ferrolano
Forer@ Senior
Sin verificar
Modelo en cuestión
Video de la rana (frogman)
Primeras impresiones:
Hay un mundo de direrencia entre los Frogman y el resto de relojes casio G-shock, fundamentalmente las correas, son más gruesas, su interior es rugoso, su grosor superior, es un aspecto valorable a veces subjetivamente, pero todo en la rana la hace superior al resto. Tiene mucho en común con una z22 de Seiko
Son más caros que la mayoría, pero lo valen una vez que lo tienes en la mano y lo comparas con otros modelos de esta serie, en fin cualquiera de los modelos que solemos tener como primera adquisición.
Otra cosa a destacar es el color, en las fotos que la mayoría están sobreiluminadas no se aprecia, en realidad es más oscuro, como la pizarra mojada y le da un aspecto muy técnico.
Los botones también llaman la atención, estos son grandes y fáciles de usar con guantes, aunque el tamaño de la caja los haga parecer pequeños.
El reloj es masivo, grande de verdad, tampoco como los últimos modelos que se han ido de madre, pero a la vez cómodo, en mi muñeca de 17,5 cm. no queda ni grande ni pequeño, se adapta perfectamente a su contorno y no aprieta (a mi que me gusta dormir con reloj, me gusta que por la mañana no lo tenga clavado a la muñeca). La correa tiene la suficiente longitud como para ajustarse sobre el neopreno.
Para ser un reloj de "plástico" se le aprecia claramente la calidad de fabricación y el mimo con el que está realizado, donde todo tiene una función definida.
En cuanto a los detalles técnicos, se observa lo siguiente:
Al abrirlo con la jaxa, nos encontramos con una chapa plateada y circular, doblada al medio creando un efecto muelle entre módulo y tapa trasera, consta de dos lenguetas que se introducen en el módulo y evitan su rotación. Bajo ella está una cojín de goma con los rebajes que podemos encontrar en cualquier otro G, para que las patillas del módulo toquen la tapa y tengamos los pitidos característicos y las alarmas.
Si ya la chapa es novedosa, el módulo en si es lo que más llama la atención. Para empezar es de carga solar, en la pantalla están las celdas que transforman la energía solar en corriente y en la parte inferior del módulo existe dos muelles de cobre que son los que conducen esta carga al acumulador colocado en su parte inferior.
Como podeis ver lleva una camisa metálica rodeándolo y aferrándose a el con pestañas tanto por la parte delantera como la trasera. Esto hace que encaje milimétricamente en la bata:
Evitando cualquier movimiento pero haciendo que su extracción sea cuidadosa no sobra espacio y tenemos que ejercer palanca en el módulo para sacarlo de una caja que es harina de otro costal, una pieza sólida de fundición de titanio con partes mecanizadas:
Bata y camisa quedán ajustadísimas, todo realmente va muy ajustado, no recomiendo sacarla pues los botones pasan por su interior y podríamos estirarla. Este ajuste y que la bata sea de caucho hace que absorba cualquier golpe. Este es un reloj que lo puedes tirar al aire, sabiendo que cuando lo recojas del suelo, va estar igual que antes de lanzarlo.
Los cuatro botones sellados con epoxy garantizan la estanqueidad, se puede apreciar también en la foto anterior la tórica que sella caja y tapa, y me llamó la atención que viene en seco, no aprecié que estuviese aceitada, no dudo de que cumpla su función sobradamente, pero también opino que en medio salino y sin cambios a rajatabla pierda antes de tiempo sus propiedades aislantes.
La foto siguiente es para que podais apreciar módulo y caja formando un todo, la exactitud milimétrica con la que encaja todo y os percateis de las pestañas metálicas que conectan módulo y botonería.
Otro detalle característico de los G-shock es que toda la caja va introducida dentro de un molde de caucho, intercambiable para que en caso de desgaste o ruptura podamos sustituirlo devolviéndole todo el esplendor al reloj.
Como podeis apreciar en la última foto, tras la pantalla se observan dos burbujas, dado que he rellenado el interior de aceite de silicona, por lo que ahora hablamos de un diver de equipresión. Aumentando notablemente sus aptitudes subacuáticas.
Actualmente este modelo ha sido renovado por este otro (el de las fotos convive conjuntamente todavía en el mercado nipón con el más nuevo, por algo será), que incorpora como lindezas, un gráfico de mareas y un módulo de radiofrecuencia, con lo que el poner el reloj en hora pasa prácticamente a no ser necesario en la mayor parte del mundo, pues existen un total de seis radioemisoras en Japón, EEUU, Alemania, Gran Bretaña y China, que dan prácticamente cobertura mundial.
Foto de las emisoras:
Y esto es todo.
