Osinar
Forer@ Senior
Sin verificar
La belleza tiene que ver con la salud, o eso dicen. La salud alimenta lo que cada quién tenga de bello, si bien la belleza alimenta la salud (al menos la mental) de todos los demás. Quizá pueda resultar precioso algo que está muy insano, pero es más que probable que, con salud, la belleza se amejore.
La Bella estaba malita. Malitísima. Ya cuando os la presenté cantaba achaques. Pues a peor. Que si se orina a deshoras. Que si no encuentra uno el alimento adecuado. Que si me duerme mal, que si no viaja, que si de pronto.... en fin, fatal. Al médico.
Con que a la calle del seudónimo de Monsieur Francois de Salignac (bueno más que del seudónimo, la calle de su patria chica). De eso hace un par de semanas o así.
Y llama Teo. Que ya. Que le parece que ya. Porque hay que ver las vueltitas que le habíamos dado a La Bella y a sus Males... Antes habían cambiado los chismes de por dentro, esos negrones alargados espiralosos. Y ná. Luego, ensellaron los bordes esos de las alas del plumin, a ver. Y ahora, hasta el plumin. Su pulmín, vaya.
Y cómo no, a un precio inversamente proporcional a la eficacia. O sea, la máxima eficiencia posible.
El caso es que La Bella (ahí arriba os la retrato) está más bella, seguramente porque está sana. Que la salud condiciona la belleza para mal y para bien.
... que yo hasta hace unos años también. Ah, las custom, lo mejor. Bonita, Paco, bonita.
Y es que hay una cierta relación entre algún tipo de moto (su afición, su alma) y esta cosa de la grafopatía que nos atañe. Que se lo pregunten, si no, a algún Maraudero que asalta bosques animados...
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