cuhrioso
Forer@ Senior
Sin verificar
Bueno, por si puede resultar de interés para alguien, ahí van mi pequeña aportación al tema.
Vivimos en una sociedad industrializada. Cada vez serán más frecuentes los problemas de reacciones alérgicas como respuesta de nuestro sistema inmunológico a presencias externas.
A los efectos que ahora nos ocupan, como aficionados a los relojes que somos, creo que somos unos cuantos, a juzgar por hilos que de vez en cuando van apareciendo por aquí, que sufrimos de este problema por el contacto de la piel de nuestra muñeca con alguno de los elementos del reloj, ya sea el dorso de la caja, el armis o la piel de la correa.
En primer lugar, aunque parezca una obviedad, mal podremos encontrar una solución si no conocemos a qué elemento somos alérgicos.
En mi caso concreto, tras la correspondientes pruebas, descubrí que lo era al cromo. Los síntomas los sufría casi siempre en verano, con el sudor de la piel que me provoca una fuerte irritación que sólo remitía con tratamiento farmacológico tópico. El problema lo tenía tanto con los armys de acero inoxidable como con las correas de piel.
En el caso del acero, todas las aleaciones -da igual si es la de Rolex, Omega o cualquier otra de similar calidad tipo 316L- incluyen el cromo en mayor o menor proporción.
Respecto a la explicación de porqué el problema aparece o se agrava con el sudor, me remito a una explicación técnica que en su día dió el forero Almarpa, relativa a la inestabilización del elemento en cuestión por efecto de la ionización causada por el sudor. Dicha explicación me pareció revestida de solvencia y no fue rebatida por nadie. Debo decir al respecto que ninguno de los dermatólogos que me han tratado acertaron a encontrar explicación alguna, limitándose a recomendar que evitara el contacto con el cromo.
La única solución que he encontrado, basándome en mi experiencia, es evitar en verano el armys de acero. Intenté en repetidas ocasiones recubrir el interior de los armys con esmalte de calidad, tal y como veréis que a menudo se recomienda, pero no es una solución ni fina ni efectiva en la práctica, puesto que por el juego de los eslabones, el recubrimiento nunca es total y además se deteriora con cierta rapidez.
Alternativas: el titanio tiene altísimas cualidades en biocompatibilidad. Mi IWC con armys de titanio es una solución definitiva, pero que quizá no satisfaga a todo el mundo.
Tengo entendido que ciertos metales nobles (o sus aleaciones) como el oro o el platino no contienen cromo. Mi economía no me ha permitido comprobarlo.
Otra solución en un reloj con armys de resina tipo Casio F-91W. Os puedo asegurar es un gran reloj y el problema lo resuelve en el acto, pero no siempre vamos a llevarlo y a renunciar a nuestros otros relojes, digo yo.
Por lo que a la piel se refiere, debemos ser conscientes -yo lo he descubierto a base de informarme por diversas fuentes- que la mayoría de las pieles estan curtidas con sales de cromo. Este metal pesado, sumamente contaminante, ofrecer considerables ventajas industriales para el tratamiento de la piel, pero tiene su contrapartida en la afectación del medio ambiente y en daños colaterales como los que sufrimos las personas alérgicas.
Hay otro método de curtido de la piel: el tradicional con curtientes vegetales. Este es más costoso y prolongado en el tiempo y, por tanto, menos conveniente para los intereses empresariales cortoplacistas.
Tras probar de todo, he dado con algunas soluciones que, si me lo permitís, voy a exponeros, aunque sea costa de dar nombres de fabricantes.
Atendida la calidad que nuestros relojes merecen sólo he encontrado una piel que esta garantizado 100% que es de curtición vegetal. Se trata de la shell cordovan, fabricada por un productor de Chicago denominado Horwen. Una marca concreta que comercializa estas correas para sus relojes es Nomos. He optado por adquirir las correas de esta casa como accesorio. Creo que también algún otro fabricante de correas dice utilizar esta piel. Por internet es fácil localizarlos.
A nivel de gran productor de correas que presume de tener en cuenta los problemas de alergia sólo he encontrado a Hirsch. Entre su gama de modelos hay una línea denominada no allergy que no garantiza el curtido natural vegetal pero sí en cambio, un forro interior seguro. Mi experiencia con esta marca no ha sido hasta ahora del todo satisfactoria puesto que en su anterior línea no allergy sólo recubría la mayor parte del forro interior pero no los extremos próximos al pasador que une la corra con las asas del reloj. Una chapuza imperdonable. Hoy, aunque todavía no he tenido ocasión de probarlo, parecen haber corregido el error, a juzgar con las fotos que aparecen en su página web. Cuando lo pruebe os cuento.
En esta misma marca acabo de descubrir -estará por probar- que hay un nuevo modelo de piel de avestruz que afirman haber sido curtida vegetalmente. Ojalá sea cierto.
Alternativas a la piel: las correas de caucho o, algo mejor, una corra de piel de calidad, recubierta interiormente de caucho. Buscando recientemente por internet he tenido la agradable sorpresa de comprobar como un fabricante francés (Camille Fournet) comercializa algún modelo de piel de avestruz muy bonito con este sistema (atención a los poseedores de Jaeger le Coultre).
Naturalmente, quien resulte ser alérgico a otros componentes puede tomar con reservas esta información basada, insisto, en mi experiencia personal, pero que quería compartir con el foro por si os resulta de alguna utilidad.
