Hay alimentadores de plástico pueden ser buenos, sí, algunos están muy bien diseñados y van muy bien, el de la Lamy 2000 sin ir más lejos. Los de Sailor y Pelikan también.
Otros muchos, por no decir todos los demás, dejan mucho que desear. Para un plumín fino casi cualquier alimentador vale, pero en los más gruesos es donde se acentuan las carencias. Doy gracias a Conway Stewart por tener un alimentador tan malo que evita me gaste el dinero en sus preciosas resinas. Las Delta con alimentador de plástico son igual de mediocres, son alimentadores que acumulan tanta tinta en sus branquias que las primeras dos lineas escriben con mucho flujo y llegado un punto, justo cuando se acaba esa tinta acumulada, se vuelve seco - no me gusta esto-. Algo parecido pasa en las MontBlanc actuales; sus puntos son muy secos y en los oblicuos y puntos gruesos les falta un puntito más de flujo. Algunas Kaweco fallan más que una que una carabina de feria.
Los de alimentadores de ebonita son otra. La misma Delta, de la que he criticado sus alimentadores de plástico, tiene unos alimentadores de ebonita fabulosos (los he visto en la DV oversize, en la Roma Imperiale y en varias Ed. especiales). Los de Aurora, los de MB anteriores a los 90, los de Omas ¡Ay Omas, qué chorro! Los de Astoria o Goldfink, los de algunas Montegrappa, ... Qué decir de las antiguas o yayas. Para ser honesto, algunos alimentadores de ebonita hay que ajustarlos, y eso, en plumas que cuestan tres dígitos largos, tiene delito. Eso sí, cuando están bien ajustadas superan con creces a los de plástico.
¡...que me voy del hilo! Pero bueno, ya puestos a repartir leña voy a llegar hasta el final; tampoco me gusta la poca uniformidad de los alimentadores Lamy, no todos vienen ajustados con el mismo flujo, y eso que los prueban.
Todos hablan maravillas de la Lamy, ciertamente escriben fenomenal, pero sólo las que vienen bien, porque hay muchas vienen cortas de flujo.
Los alimentadores de las Safari también son buenos, pero se echa de menos uno un poco mejor a la altura de los plumines de oro de Lamy, que son maravillosos.
Resumiendo, estoy de acuerdo en todo lo que has dicho en este post.
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