txarlines
Habitual
Sin verificar
Hola compañeros.
El jueves día 21 del pasado mes de febrero, Rober (Asier en el foro) me llamó diciéndome “Txarli, mañana me voy a dar una vuelta por Galán y Presmanes en Santander. Si tienes libre… ¿te gustaría acompañarme?”.
Y claro, como conoce mi afición a los relojes y, casualmente ese día no trabajaba, no le fue muy difícil convencerme. .
De camino paramos en el pueblo de Hoznayo, en Cantabria, que para los que no lo conozcáis os diré que tiene fama por tener unas de las mejores quesadas recién hechas de esa provincia, (espero que no me salgan los puristas con que…”pues las de…son mejores”), así como los sobaos, que tampoco se quedan atrás (lo siento, no hay fotos… Usen el buscador. ).
Llegamos sobre las 12.00h de la mañana y ya en la relojería nos recibió un empleado que, como un buen profesional, reconoció enseguida a Rober por alguna visita y compra anteriores y, mientras avisaba a Jesús, uno de los responsables del local, nos invitó a ojear los expositores interiores. Os diré que, lo que para Rober era cotidiano, para mí fue estar en la gloria. Preciosos todos.
Enseguida se acercó Jesús. Como la intención era ver varios relojes con el fin de buscar sensaciones con ellos en la muñeca, nos trasladamos a una sala apartada, en la cual pudimos ver, toquetear, probarnos y comentar lo que sentíamos en vivo con cada uno de ellos. Yo, calladito y escuchando, mientras Jesús y Rober hablaban de calibres, tamaños, manufacturas, etc., interviniendo solo para opinar sobre sensaciones y estéticas.
Nos probamos Rolex y Tudor. Cuantos más me probaba más dudas me entraban. Y ahora tengo la cabeza hecha un lío. Vas con una idea y…lo de siempre…sales con dolor de cabeza.
La conversación se va “profesionalizando” y, a cuenta de un Tudor, Jesús empieza a sacar relojes antiguos, contándonos historias de alguno de ellos mientras escuchábamos atentamente.
Pedimos disculpas por los posibles errores que podamos haber cometido respecto a materiales, calibres, estilos, años, etc. de los relojes mostrados. Ya os comento que todo fue inesperado y las referencias son de oídas, mientras charlábamos, y puede (o es casi seguro) que hayamos cometido errores. Por favor, no se me enfaden los compañeros del foro de Vintages y del de Rolex sobre todo. . Aceptamos todo tipo de correcciones que para eso estamos...para aprender.
Bueno, vamos a ello…
Éste es el primero que abre la caja de Pandora, de la cual comienzan a salir los truenos.
Un Tudor Sub con el antiguo anagrama de la rosa, que comparte el fondo, la caja y la corona de Rolex.
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Y cómo no, Rolex, pero de los de antes. Obsérvese el detalle de los cuatro palos en “las cuatro” y las asas en forma de lágrimas, que parecen soldadas a mano recientemente y luego pulidas a lima. ¿O lo habrán hecho así y por eso le llaman “manufactura”? .
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Éste otro tiene algunos añitos… ¿eeeeh? Como se puede apreciar, las agujas han dado unas cuantas vueltas.
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Un Air King con un brazalete extensible (lamentablemente no anduvimos listos para sacarle una foto como Dios manda, con el brazalete extendido. Pero era muy curioso)
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Una foto de “la trasera”…
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Un Datejust con correa de piel y ventana de lupa…
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Otro Date que, lamentablemente no se puede apreciar pero, el cristal (¿o era plexi?)…sobresalía exageradamente en vertical. Curioso.
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Con su correspondiente trasera y una “jubilé” muy trotada… que creo recordar nos dijo que era del año 47. No está mal…eeeh?.....¡¡¡Ese dedoooo!!!
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Uno de 5512 ó 5513 que, aunque no lleve su brazalete coetáneo, se ve en el dial (o por lo menos eso nos gustaría, que se hubiera visto. Malditos fotógrafos…) que está escrito primero en metros y luego submariner… Una rareza.
