Johannes
Habitual
Sin verificar
Hace unos 10 meses que tomé la decisión de comprarme un Glashütte Original. Tenía bastante claro lo que me gustaba, pero había varios modelos que se me presentaban como muy apetecibles y tenía que elegir.
Me gustaba la marca, creada en 1994 (tras la privatización y desmembramiento de GUB): centrada en la fabricación de manufacturas de gran calidad y que ofrecía modelos de gran originalidad estética (una especie de aire sajón, diferenciado del Suizo).
La compra implicaba varias dificultades, principalmente el precio elevado típico de esta gama de relojes y el hecho de que no se comercializara en Mallorca.
Una vez, gracias a vuestra ayuda, que hube reducido el número de "candidatos", me puse en contacto con una prestigiosa relojería de Madrid que, muy amablemente, se pusieron a mi disposición para tener disponibles las piezas que me interesaban en las fechas que había programado un viajecito, un largo fin de semana, en la capital.
Así, de los varios modelos que me probé, el que más me gustó, tanto por su equilibrio estético como por cómo me quedaba (variables subjetivas) fue el GO PanoReserve de esfera blanco-plateada.
Es un reloj que, para ser usado para "vestir", es grandecito, pero que queda dentro de las medidas actualmente aceptadas (bajo una camisa tiene problemas).
Tiene una caja de 40mm de diámetro y 11’7 de altura que combina el acero pulido y el cepillado.
La esfera es de un blanco-plateado, con índices aplicados de oro blanco, y presenta la tradicional distribución de subesferas descentradas a la que se añade un indicador de reserva de marcha y la magnífica gran fecha. Esa gran fecha es una de las complicaciones que más me gustan de Glashütte Original, es, como he dicho muchas veces, el gran datario que más me gusta (más que los de Lange&Söhne, Patek Philippe, Jaeger Le Coultre,…)
Además de su original estética sajona, una de las cosas que más me gustan del reloj es su espectacular calibre, un movimiento de remonte manual, llamado 65-01, y que tienen una reserva de 42 horas, un precioso doble cuello de cisne para el ajuste y luce piezas grabadas a mano.
El movimiento es grande, de 32’2 mm de diámetro y 6’1 mm de alto (el clásico Unitas 6497 mide 36’6 X 4’5 mm) y late a 4Hz.
La correa es negra, fabricada con piel de caimán de Luisiana bastante gruesa y se ajusta con un cierre desplegable (hubiera preferido una tradicional correa con ardillón).
Todo ello hacen de este, un reloj que considero muy especial (tanto estética como técnicamente) y que, saliéndose de los cánones más tradicionales, sabe mantener una estética elegante y… en la muñeca queda la mar de bien. Aunque con las camisas... incluso con camisas sport va un poco justo para esconderse bajo el puño, lo suyo es lucirse, jejeje
Hasta aquí la presentación, espero no haber sido excesivamente aburrido.
¡Saludos!
Me gustaba la marca, creada en 1994 (tras la privatización y desmembramiento de GUB): centrada en la fabricación de manufacturas de gran calidad y que ofrecía modelos de gran originalidad estética (una especie de aire sajón, diferenciado del Suizo).
La compra implicaba varias dificultades, principalmente el precio elevado típico de esta gama de relojes y el hecho de que no se comercializara en Mallorca.
Una vez, gracias a vuestra ayuda, que hube reducido el número de "candidatos", me puse en contacto con una prestigiosa relojería de Madrid que, muy amablemente, se pusieron a mi disposición para tener disponibles las piezas que me interesaban en las fechas que había programado un viajecito, un largo fin de semana, en la capital.
Así, de los varios modelos que me probé, el que más me gustó, tanto por su equilibrio estético como por cómo me quedaba (variables subjetivas) fue el GO PanoReserve de esfera blanco-plateada.
Es un reloj que, para ser usado para "vestir", es grandecito, pero que queda dentro de las medidas actualmente aceptadas (bajo una camisa tiene problemas).
Tiene una caja de 40mm de diámetro y 11’7 de altura que combina el acero pulido y el cepillado.
La esfera es de un blanco-plateado, con índices aplicados de oro blanco, y presenta la tradicional distribución de subesferas descentradas a la que se añade un indicador de reserva de marcha y la magnífica gran fecha. Esa gran fecha es una de las complicaciones que más me gustan de Glashütte Original, es, como he dicho muchas veces, el gran datario que más me gusta (más que los de Lange&Söhne, Patek Philippe, Jaeger Le Coultre,…)
Además de su original estética sajona, una de las cosas que más me gustan del reloj es su espectacular calibre, un movimiento de remonte manual, llamado 65-01, y que tienen una reserva de 42 horas, un precioso doble cuello de cisne para el ajuste y luce piezas grabadas a mano.
El movimiento es grande, de 32’2 mm de diámetro y 6’1 mm de alto (el clásico Unitas 6497 mide 36’6 X 4’5 mm) y late a 4Hz.
La correa es negra, fabricada con piel de caimán de Luisiana bastante gruesa y se ajusta con un cierre desplegable (hubiera preferido una tradicional correa con ardillón).
Todo ello hacen de este, un reloj que considero muy especial (tanto estética como técnicamente) y que, saliéndose de los cánones más tradicionales, sabe mantener una estética elegante y… en la muñeca queda la mar de bien. Aunque con las camisas... incluso con camisas sport va un poco justo para esconderse bajo el puño, lo suyo es lucirse, jejeje
Hasta aquí la presentación, espero no haber sido excesivamente aburrido.
¡Saludos!
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