxcrom Sirocco Nobile, que no Caravel (una mentira más del pérfido) y tras advertirle de que estaba cargada con tinta Pelikan Edelstein Sapihre, una tinta para la paz, no para guerrear, a lo cual respondió (Otra falsedad del pernicioso personaje) que ninguna tinta escribiría sobre esa superficie, me puse a la labor. Lo que vino a continuación es de suponer que el lector inteligente lo imaginará...
El plumín de oro empezó a deslizarse suave y parsimoniosamente por la satinada superficie y, donde antes había vacilación y falta de trazo, ahora aparecía tras el estilógrafo una línea limpia, cristalina y pura, de un azul zafiro, que iluminaba el entorno de forma maravillosa. Los ojos de Zimmermann se iban llenando de ira, y cuando finalicé la labor, tuve que coger rápidamente el libreto para evitar que él lo hiciese primero y lo destruyese. Mas de nuevo volvió lo sobrenatural, pues una voz sonó, y exclamó: Basta, esclavo, has sido derrotado, la mácula está en tu alma, no en ese papel, nada lograrás con destruirlo...
Lo siguiente me es imposible de relatar con detalle... Súbitamente, Zimmermann elevó la vista, exclamó "Sí, mi señor", y envuelto en una tenebrosa niebla, desapareció entre sonoras carcajadas...
Nada he vuelto a saber de él hasta que abrió este hilo...
Tristemente, ni conseguí atraerle al lado celeste, ni ha logrado limpiar un poco su alma con golpes de sinceridad... Y es que Mont Blanc, una vez más, ha perdido un alma blanca...

¡Ay, que me da algo!

¡Uff, qué sarta de embustes e infundios se vierten de manera gratuita e infundada en el mensaje #9 de este hilo! (ya no me atrevo ni a citar a su autor ) . En fín, este hombre ha alumbrado una historia en su imaginación calenturienta de escritor que no obedece a la realidad en modo alguno. Juzguen ustedes mismos, sobran comentarios. Mi buena fe es patente y palpable, yo reconocí el hecho PUNTUAL (dudo que vuelva a darse en un escenario objetivo) y puse la prueba gráfica del mismo.

Solo diré que yo iba ayer a este encuentro con mi alma estilográfica limpia y pura y cuando salí de allí me vi obligado toda la tarde a restregarla y darle una buena friega con ariel líquido para volver a dejarla inmaculada. Mi trabajo me ha costado.

Al próximo envite estilográfico con este señor acudiré provisto de armadura y cualquier instrumento de defensa que considere oportuno llevar, visto lo visto. Ya me lo decía mi abuela: "Hijo no te fies nunca de un escritor":

Nunca te fíes de un escritor,
es tanto su afán por disfrazar la verdad
que se torna un mentiroso
al ocultar su sentimiento con palabras hermosas

... Y será por supuesto usando un papel neutro y objetivo, no el utilizado en esta ocasión que estoy seguro estaba tratado y emponzoñado con toda suerte de productos químicos para que mi incauta e inocente montblanc fracasara en su prueba plumeril.

Hasta la próxima.

Qué bueno, todavía me estoy riendo...

Qué gustito da leer cosas de gente que todavía sabe escribir, expresarse con exactitud, y saber poner las comas y los puntos donde deben ir.

¡Cracks!

Añadir a lo escrito, que fueron dos horas que no podré pagar con nada. Sin hablar de fútbol, cosa que dice mucho del pobre Zimmermann. Sin espacio a los silencios incómodos que delatan que una conversación es forzada.
Me encontré por vez primera con un compañero de este foro. Y todo porque se ofreció a hacerme un favor, consiguiéndome algo que de otro modo no podría llegar a mis manos, sin que yo pidiese nada. Eso es lo que hace especial al sótano, e imagino que los pisos de arriba sean igual de especiales.
En fin, ahora ya en serio, reconozco que hacía muchos años ya que no tenía la oportunidad de probar una MB 146, y escribe estupendamente. Entra en la rueda de coleccionables. Cuánto se aprende cuando uno se arrima a buenos árboles...
Gracias, amigo. Habrá más encuentros. Y no vengas con armadura, que el próximo papel será, como mínimo, de estraza...

¡Desde luego sois únicos! Deberíamos hacer una reconstrucción de los hechos y grabaros en vídeo.
Un saludo,
Rafael

Bueno, pues iré sin armadura, ni siquiera cota de malla. Ya estaba indagando esta tarde que castillo podría asaltar para procurarme una ... que además iba a estar difícil que fuera de mi talla

Yo, por supuesto, también pasé un estupendo rato en tu compañía charlando de nuestras comunes aficiones. Es un placer oir a un mago de la palabra ... aunque has de revisar tus gustos operísticos: No se puede excluir a Mozart y Haendel así como así (Es broma).

Un abrazo manuel

¡Ah! ¡Pardiez! ¿¿Excluído a Mozart de los gustos operísticos?? ¡¡SACRILEGIOOOOOOOOOOOOOOOOOO!! ¡Voy a llevar yo mi cota de malla y mi espada de Damocles!