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Dos autenticas reliquias. Un Longines y un Paul Ditisheim Solvil, del cual he tenido que tirar de foro y Wikipedia porque no tenía ni idea.
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Foto de familia. Menudos socios del Imserso.
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Aquí podéis ver que Movado no ha empezado a hacer relojes ayer. Lleva tiempo usando complicaciones…
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Y con un Breitling de los de antes. Menudo trío.
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Este Angelus tiene una bonita historia. Tardó seis años en reconstruirse de cómo quedó tras un accidente, pero la paciencia es una virtud y…este es el resultado. Me sorprendió el detalle de las ventanas del día de la semana y el mes cortadas en curva por los laterales y a la vez a chaflán. Es curioso…
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Y por último un trío de cuando Omega y Longines hacían relojes de parecido nivel…
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Me gustaría comentar que estos relojes cronógrafos, los Omega, Angelus, Longines, Movado,…Tenían unas medidas que para la época debían de resultar paelleras, pues a mí ya me parecieron grandecitos. No se alejarían mucho de los 41 cm. Con lo que resultaban aún más espectaculares.
Y, con todo el dolor de mi corazón, llegó la hora de cierre de la relojería y ni nos enteramos. Se nos pasó el tiempo en un parpadeo y, lamentablemente, no llevé la cámara para fotografiar como Dios manda lo que tuve en mis manos, aunque espero que con estas malas fotos de los móviles, hallamos podido disfrutar de rarezas, alguna de ellas con cerca de un siglo a sus espaldas y otras con curiosas historias.
La anécdota sucedió cuando Jesús comenzó a recoger los relojes momentos antes de marcharnos. De repente… ¿eeeeeh?...me faltaba mi reloj. Se lo dije y, después de comprobar que no se encontraba en la mesa donde los habíamos estado “trasteando”, se dirigió al lugar donde los estaba guardando y, sin darse cuenta lo había colocado ocupando el lugar de otro. Una pena porque me hubiera quedado con el titular sin dudarlo. Cualquiera que fuese.
Comentar que, por supuesto, las fotos las realizamos con el correspondiente permiso de Jesús, el cual amablemente, nos dio todo tipo de facilidades.
Me gustaría pedirle disculpas tanto a él como al empleado que nos recibió, ya que aguantaron estoicamente hasta que nos marchamos, y fue un buen rato después de pasada la hora del cierre de la relojería.
Y bueno…llegó la hora de comer. Rober me llevó a un local que le había recomendado Oscar (uno de los “alicates” del Clan Piruleta) y que, lamentablemente, prefirió marcharse a trabajar que comer con dos sujetos un tanto sospechosos. .
Rte Días Desur (así como está escrito) allí en las cercanías. Buena recomendación. Menú del día muy variado y muy bien presentado, además de bueno. Y regado con un vino de Toro…
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…que, particularmente, a mí me gustó, aunque Rober comento…”está bien” sin mucho entusiasmo. (Éste fuera de menú).
Ya por la tarde nos acercamos hasta Presmanes, pues Oscar se había puesto en contacto con Santiago para avisarle de nuestra llegada y, como no podía ser de otra manera, fuimos atendidos también magníficamente.
Preciosa relojería con un interior decorado en madera. Una relojería “vintage”.
Pudimos observar el “maletón” de Breitling donde tienen expuestas todas las piezas para la construcción del Chronomat con caja y calibre B01, así como el cristal de zafiro desde su corte en un tocho de zafiro hasta su acabado final. Lo mismo sucedía con la caja del reloj. Partiendo de un trozo de acero comienza su construcción hasta que te lo llevas a la muñeca. Ya sabéis, si alguno se anima a montarlo. .
Luego nos sentamos y…el no va más. Pruébate unos Breitlings, unos Panerais, saca AP, Breguet, relojes, relojes y más relojes. No sabíamos donde colocar los nuestros. El mostrador estaba lleno y seguía sacando. En fin. Una maravilla. Cuando nos levantamos para regresar me di cuenta de que el local estaba lleno de gente preguntando o comprando. No nos habíamos enterado. Estábamos absortos con los relojes.
