ankor80
Habitual
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Hola compañeros.
Se que no soy el primero y probablemente tampoco el último que va a escribir un hilo sobre las impresiones que le ha causado el Crepas Cayman. De hecho tampoco creo que vaya a ser original en mis apreciaciones, pero ahí van.
Debo empezar diciendo que me apunté al final, final del proceso. No concebía llevar un reloj sin fechador, además de ser un reloj tan alto y el armis, EMHO un armis desfasado. Demasiados brillos y demasiado "grano de arroz". Por otro lado había algo, "atemporal" en él que me atraía cada día más. Lo iba mirando y mirando, todos los días y poco a poco me fue enamorando. Así que ,con la experiencia de otros relojes de Crepas, sabiendo que en realidad no iba a arriesgar dinero, ya que lo podría vender fácilmente en Fcv en el caso que no me gustara. Me apunté cuando sólo quedaban 6 a la venta. Así que tuve que elegir entre pocos números y el que más me gustó, y ese fue el 185.
Como no había comprado nunca un reloj a Crepas, no sabía el maravilloso trato que despachan a los clientes y lo atenta que es Ana y los detalles que sabe tener con cada uno. Así que esa fue una parte muy fácil y gratificante. Como me apunté a finales del mes de Enero, no tuve una sensación de larga espera, y sin darme cuenta ya estaba cerca del 15 de Marzo. Ellos habían previsto entregarlos entre el 15 al 30, y yo que me dedico al mundo comercial, fui bastante escéptico. Con suerte lo tendríamos el 30, sino al pasar Semana Santa... Y el día 20, sólo 3 días laborables después del 15 recibía un sms con un aviso de entrega para el día siguiente, realmente increíble en este mundo en el que nos movemos...
Así que el día 21 viernes llegó. Recibirlo y abrirlo fue todo un ejercicio de ansiedad. Verlo, hacerle las fotos y ser de los primeros que colgaba en el Foro fotos que todos esperaban... Pero esto no me impidió ver que los detalles estaban muy cuidados. Una caja barnizada "negro piano", con tejido en blanco y ahí destacando entre la sobriedad y el buen gusto, un reloj y una esfera cautivadora.
El armis como me suponía, no era de mi agrado. No digo nada de los endlinks, que creo que los rectificaron para que ajustara bien al final de las asas. Es que me parece de persona mayor, demasiado brillo para ese reloj, que está entre el reloj de calle y la "máquina" puramente dicha. Me lo puse y lo primero que note fue su ergonomía, y eso que parece imposible en un reloj de casi dos cm. de alto. El armis comodísimo, pero estéticamente no me gustó. No había pedido la Jacobo de cuero, pero sí una de caucho del Tektite. Le probé la textil que viene con la dotación... Y se hizo LA LUZ!!! Esta correa, a la cual nunca se nombra, es EMHO, la que le queda perfecta.
Un poco dura al principio, ya que está hecha de dos telas unidas y cosida. Lo que le da la rigidez para que el reloj no cabecee. Para que se adapte perfectamente a la muñeca necesita mojarse unas cuanta veces y así "domarla", pero no cuesta mucho tiempo. Me encanta el ardillon y los grandes agujeros redondos de esta correa. Y así me lo puse y empecé a no quitarmelo. No me pesaba, me sentía satisfecho y curiosamente, sin tener casi nada, no le extrañaba nada más...
Me empecé a quedar ensimismado mirándo esas agujas que me recuerdan a espadas "Toledanas" dispuestas a defender o atacar... Empecé a ver que se puede vivir sin llevar el fechador, algo impensable en mi hasta este momento. Y ha sucedido algo curioso para mi, voy a la caja de los relojes y los miro y a cada uno le encuentro una pegita, y miro el Cayman y me da la seguridad de que en cualquier situación quedará bien. Es sobrio, es elegante, es un "maquinón" y discreto a la vez. Que para quien no sepa mucho de relojes, llevo un reloj "anónimo" pero yo voy satisfecho porque se que llevo un "pura sangre".
Así que pasa el tiempo y no me lo quito de la muñeca y me doy cuenta de que hice un gran negocio comprando este reloj. Me satisface completamente, le he comprado a una empresa española y he pagado un precio seguro de una tercera parte respecto al precio si hubiera sido el mismo con una marca de cierto renombre en el panorama de la Relojería de Lujo.
Asi que, como dice otro compañero, este no me lo vendo si no es por un caso de extrema necesidad.
Esperaré pacientemente la proxima realización de esta empresa que es un ejemplo de como se deben hacer las cosas y que los españoles, si queremos, sabemos hacerlas.