Zimmermann dijo:

Bueno, pues iré sin armadura, ni siquiera cota de malla. Ya estaba indagando esta tarde que castillo podría asaltar para procurarme una ... que además iba a estar difícil que fuera de mi talla

Yo, por supuesto, también pasé un estupendo rato en tu compañía charlando de nuestras comunes aficiones. Es un placer oir a un mago de la palabra ... aunque has de revisar tus gustos operísticos: No se puede excluir a Mozart y Haendel así como así (Es broma).

Un abrazo manuel

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Vayañ un golpe bajo contra manuleon para ponernos de tu parte. Muy hábil.:

rafapa dijo:

Vayañ un golpe bajo contra manuleon para ponernos de tu parte. Muy hábil.:

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¡Eh! que no pretendo dar ningún golpe bajo, a ver si vamos a despertar a la fiera que manuleon lleva dentro . Si lo dices por los gustos operísticos, pues cada uno tiene los suyos, muy respetables, ... pero es que mozart es mozart... .
Yo confieso que, por ejemplo, Puccini (salvo, Tosca y quizá la Bohème) y el verismo, en general, no me atraen nada . Tampoco he podido nunca con Wagner por más que lo he intentado (salvo el Holandés Errante y poco más).

Un saludo

Bueno, tanto como excluido... Don Giovanni, SI la versión es decente, puede llegar a seducirme. Y en su momento la Flauta mágica fue una puerta de entrada a la ópera...
¿Puedo ser absuelto? Prometo retomar a Mozart poco a poco

Ya ves que la perfidia del personaje no era exagerada. Mi relato es testimonio fiel... "y su testimonio era verdadero". Soy el cordero inmolado

Zimmermann dijo:

¡Eh! que no pretendo dar ningún golpe bajo, a ver si vamos a despertar a la fiera que manuleon lleva dentro . Si lo dices por los gustos operísticos, pues cada uno tiene los suyos, muy respetables, ... pero es que mozart es mozart... .
Yo confieso que, por ejemplo, Puccini (salvo, Tosca y quizá la Bohème) y el verismo, en general, no me atraen nada . Tampoco he podido nunca con Wagner por más que lo he intentado (salvo el Holandés Errante y poco más).

Un saludo

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Amigo, Butterfly es la más bella historia sobre un miserable cabrón destrozando la vida de una niña que nace a la vida adulta a través de semejante sinvergüenza...
Respecto a Wagner, es la más divertida forma de aburrirse soberanamente durante horas y horas con la melodía infinita... y forja personalidades como la mía: asociales e insoportables ¿No lo viste?

A mí Madame Butterfly me encantó... No he podido verla en escenario pero Tosca sí y me gustó mucho.
También fui a ver en su momento Elektra y Salomé, de Strauss y ¡¡¡uffff!!! Los pelos como escarpias se me pusieron... Esa manera de expresar la locura, la pasión desgarradora que te destruye, la venganza más abyecta... Son piezas difíciles, creo, de que gusten a la mayoría, pero para mí son increíbles...

Sin embargo, de Wagner... No sé, me aburre, sinceramente... No he sido capaz de terminar de escuchar NADA. Ni las Walkirias ni nada... El Holandés errante no lo conozco, escucharé a ver...

Mozart va mucho más conmigo, me divierte, me alegra, me hace reír y al mismo tiempo con otras cosas me sobrecoge. Creo que todos tenemos nuestros gustos, pero no sé... Yo me rindo a sus pies. Ví en su momento también Don Giovanni y, jolín, es que es un crack

Y a todo esto, escuchando ahora mismo estoy A perfect Circle y Sonata Arctica Gustos eclécticos los míos

Dejando "La flauta mágica" aparte, no me convencen mucho las óperas mozartianas. Claro que, como siempre en la ópera, están de por medio los intérpretes. Una ópera que no te guste mucho con una soprano en estado de gracia puede gustarte más que una ópera favorita con un elenco de menor nivel. Al menos eso me ha pasado a mí en ocasiones.

Wagner me parece fantástico. A finales de julio raro es que me pierda alguna transmisión radiofónica del festival de Bayreuth, vamos del olimpo wagneriano. Escuchar la tetralogía es estupendo de verdad. Verlo en la famosa colina sería (supongo)una de las cosas más sublimes de esta vida. En cambio, apenas tengo óperas en disco. Eso de escuchar siempre las mismas inflexiones de la voz se me hacen un tanto aburrido. Por eso mi preferencia son las transmisiones por radio. Claro que, de vez en cuando, echo mano del socorrido disco para escuchar a Elisabeth Schwarzkopf como mariscala en "El caballero de la rosa" de Richard Strauss. Siempre me ha conmovido.

Saludos.

manuleon dijo:

¿Puedo ser absuelto? Prometo retomar a Mozart poco a poco

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Para la absolución tienes que escuchar tres veces completa las Bodas en la versión que quieras (la de Giulini está muy bien) ... y por supuesto 5 Ave Marías