Una pena que fuésemos atendidos en el centro del local, porque, siendo así, no nos pareció adecuado pedir permiso para comenzar a hacer fotos de los relojes con gente alrededor, aunque no nos hubiéramos enterado. Je…je.
Solo puedo aportar como imagen final, la cara que se le queda a un novato delante de un santuario de relojería.
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En fin. Esto es todo. Agradecer a Rober por el agradable día que me hizo pasar. A D. Jesús Galán de Relojería GALÁN y a D. Santiago de relojería PRESMANES por su amabilidad y paciencia a la hora de atendernos y a Oscar (oscarpirulo) por las gestiones realizadas para que todo saldría perfecto. .
Lamento lo de las fotos pero todo fue inesperado. Espero que os haya gustado y…como decía aquél…”estoestó…estoestó…estodoamigosss”. ...
PD: Antes de que se me olvide. Tres días más tarde, el lunes 25, como al final no pudimos ver el reloj que quería haberme probado en Santander porque no lo tenían, un Breitling Seawolf Avenger con diales en vez de números, nos acercamos hasta GENEVE en Bilbao, confiando en que, al tener una gran variedad de ellos, pudiera encontrarse allí y así poder probarlo. ¡Dios mío! El mismo trato. Desde luego, lo que es querer no vender. Además de que no lo tenían, le pedimos que nos enseñaran otros dos modelos, uno con armis cepillado a espejo y otro no. Pues eso…dos y nada más. Ya puedes quitarte de la muñeca y poner encima de la mesa un Omega y un Rolex que ni les suben las pulsaciones. Parecía que les estábamos molestando. Y eso que hablo de un lunes a las 10,30h aproximadamente. Con todo el fin de semana para haber descansado. No les pedí ni el descuento de lo claro que nos lo dejaron. Crisis? What Crisis? Que se den una vuelta por esa relojería. Van “sobraos”.
Peor para ellos porque creo que seguiré viendo el escaparate y…a otra relojería.
Lo siento pero tenía que decirlo. .
Ahora sí. Un saludo a todos y hasta la próxima. Agur.
El jueves día 21 del pasado mes de febrero, Rober (Asier en el foro) me llamó diciéndome “Txarli, mañana me voy a dar una vuelta por Galán y Presmanes en Santander. Si tienes libre… ¿te gustaría acompañarme?”.
Y claro, como conoce mi afición a los relojes y, casualmente ese día no trabajaba, no le fue muy difícil convencerme. .
De camino paramos en el pueblo de Hoznayo, en Cantabria, que para los que no lo conozcáis os diré que tiene fama por tener unas de las mejores quesadas recién hechas de esa provincia, (espero que no me salgan los puristas con que…”pues las de…son mejores”), así como los sobaos, que tampoco se quedan atrás (lo siento, no hay fotos… Usen el buscador. ).
Llegamos sobre las 12.00h de la mañana y ya en la relojería nos recibió un empleado que, como un buen profesional, reconoció enseguida a Rober por alguna visita y compra anteriores y, mientras avisaba a Jesús, uno de los responsables del local, nos invitó a ojear los expositores interiores. Os diré que, lo que para Rober era cotidiano, para mí fue estar en la gloria. Preciosos todos.
Enseguida se acercó Jesús. Como la intención era ver varios relojes con el fin de buscar sensaciones con ellos en la muñeca, nos trasladamos a una sala apartada, en la cual pudimos ver, toquetear, probarnos y comentar lo que sentíamos en vivo con cada uno de ellos. Yo, calladito y escuchando, mientras Jesús y Rober hablaban de calibres, tamaños, manufacturas, etc., interviniendo solo para opinar sobre sensaciones y estéticas.
Nos probamos Rolex y Tudor. Cuantos más me probaba más dudas me entraban. Y ahora tengo la cabeza hecha un lío. Vas con una idea y…lo de siempre…sales con dolor de cabeza.
La conversación se va “profesionalizando” y, a cuenta de un Tudor, Jesús empieza a sacar relojes antiguos, contándonos historias de alguno de ellos mientras escuchábamos atentamente.