Enhorabuena a CREPAS!!!
Se que no soy el primero y probablemente tampoco el último que va a escribir un hilo sobre las impresiones que le ha causado el Crepas Cayman. De hecho tampoco creo que vaya a ser original en mis apreciaciones, pero ahí van.
Debo empezar diciendo que me apunté al final, final del proceso. No concebía llevar un reloj sin fechador, además de ser un reloj tan alto y el armis, EMHO un armis desfasado. Demasiados brillos y demasiado "grano de arroz". Por otro lado había algo, "atemporal" en él que me atraía cada día más. Lo iba mirando y mirando, todos los días y poco a poco me fue enamorando. Así que ,con la experiencia de otros relojes de Crepas, sabiendo que en realidad no iba a arriesgar dinero, ya que lo podría vender fácilmente en Fcv en el caso que no me gustara. Me apunté cuando sólo quedaban 6 a la venta. Así que tuve que elegir entre pocos números y el que más me gustó, y ese fue el 185.
Como no había comprado nunca un reloj a Crepas, no sabía el maravilloso trato que despachan a los clientes y lo atenta que es Ana y los detalles que sabe tener con cada uno. Así que esa fue una parte muy fácil y gratificante. Como me apunté a finales del mes de Enero, no tuve una sensación de larga espera, y sin darme cuenta ya estaba cerca del 15 de Marzo. Ellos habían previsto entregarlos entre el 15 al 30, y yo que me dedico al mundo comercial, fui bastante escéptico. Con suerte lo tendríamos el 30, sino al pasar Semana Santa... Y el día 20, sólo 3 días laborables después del 15 recibía un sms con un aviso de entrega para el día siguiente, realmente increíble en este mundo en el que nos movemos...
Así que el día 21 viernes llegó. Recibirlo y abrirlo fue todo un ejercicio de ansiedad. Verlo, hacerle las fotos y ser de los primeros que colgaba en el Foro fotos que todos esperaban... Pero esto no me impidió ver que los detalles estaban muy cuidados. Una caja barnizada "negro piano", con tejido en blanco y ahí destacando entre la sobriedad y el buen gusto, un reloj y una esfera cautivadora.
El armis como me suponía, no era de mi agrado. No digo nada de los endlinks, que creo que los rectificaron para que ajustara bien al final de las asas. Es que me parece de persona mayor, demasiado brillo para ese reloj, que está entre el reloj de calle y la "máquina" puramente dicha. Me lo puse y lo primero que note fue su ergonomía, y eso que parece imposible en un reloj de casi dos cm. de alto. El armis comodísimo, pero estéticamente no me gustó. No había pedido la Jacobo de cuero, pero sí una de caucho del Tektite. Le probé la textil que viene con la dotación... Y se hizo LA LUZ!!! Esta correa, a la cual nunca se nombra, es EMHO, la que le queda perfecta.
Un poco dura al principio, ya que está hecha de dos telas unidas y cosida. Lo que le da la rigidez para que el reloj no cabecee. Para que se adapte perfectamente a la muñeca necesita mojarse unas cuanta veces y así "domarla", pero no cuesta mucho tiempo. Me encanta el ardillon y los grandes agujeros redondos de esta correa. Y así me lo puse y empecé a no quitarmelo. No me pesaba, me sentía satisfecho y curiosamente, sin tener casi nada, no le extrañaba nada más...
Me empecé a quedar ensimismado mirándo esas agujas que me recuerdan a espadas "Toledanas" dispuestas a defender o atacar... Empecé a ver que se puede vivir sin llevar el fechador, algo impensable en mi hasta este momento. Y ha sucedido algo curioso para mi, voy a la caja de los relojes y los miro y a cada uno le encuentro una pegita, y miro el Cayman y me da la seguridad de que en cualquier situación quedará bien. Es sobrio, es elegante, es un "maquinón" y discreto a la vez. Que para quien no sepa mucho de relojes, llevo un reloj "anónimo" pero yo voy satisfecho porque se que llevo un "pura sangre".
Así que pasa el tiempo y no me lo quito de la muñeca y me doy cuenta de que hice un gran negocio comprando este reloj. Me satisface completamente, le he comprado a una empresa española y he pagado un precio seguro de una tercera parte respecto al precio si hubiera sido el mismo con una marca de cierto renombre en el panorama de la Relojería de Lujo.
Asi que, como dice otro compañero, este no me lo vendo si no es por un caso de extrema necesidad.
Esperaré pacientemente la proxima realización de esta empresa que es un ejemplo de como se deben hacer las cosas y que los españoles, si queremos, sabemos hacerlas.
Enhorabuena a CREPAS!!!
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