Perdonad el tocho y hasta otra.
Saludos
Vivimos en una sociedad industrializada. Cada vez serán más frecuentes los problemas de reacciones alérgicas como respuesta de nuestro sistema inmunológico a presencias externas.
A los efectos que ahora nos ocupan, como aficionados a los relojes que somos, creo que somos unos cuantos, a juzgar por hilos que de vez en cuando van apareciendo por aquí, que sufrimos de este problema por el contacto de la piel de nuestra muñeca con alguno de los elementos del reloj, ya sea el dorso de la caja, el armis o la piel de la correa.
En primer lugar, aunque parezca una obviedad, mal podremos encontrar una solución si no conocemos a qué elemento somos alérgicos.
En mi caso concreto, tras la correspondientes pruebas, descubrí que lo era al cromo. Los síntomas los sufría casi siempre en verano, con el sudor de la piel que me provoca una fuerte irritación que sólo remitía con tratamiento farmacológico tópico. El problema lo tenía tanto con los armys de acero inoxidable como con las correas de piel.
En el caso del acero, todas las aleaciones -da igual si es la de Rolex, Omega o cualquier otra de similar calidad tipo 316L- incluyen el cromo en mayor o menor proporción.
Respecto a la explicación de porqué el problema aparece o se agrava con el sudor, me remito a una explicación técnica que en su día dió el forero Almarpa, relativa a la inestabilización del elemento en cuestión por efecto de la ionización causada por el sudor. Dicha explicación me pareció revestida de solvencia y no fue rebatida por nadie. Debo decir al respecto que ninguno de los dermatólogos que me han tratado acertaron a encontrar explicación alguna, limitándose a recomendar que evitara el contacto con el cromo.
La única solución que he encontrado, basándome en mi experiencia, es evitar en verano el armys de acero. Intenté en repetidas ocasiones recubrir el interior de los armys con esmalte de calidad, tal y como veréis que a menudo se recomienda, pero no es una solución ni fina ni efectiva en la práctica, puesto que por el juego de los eslabones, el recubrimiento nunca es total y además se deteriora con cierta rapidez.
Alternativas: el titanio tiene altísimas cualidades en biocompatibilidad. Mi IWC con armys de titanio es una solución definitiva, pero que quizá no satisfaga a todo el mundo.
Tengo entendido que ciertos metales nobles (o sus aleaciones) como el oro o el platino no contienen cromo. Mi economía no me ha permitido comprobarlo.
Otra solución en un reloj con armys de resina tipo Casio F-91W. Os puedo asegurar es un gran reloj y el problema lo resuelve en el acto, pero no siempre vamos a llevarlo y a renunciar a nuestros otros relojes, digo yo.
Por lo que a la piel se refiere, debemos ser conscientes -yo lo he descubierto a base de informarme por diversas fuentes- que la mayoría de las pieles estan curtidas con sales de cromo. Este metal pesado, sumamente contaminante, ofrecer considerables ventajas industriales para el tratamiento de la piel, pero tiene su contrapartida en la afectación del medio ambiente y en daños colaterales como los que sufrimos las personas alérgicas.
Hay otro método de curtido de la piel: el tradicional con curtientes vegetales. Este es más costoso y prolongado en el tiempo y, por tanto, menos conveniente para los intereses empresariales cortoplacistas.
Tras probar de todo, he dado con algunas soluciones que, si me lo permitís, voy a exponeros, aunque sea costa de dar nombres de fabricantes.
Atendida la calidad que nuestros relojes merecen sólo he encontrado una piel que esta garantizado 100% que es de curtición vegetal. Se trata de la shell cordovan, fabricada por un productor de Chicago denominado Horwen. Una marca concreta que comercializa estas correas para sus relojes es Nomos. He optado por adquirir las correas de esta casa como accesorio. Creo que también algún otro fabricante de correas dice utilizar esta piel. Por internet es fácil localizarlos.
A nivel de gran productor de correas que presume de tener en cuenta los problemas de alergia sólo he encontrado a Hirsch. Entre su gama de modelos hay una línea denominada no allergy que no garantiza el curtido natural vegetal pero sí en cambio, un forro interior seguro. Mi experiencia con esta marca no ha sido hasta ahora del todo satisfactoria puesto que en su anterior línea no allergy sólo recubría la mayor parte del forro interior pero no los extremos próximos al pasador que une la corra con las asas del reloj. Una chapuza imperdonable. Hoy, aunque todavía no he tenido ocasión de probarlo, parecen haber corregido el error, a juzgar con las fotos que aparecen en su página web. Cuando lo pruebe os cuento.
En esta misma marca acabo de descubrir -estará por probar- que hay un nuevo modelo de piel de avestruz que afirman haber sido curtida vegetalmente. Ojalá sea cierto.
Alternativas a la piel: las correas de caucho o, algo mejor, una corra de piel de calidad, recubierta interiormente de caucho. Buscando recientemente por internet he tenido la agradable sorpresa de comprobar como un fabricante francés (Camille Fournet) comercializa algún modelo de piel de avestruz muy bonito con este sistema (atención a los poseedores de Jaeger le Coultre).
Naturalmente, quien resulte ser alérgico a otros componentes puede tomar con reservas esta información basada, insisto, en mi experiencia personal, pero que quería compartir con el foro por si os resulta de alguna utilidad.
Perdonad el tocho y hasta otra.
Saludos
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