Pedimos disculpas por los posibles errores que podamos haber cometido respecto a materiales, calibres, estilos, años, etc. de los relojes mostrados. Ya os comento que todo fue inesperado y las referencias son de oídas, mientras charlábamos, y puede (o es casi seguro) que hayamos cometido errores. Por favor, no se me enfaden los compañeros del foro de Vintages y del de Rolex sobre todo. . Aceptamos todo tipo de correcciones que para eso estamos...para aprender.
Bueno, vamos a ello…
Éste es el primero que abre la caja de Pandora, de la cual comienzan a salir los truenos.
Un Tudor Sub con el antiguo anagrama de la rosa, que comparte el fondo, la caja y la corona de Rolex.
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Y cómo no, Rolex, pero de los de antes. Obsérvese el detalle de los cuatro palos en “las cuatro” y las asas en forma de lágrimas, que parecen soldadas a mano recientemente y luego pulidas a lima. ¿O lo habrán hecho así y por eso le llaman “manufactura”? .
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Éste otro tiene algunos añitos… ¿eeeeh? Como se puede apreciar, las agujas han dado unas cuantas vueltas.
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Un Air King con un brazalete extensible (lamentablemente no anduvimos listos para sacarle una foto como Dios manda, con el brazalete extendido. Pero era muy curioso)
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Una foto de “la trasera”…
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Un Datejust con correa de piel y ventana de lupa…
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Otro Date que, lamentablemente no se puede apreciar pero, el cristal (¿o era plexi?)…sobresalía exageradamente en vertical. Curioso.
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Con su correspondiente trasera y una “jubilé” muy trotada… que creo recordar nos dijo que era del año 47. No está mal…eeeh?.....¡¡¡Ese dedoooo!!!
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Uno de 5512 ó 5513 que, aunque no lleve su brazalete coetáneo, se ve en el dial (o por lo menos eso nos gustaría, que se hubiera visto. Malditos fotógrafos…) que está escrito primero en metros y luego submariner… Una rareza.
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Dos autenticas reliquias. Un Longines y un Paul Ditisheim Solvil, del cual he tenido que tirar de foro y Wikipedia porque no tenía ni idea.
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Foto de familia. Menudos socios del Imserso.
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Aquí podéis ver que Movado no ha empezado a hacer relojes ayer. Lleva tiempo usando complicaciones…
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Y con un Breitling de los de antes. Menudo trío.
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Este Angelus tiene una bonita historia. Tardó seis años en reconstruirse de cómo quedó tras un accidente, pero la paciencia es una virtud y…este es el resultado. Me sorprendió el detalle de las ventanas del día de la semana y el mes cortadas en curva por los laterales y a la vez a chaflán. Es curioso…
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Y por último un trío de cuando Omega y Longines hacían relojes de parecido nivel…
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Me gustaría comentar que estos relojes cronógrafos, los Omega, Angelus, Longines, Movado,…Tenían unas medidas que para la época debían de resultar paelleras, pues a mí ya me parecieron grandecitos. No se alejarían mucho de los 41 cm. Con lo que resultaban aún más espectaculares.
Y, con todo el dolor de mi corazón, llegó la hora de cierre de la relojería y ni nos enteramos. Se nos pasó el tiempo en un parpadeo y, lamentablemente, no llevé la cámara para fotografiar como Dios manda lo que tuve en mis manos, aunque espero que con estas malas fotos de los móviles, hallamos podido disfrutar de rarezas, alguna de ellas con cerca de un siglo a sus espaldas y otras con curiosas historias.
La anécdota sucedió cuando Jesús comenzó a recoger los relojes momentos antes de marcharnos. De repente… ¿eeeeeh?...me faltaba mi reloj. Se lo dije y, después de comprobar que no se encontraba en la mesa donde los habíamos estado “trasteando”, se dirigió al lugar donde los estaba guardando y, sin darse cuenta lo había colocado ocupando el lugar de otro. Una pena porque me hubiera quedado con el titular sin dudarlo. Cualquiera que fuese.
Comentar que, por supuesto, las fotos las realizamos con el correspondiente permiso de Jesús, el cual amablemente, nos dio todo tipo de facilidades.
