Ya. A pesar de las fotos pedestres (no sé cómo lográis las viguerías gráficas que se ven en este Foro), hay quien acertó. Y quien no, simplemente ha sido víctima de mi pecado visual.
Es, en efecto, la Sailor Pro Gear. Exhibicionista y creo que con detalles en plata, o eso parece. Plumín Naginata codificado como JPY 25000, marcado con 21 k y el número 875 (que ignoro lo que representa). Tamaño H-MF, que significa versión dura (no otra, que es flexible) en talla médium fine; o sea, el mayor de los pequeños, el gordo de los flacos.
O cartucho (por cierto, solamente los sailoreros) o convertidor, que es suavecito suavecito. Capuchón rematado en el ápice plano por un ancla negroide bonita, y bordado en el anillón con Sailor Japan Founded 1911. Cuerpo de resinas que según dicen atesoran méritos minerales muy cuantiosos, yo qué sé.
A la vista parece mas pequeña de lo que es, y en el uso finge ser más grande que en la mesa. Es curioso. Supongo que es efecto visual de la transparencia. Una transparencia, por cierto, mucho menos sedosa que la que ahí abajo os he puesto en una foto de la internet. No me digáis porqué, pero de vez en cuandito, al moverse ella porque sí, surgen unos reflejillos azules muy tenues, como un susurro cromático en las aguas tersas del cuerpo que cubre la azul serenité de Waterman que se aloja en el convertidor.
Ni pesa ni no pesa. No tiene aspecto técnico; quiero decir que no da la impresión de exhibir nada del otro jueves. No sé, es visualmente muy leve, no impacta. Y al tacto produce un puntito de erotismo grafológico: una mezcla de placer de roce con deseo de culminación... literaria, claro.
Punto extraordinariamente suave. Muy sensible a la presión. Sutilmente dispar en los p'arribas y en los p'abajos. Con un flujo extremadamente generoso. Como si la pluma estuviera siempre deseando que digamos cosas, que le echemos al papel lo que vive en la cabeza.
Me parece una maravilla. Ente sus virtudes me encanta la que consiste en no parecer magnífica. Quiero decir que no me extrañaría que se lo crean si respondo "es de propaganda" a quien -lego- me pregunte por ella al verla. Encuentro una satisfacción rara y gorda al utilizar un instrumento de altísima calidad que no lo parece. Como si la difusión de ese placer se reservase a quienes tengan la capacidad de reconocer y entender el ingenio talentoso de aquellos nipones que, según tengo entendido, trabajan con singular esmero para traernos estas cositas tan guays a los occidentales.
Aquí os pinto miniaturas (a ver si aprendo a hacerlas grandes, coño) para que os percatéis del tamaño al comparar, veáis fotos buenas (y por tanto no mías) y apreciéis el trazo (también comparado con algotras yeguas de la cuadra).
Hace tiempo que no os agradezco vuestra sabiduría, vuestra generosidad e incluso algunos comentarios proclives. Pues lo hago ahora de nuevo. Es un honor estar aquí con vosotros. Buenas noches.
