Yo utilizo Cape Cod para las rayas superficiales, pero las profundas no hay más remedio que utilizar algo más contundente.
Personalmente, utilizo la Dremel, primero con un disco de lija al agua muy muy fina, y cuando digo muy fina me refiero a la más fina del mercado, una que es de color verde y al tacto no parece ni lija, y si la utilizais mojada mejor, más progresivo será el debastado.
Una vez desaparecida la raya, utilizo un disco de fieltro con pasta pulidora para metales (una de color marron que se licua con el calor producido por la fricción) hasta que la zona vuelve a adquirir brillo.
Después limpio bien la caja de restos de la cera, ya que se ennegrece por las partículas de acero que debasta, y entonces utilizo el Cape Cod para conseguir el brillo a espejo final (hay que frotar un buen rato).
Para arreglar arañazos profundos en zonas cepilladas, hay que seguir los pasos anteriores sin aplicar el Cape Cod final. En vez de eso, una vez desaparecida la imperfección, se devuelve el cepillado frotando la zona con estropajo (el verde), con cuidado de mantener siempre la misma dirección.
Con este método he dejado nuevos relojes que parecían deshauciados, eso si, la primera vez probé con uno viejo y que no me importaba estropear, y aconsejo que así lo hagais quienes os atrevais a hacerlo. También es cierto que me salió bien desde el principio, si utilizais la lija que he dicho, la de color verde, no es fácil pasarse porque es muy controlable. Hay otra lija para Dremel de color negro que también es muy fina pero, aunque lo parezca, no es lo suficientemente fina para este tipo de trabajos. Esta se puede utilizar antes de la verde cuando se trate de un golpe con deformación o un arañazo muy profundo, y hay que usarla con mucho cuidado.
Un consejo, antes de ponernos manos a la obra, cubrir las zonas intactas con cinta americana y desmontar el bisel si se va a trabajar cerca de este.
Espero haber sido de ayuda.
Un saludo.
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