Me gustaría pedirle disculpas tanto a él como al empleado que nos recibió, ya que aguantaron estoicamente hasta que nos marchamos, y fue un buen rato después de pasada la hora del cierre de la relojería.
Y bueno…llegó la hora de comer. Rober me llevó a un local que le había recomendado Oscar (uno de los “alicates” del Clan Piruleta) y que, lamentablemente, prefirió marcharse a trabajar que comer con dos sujetos un tanto sospechosos. .
Rte Días Desur (así como está escrito) allí en las cercanías. Buena recomendación. Menú del día muy variado y muy bien presentado, además de bueno. Y regado con un vino de Toro…
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…que, particularmente, a mí me gustó, aunque Rober comento…”está bien” sin mucho entusiasmo. (Éste fuera de menú).
Ya por la tarde nos acercamos hasta Presmanes, pues Oscar se había puesto en contacto con Santiago para avisarle de nuestra llegada y, como no podía ser de otra manera, fuimos atendidos también magníficamente.
Preciosa relojería con un interior decorado en madera. Una relojería “vintage”.
Pudimos observar el “maletón” de Breitling donde tienen expuestas todas las piezas para la construcción del Chronomat con caja y calibre B01, así como el cristal de zafiro desde su corte en un tocho de zafiro hasta su acabado final. Lo mismo sucedía con la caja del reloj. Partiendo de un trozo de acero comienza su construcción hasta que te lo llevas a la muñeca. Ya sabéis, si alguno se anima a montarlo. .
Luego nos sentamos y…el no va más. Pruébate unos Breitlings, unos Panerais, saca AP, Breguet, relojes, relojes y más relojes. No sabíamos donde colocar los nuestros. El mostrador estaba lleno y seguía sacando. En fin. Una maravilla. Cuando nos levantamos para regresar me di cuenta de que el local estaba lleno de gente preguntando o comprando. No nos habíamos enterado. Estábamos absortos con los relojes.
Una pena que fuésemos atendidos en el centro del local, porque, siendo así, no nos pareció adecuado pedir permiso para comenzar a hacer fotos de los relojes con gente alrededor, aunque no nos hubiéramos enterado. Je…je.
Solo puedo aportar como imagen final, la cara que se le queda a un novato delante de un santuario de relojería.
Uploaded with ImageShack.us
En fin. Esto es todo. Agradecer a Rober por el agradable día que me hizo pasar. A D. Jesús Galán de Relojería GALÁN y a D. Santiago de relojería PRESMANES por su amabilidad y paciencia a la hora de atendernos y a Oscar (oscarpirulo) por las gestiones realizadas para que todo saldría perfecto. .
Lamento lo de las fotos pero todo fue inesperado. Espero que os haya gustado y…como decía aquél…”estoestó…estoestó…estodoamigosss”. ...
PD: Antes de que se me olvide. Tres días más tarde, el lunes 25, como al final no pudimos ver el reloj que quería haberme probado en Santander porque no lo tenían, un Breitling Seawolf Avenger con diales en vez de números, nos acercamos hasta GENEVE en Bilbao, confiando en que, al tener una gran variedad de ellos, pudiera encontrarse allí y así poder probarlo. ¡Dios mío! El mismo trato. Desde luego, lo que es querer no vender. Además de que no lo tenían, le pedimos que nos enseñaran otros dos modelos, uno con armis cepillado a espejo y otro no. Pues eso…dos y nada más. Ya puedes quitarte de la muñeca y poner encima de la mesa un Omega y un Rolex que ni les suben las pulsaciones. Parecía que les estábamos molestando. Y eso que hablo de un lunes a las 10,30h aproximadamente. Con todo el fin de semana para haber descansado. No les pedí ni el descuento de lo claro que nos lo dejaron. Crisis? What Crisis? Que se den una vuelta por esa relojería. Van “sobraos”.
Peor para ellos porque creo que seguiré viendo el escaparate y…a otra relojería.
Lo siento pero tenía que decirlo. .
Ahora sí. Un saludo a todos y hasta la próxima. Agur.