Video de la rana (frogman)
Primeras impresiones:
Hay un mundo de direrencia entre los Frogman y el resto de relojes casio G-shock, fundamentalmente las correas, son más gruesas, su interior es rugoso, su grosor superior, es un aspecto valorable a veces subjetivamente, pero todo en la rana la hace superior al resto. Tiene mucho en común con una z22 de Seiko
Son más caros que la mayoría, pero lo valen una vez que lo tienes en la mano y lo comparas con otros modelos de esta serie, en fin cualquiera de los modelos que solemos tener como primera adquisición.
Otra cosa a destacar es el color, en las fotos que la mayoría están sobreiluminadas no se aprecia, en realidad es más oscuro, como la pizarra mojada y le da un aspecto muy técnico.
Los botones también llaman la atención, estos son grandes y fáciles de usar con guantes, aunque el tamaño de la caja los haga parecer pequeños.
El reloj es masivo, grande de verdad, tampoco como los últimos modelos que se han ido de madre, pero a la vez cómodo, en mi muñeca de 17,5 cm. no queda ni grande ni pequeño, se adapta perfectamente a su contorno y no aprieta (a mi que me gusta dormir con reloj, me gusta que por la mañana no lo tenga clavado a la muñeca). La correa tiene la suficiente longitud como para ajustarse sobre el neopreno.
Para ser un reloj de "plástico" se le aprecia claramente la calidad de fabricación y el mimo con el que está realizado, donde todo tiene una función definida.
En cuanto a los detalles técnicos, se observa lo siguiente:
Al abrirlo con la jaxa, nos encontramos con una chapa plateada y circular, doblada al medio creando un efecto muelle entre módulo y tapa trasera, consta de dos lenguetas que se introducen en el módulo y evitan su rotación. Bajo ella está una cojín de goma con los rebajes que podemos encontrar en cualquier otro G, para que las patillas del módulo toquen la tapa y tengamos los pitidos característicos y las alarmas.
Si ya la chapa es novedosa, el módulo en si es lo que más llama la atención. Para empezar es de carga solar, en la pantalla están las celdas que transforman la energía solar en corriente y en la parte inferior del módulo existe dos muelles de cobre que son los que conducen esta carga al acumulador colocado en su parte inferior.
Como podeis ver lleva una camisa metálica rodeándolo y aferrándose a el con pestañas tanto por la parte delantera como la trasera. Esto hace que encaje milimétricamente en la bata:
Evitando cualquier movimiento pero haciendo que su extracción sea cuidadosa no sobra espacio y tenemos que ejercer palanca en el módulo para sacarlo de una caja que es harina de otro costal, una pieza sólida de fundición de titanio con partes mecanizadas:
Bata y camisa quedán ajustadísimas, todo realmente va muy ajustado, no recomiendo sacarla pues los botones pasan por su interior y podríamos estirarla. Este ajuste y que la bata sea de caucho hace que absorba cualquier golpe. Este es un reloj que lo puedes tirar al aire, sabiendo que cuando lo recojas del suelo, va estar igual que antes de lanzarlo.
Los cuatro botones sellados con epoxy garantizan la estanqueidad, se puede apreciar también en la foto anterior la tórica que sella caja y tapa, y me llamó la atención que viene en seco, no aprecié que estuviese aceitada, no dudo de que cumpla su función sobradamente, pero también opino que en medio salino y sin cambios a rajatabla pierda antes de tiempo sus propiedades aislantes.
La foto siguiente es para que podais apreciar módulo y caja formando un todo, la exactitud milimétrica con la que encaja todo y os percateis de las pestañas metálicas que conectan módulo y botonería.
Otro detalle característico de los G-shock es que toda la caja va introducida dentro de un molde de caucho, intercambiable para que en caso de desgaste o ruptura podamos sustituirlo devolviéndole todo el esplendor al reloj.
Como podeis apreciar en la última foto, tras la pantalla se observan dos burbujas, dado que he rellenado el interior de aceite de silicona, por lo que ahora hablamos de un diver de equipresión. Aumentando notablemente sus aptitudes subacuáticas.
Actualmente este modelo ha sido renovado por este otro (el de las fotos convive conjuntamente todavía en el mercado nipón con el más nuevo, por algo será), que incorpora como lindezas, un gráfico de mareas y un módulo de radiofrecuencia, con lo que el poner el reloj en hora pasa prácticamente a no ser necesario en la mayor parte del mundo, pues existen un total de seis radioemisoras en Japón, EEUU, Alemania, Gran Bretaña y China, que dan prácticamente cobertura mundial.
Foto de las emisoras:
Y esto es todo.
Fíjate que yo no soy mucho de Casios y hasta me han entrado ganas de lanzarme a por uno 
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